Tras las PASO 2017

Escribe Juan Carlos Giordano. Diputado nacional de Izquierda Socialista en el Frente de Izquierda y candidato a renovar su banca por la provincia de Buenos Aires en la lista que encabeza Nicolás del Caño.

El Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) conformado nacionalmente por Izquierda Socialista, el Partido Obrero y PTS, obtuvo 893.265 votos en el escrutinio provisorio de las PASO (que quedará cerca del millón de votos en el recuento definitivo). Comparado con las mismas elecciones de 2015, el FIT ha crecido un 25%. Si a eso le agregamos que siempre sube alrededor de un 30% más entre las PASO y las generales, la proyección da que estaría logrando alrededor de 1.200.000 votos en octubre, algo muy importante para la izquierda revolucionaria en nuestro país.

Estos resultados tienen más valor ante una elección donde jugaron las figuras más importantes de los partidos tradicionales y en medio de una fuerte polarización, como la ocurrida en provincia de Buenos Aires.

Los casi 900 mil votos obtenidos por el Frente de Izquierda demuestran la consolidación de una importante franja de trabajadores, jóvenes y mujeres que votan a la izquierda unitaria, coherente y combativa y le dieron la espalda a las listas de Macri, Cristina, Massa y Randazzo, optando por una alternativa completamente opuesta.

Con esos resultados, el FIT está logrando renovar el cargo a legislador en CABA (Bregman (PTS)-Nicolás Núñez (Izquierda Socialista) y peleando por el diputado nacional en dicho distrito (Ramal (PO)-Marrone (Izquierda Socialista). Estamos obteniendo el legislador de la tercera sección electoral en provincia de Buenos Aires (lugar que ocupa la delegada ferroviaria de Izquierda Socialista, Mónica Schlotthauer) con Kane (PO) y Mercedes Trimarchi (Izquierda Socialista). Y el casi seguro diputado nacional que renovamos en ese distrito con la lista que encabeza Nicolás del Caño (PTS), banca que rotará con Romina del Plá (PO) y Juan Carlos Giordano (Izquierda Socialista). Destacándose la importante elección en el conurbano bonaerense, donde en muchas mesas la lista del FIT le ganó a la de Randazzo (PJ).

El FIT ha conquistado el 12% en Jujuy; 8,25% en Santa Cruz, donde nuestros compañeros docentes están a la cabeza de la pelea contra el brutal ajuste de Alicia Kirchner; el 8,8% en Mendoza; el 4,3% en Córdoba con nuestra compañera Liliana Olivero de Izquierda Socialista peleando por la banca que le robaron en 2013 con fraude; el 3,44% en Santiago del Estero cosechando una elección histórica para la izquierda en esa provincia con Anisa Favoretti de Izquierda Socialista a la cabeza; el 7,3% en Salta; 6,67% en Neuquén, entre otros.

Los casi 900 mil votos obtenidos por el FIT son de un gran valor, porque han apostado por una lista llena de trabajadores y luchadores. Un voto a favor del sindicalismo combativo en contra de todas las variantes de la burocracia sindical. Se ha votado por un plan de emergencia que plantea un salario igual a la canasta familiar. Por la prohibición de los despidos y suspensiones; la reducción de la jornada laboral con igual salario y la estatización de toda fábrica que cierre o despida, como PepsiCo.

El voto al FIT ha sido en apoyo a un programa de fondo, por la suspensión inmediata de los pagos de la deuda externa para destinar ese dinero a salario, trabajo, salud y educación, no para esa deuda usurera, ilegítima y fraudulenta. El voto al FIT es para seguir impulsando la pelea de las mujeres, en contra de los femicidios y por aumento de presupuesto para combatir la violencia de género. Un voto para seguir luchando por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito en el hospital. Un voto para seguir impulsando la campaña unitaria por la aparición con vida de Santiago Maldonado y castigo a los culpables.

El voto al FIT, a su vez, ha sido un reconocimiento a la tan reclamada unidad de la izquierda que ha plasmado desde 2011 para acá. La izquierda oportunista, personalista, divisionista o sectaria, que impide una mayor unidad, ha sido castigada nuevamente. Los votos mayoritarios a la izquierda se dieron para el FIT, logrando ser una fuerza nacional en crecimiento, presentándose en 22 distritos y superando el escollo del 1,5% que imponen las PASO. La izquierda que no pasó, como Izquierda al Frente (MST-mas), paga por ello. Lo mismo Zamora en Capital, quedando detrás del FIT.

El voto al Frente de Izquierda servirá, en definitiva, para fortalecer una alternativa política que enfrente con más fuerza el mayor ajuste que se viene. Para combatir a Macri y a sus cómplices del peronismo. Y prepararse para los desafíos que se vienen, en la estrategia de bregar por un gobierno de los trabajadores.


Felicitamos a los votantes del FIT por su apoyo y a los cientos de fiscales que cuidaron los votos, esfuerzo que llamamos a redoblar para octubre, para proclamar más bancas del Frente de Izquierda que estén en las luchas y postulen una salida de fondo en beneficio del pueblo trabajador.