Print this page

Después de la histórica elección / Desafios del Frente de Izquierda Unidad en la pelea contra el ajuste y el FMI

Escribe Gabriel Schwerdt

Todavía siguen las repercusiones favorables de la histórica elección que hicimos con el FIT-U el 14 de noviembre. Con los 1.264. 238 votos que sacamos, logramos cargos nacionales, provinciales y municipales. También, por primera vez se lograron concejales en cuatro municipios del gran Buenos Aires, donde gobierna desde hace décadas el peronismo. Todos estos cargos fortalecen y consolidan al FIT-U. Los altos porcentajes que se obtuvieron en los municipios del conurbano, con picos que llegaron al 9 y 10% en algunos, arrojan un componente cada vez más obrero y popular de nuestro voto. Se evidencia que una franja de la base peronista kirchnerista, desencantada, rompió con el gobierno y votó al Frente.

Esto refleja un reconocimiento a la unidad que se viene forjando desde hace diez años, con un programa claro, socialista y revolucionario. Y con una práctica cotidiana de apoyo a las luchas de las y los trabajadores, jóvenes, mujeres, de las diversidades y del movimiento ambientalista contra el saqueo capitalista. En la clase trabajadora, muchas de las agrupaciones sindicales que se referencian en los partidos que componemos el FIT-U junto a activistas independientes están dando grandes peleas para ganar la conducción de los sindicatos. En nuestro caso es para destacar al sector docente combativo, que sigue avanzando en todo el país, resaltando el triunfo de la lista Multicolor en ATEN Capital de Neuquén. Y los ferroviarios del Sarmiento con la lista Bordó, que en estos días van nuevamente a disputar la seccional y el cuerpo de delegados contra la burocracia de Sasia. Esto también potencia la coordinación que llevamos adelante con el Plenario Sindical Combativo.

El FIT-U no es sectario ni tiene techo

Este gran resultado electoral no nos puede hacer olvidar que en las elecciones PASO de septiembre fuimos a internas. El MST organizó listas propias en todos lados, aunque perdió nacionalmente y en las principales provincias. Las pretensiones desmedidas de ubicaciones en las listas fueron enmarcadas por el MST con un discurso de “renovar” a la izquierda, de no ser “sectarios” y lograr “más amplitud”, lindas palabras para engañar a desprevenidos que en realidad esconden que el MST añora viejas alianzas “más amplias” con sectores o personalidades de la centroizquierda. Cuestión que rechazamos desde la fundación del FIT en el 2011. Los propios resultados en estas elecciones desarman el discurso y el divisionismo del MST, y demuestran que el Frente de Izquierda Unidad y su programa no son sectarios, ni estamos ante “un techo” en nuestro crecimiento, ni nos contentamos sólo con “lograr un par de bancas”.

Mientras el ajuste que aplica el gobierno peronista kirchnerista sigue decepcionando a millones de trabajadores y jóvenes, el Frente de Izquierda puede seguir creciendo y  fortaleciéndose como la verdadera alternativa para el pueblo trabajador de nuestro país.
 
En el 2022 postulemos al FIT-U en la lucha contra el ajuste y el FMI

Venimos de una jornada de lucha memorable contra el acuerdo con el FMI, que impulsamos desde el FIT Unidad, a la que correctamente se sumaron decenas de organizaciones políticas, sindicales, sociales y ambientalistas. Algunos de estos sectores incluso no son de izquierda, aunque seguramente muchos de los que estuvieron en Plaza de Mayo nos votaron, otros no. Pero nos unimos en esta gran acción bajo un programa contra el FMI, por el no pago de la deuda, contra el ajuste y la reforma laboral, contra el saqueo ambiental extractivista. La lucha por estos puntos centrales contra el gobierno y la oposición patronal en nuestro país tiene que seguir, con el FIT Unidad a la cabeza.

Este es el gran desafío que desde Izquierda Socialista creemos que tenemos desde el Frente para el año que viene. Ser protagonistas fundamentales, en unidad con todos los sectores con los que podamos acordar, para apoyar y potenciar las luchas contra el ajuste y el FMI que impone el gobierno peronista kirchnerista, con el acuerdo de la oposición patronal de Juntos por el Cambio. En este sentido es que nos entusiasman enormemente los resultados electorales que obtuvimos y las bancas que se lograron, que están al servicio de esta lucha.