En marzo de este año, mediante el Decreto 92, el Ministerio de Educación creó la Unidad de Coordinación del Sistema de Formación Docente por el cual desaparece la actual Dirección de Enseñanza superior y los 29 profesorados quedan divididos y pasarán a depender de estructuras diferentes. La flamante Unidad, a cargo del Dr. Palamidessi, está por fuera de la estructura de subsecretarías, depende directamente de la Ministra de Educación, y tiene a su cargo la conducción de seis profesorados, así como el diseño de la política, currículum y evaluación de la formación docente, tanto de la totalidad de los profesorados como de la relación con la UniCABA. Esta última estará a cargo del Licenciado Meiriño. El resto de los profesorados estarán bajo una estructura llamada Dirección de Normales y Educación artística que no se denomina, sin embargo, superior.
De la lectura del Decreto, así como de las reuniones que realizó Ministerio con rectoras y rectores, legisladoras y legisladores, afirmamos que estamos frente al Caballo de Troya de laUniCABA, que prepara la transición inteligente a la misma, afirmando sus verdaderos propósitos, aun cuando los ritmos y medidas tengan mediaciones.

Con la nueva Unidad se pretende lograr los mismos propósitos que originaron el proyecto UniCABA, aunque el diagnóstico presentado oralmente por el Sr. Palamidessi sea distinto al que en su momento fundamentara el Sr. Meiriño en 2017. Este último había afirmado que la UniCABA era necesaria porque faltaban docentes que no ingresaban a las carreras porque no era atractiva la formación, que había que revolucionar la tecnología con plataformas digitales, y que faltaba práctica en la formación, entre otros justificativos. Un diagnóstico diferente al de Palamidessi que sostiene que hay muchos ingresantes que luego no se reciben, entre otros motivos porque habría grandes desigualdades cognitivas, por lo que hay problemas de ineficiencia, que hay mala distribución geográfica de los profesorados, que muchos se superponen y compiten en matrícula, entre otros fundamentos, que las carreras son muy largas y no hay un sistema de formación docente, sino feudos.
Para solucionar estos problemas, sin mucho doble discurso, las medidas a adoptar serían: instalar una forma de ingreso de los estudiantes a las carreras que no explicitaron en qué términos, la reducción de las carreras a 4 años, instalar la evaluación docente, reestructurar las carreras de cada profesorado, así como su ubicación geográfica, redefinir el Reglamento Orgánico Marco (R.O.M) y el Régimen Académico Institucional (R.A.I.), por los cuales los profesorados tienen en la actualidad derecho a organizar sus identidades curriculares, así como sus autoridades electivas por voto directo de docentes, estudiantes y egresados, y redefinir las funciones de los consejos académicos. En esa perspectiva, Ministerio considera que debe reformular la carrera docente aunque, sin decirlo explícitamente, supone cambiar el Estatuto del Docente así como el régimen de concursos, imponer un sistema centralizado digital administrativo de todos los profesorados para controlar la matrícula y la asistencia, así como la designación de docentes.

NUESTRAS AFIRMACIONES
Estamos frente a la intención de dar curso al proyecto de UniCABA, solo que sin sus disfraces, ahora directamente desde las actuales estructuras de los profesorados que verían, en un proceso de varios años, la aplicación de un plan por etapas a saber:
- Un ajuste de las carreras y las cátedras, mediante el/la estudiante volante, el congelamiento de cargos docentes vacantes mediante el no llamado a concurso, la no titularización de los actuales cargos interinos, y el eventual cierre de profesorados que, en un proceso, fueran viendo reducida su matrícula. Alertamos que los porcentajes de docentes con cargos interinos son muy altos y que esto facilitaría el ajuste con la consecuencia de la pérdida de trabajo para muchos docentes por lo que la exigencia de la titularización de todos aquellos que ya pasaron por una instancia de concurso es urgente.

- La pérdida de autonomía de los profesorados mediante la reforma del ROM y de la RAI, de modo que no haya procesos electivos democráticos de sus conducciones como hasta ahora. Esto facilitaría el rediseño centralizado de la currícula de cada carrera y aún de los contenidos de cada cátedra, apoyado, entre otros recursos, en el régimen de evaluación externa. El ROM y el RAI son conquistas de largos años de defensa de la democratización de la formación superior, fundamental para la construcción del conocimiento público, autónomo de los poderes políticos y empresariales que no puede ser abolida. Tenemos que defenderlos.

- El diagnóstico presentado es inaceptable. El desgranamiento de matrícula obedece a causas diferentes de las expuestas en la ocasión. Afirmamos que éste no se debe a bajas capacidades cognitivas o de formación como se afirmó, sino a que nuestros ingresantes no pueden sostener cursadas que pretenden 4 años de prácticas a contra-turno cuando la mayoría trabaja y los empresarios no acatan el derecho a la licencia por examen o prácticas en los horarios de trabajo. Que muchos abandonan por la ausencia del boleto estudiantil que, sin embargo existe en otras provincias como la de Buenos Aires o Córdoba. Que las becas son pocas e insuficientes. Que la estudiante mujer madre no tiene jardines maternales para dejar a sus hijos pequeños. Que reconociendo que existe diversidad en los niveles de formación al ingreso, los propios profesorados realizan cursos y talleres de nivelación que permiten ir compensando las desigualdades. Por eso reafirmamos nuestro reclamo de boleto estudiantil, más becas equivalentes a un salario mínimo mensual, y jardines materno-paterno dependientes de ese Ministerio, no conveniados con privados.

- La división de los profesorados bajo dos direcciones, apunta a destruir su unidad como nivel de educación superior. Afirman que la UniCABA sí tendría autonomía pues se regiría por la Ley de Educación Superior nacional en tanto universidad pero a los profesorados, en cambio, les preparan un retroceso de su actual gobierno autónomo hacia un estatus de “minoridad” como instituciones regimentadas y controladas por el ministerio en todos sus aspectos, sin ninguna justificación. Reclamamos la derogación del Decreto 92/2019 y de la Ley UnicABA.

Es necesario abrir un proceso de debate en asambleas en cada profesorado de estudiantes y docentes para poner en pie nuevamente la movilización para lograr la anulación del Decreto 92/2019, de la implementación de la UniCABA, y de la imputación a los estudiantes del Normal 5 a raíz de su lucha el año pasado.

Laura Marrone
Legisladora Bloque de Izquierda Socialista (FIT)
CE. 1168829255