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Massa y su equipo

Publicado en El Socialista N° 541
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Escribe José Castillo

A Sergio Massa muchos lo llaman “el hombre de la Embajada” por sus lazos cuidadosamente cultivados durante años con el poder político y económico norteamericano. Recordemos que años atrás hacía campaña electoral prometiendo “mano dura” a partir de su amistad con el alcalde Rudolph Giuliani de Nueva York. Más cercano en el tiempo, se jactaba de sus contactos con el partido Republicano. No es casualidad que uno de los primeros en felicitarlo fue justamente Mauricio Claver-Carone, el actual presidente del BID colocado allí por Donald Trump. Con la llegada de Biden al poder Massa desempolvó a sus viejos amigos del Partido Demócrata (Juan González, el segundo de Jack Sullivan, presidente del National Security Council, terminal con llegada directa al presidente yanqui). Las relaciones de Massa con los Estados Unidos no son solo políticas, tiene aceitados contactos con el mundo de los buitres especuladores como lo reconoció el titular del JP Morgan.

Massa coqueteó con el propio Macri apenas este asumió a fines de 2015 (recordemos que lo acompañó al foro de Davos en enero de 2016) y es un “confiable” para el empresariado local. El periodista Diego Genoud, autor de la Biografía no autorizada de Sergio Massa, menciona a alguno de sus amigos empresarios: Enrique Esquenazi (Grupo Petersen), Daniel Hadad, Daniel Avila (Grupo América), José Luis Manzano (Edenor y otras empresas), Alberto Pierri (Canal 26) y el fallecido Jorge Brito (Banco Macro). También tiene estrechos contactos con Marcelo Midlin (Pampa Energía) y Carlos Bulgheroni (Pan American Energy).

Para Massa lo más importante seguirá siendo cumplir con el ajuste negociado con el FMI y los pagos de deuda externa. Para eso incorporó a dos figuras con larga historia. Para el recién creado “Comité para el desarrollo del mercado de capitales y seguimiento de la deuda pública” tendrá nada más ni nada menos que a Daniel Marx. Este personaje fue director del Banco Central en la época de Alfonsín cuando ese gobierno reconoció la totalidad de la deuda que impuso la dictadura con el genocidio. Luego fue negociador de la deuda entre 1987 y 1993,  uno de los principales impulsores del Plan Brady durante la época de Menem y Cavallo. Finalmente reapareció como secretario de Finanzas del gobierno de De la Rúa y a fines de 2000 fue uno de los principales negociadores del llamado Blindaje que luego ya con Domingo Cavallo terminaría en el “megacanje” de junio de 2001, otra estafa de la deuda que terminó en una causa judicial escandalosa.

Por si esto fuera poco, el jefe de asesores de Massa será Leonardo Madcur, uno de los responsables principales junto con Guillermo Nielsen y Roberto Lavagna de la reestructuración de la deuda en 2005 en el gobierno de Néstor Kirchner después que el Argentinazo impuso el no pago. Una anécdota para completar la pintura: Madcur, amigo de Javier Milei, fue quien presentó al hoy diputado “libertario” a Eduardo Eurnekián para que este desde Aeropuertos Argentina 2000 le financiara lo que terminó siendo su carrera política.

Como Secretario de Hacienda vuelve Raúl Rigo, quien ya estaba con Martín Guzmán y fue asesor de Hernán Lacunza cuando éste fue ministro de Economía de la Provincia de Buenos Aires con María Eugenia Vidal. Tiene además excelentes contactos con Horacio Rodríguez Larreta. Lo que se dice “un todo terreno” para cualquier gobierno patronal.

Con los antecedentes de Massa y su equipo no es extraño que el establishment económico local le haya hecho un guiño bajando provisoriamente el dólar. Massa está para garantizarles sus superganancias.