Con Fernández sigue el FMI

(Tiempo estimado: 3 - 5 minutos)

Con FernándezCada vez se hace más masivo el “Macri ya fue”. Es cierto, pero la verdadera discusión es cómo hacemos para que también se vayan los bajos salarios, el desempleo, la miseria y la entrega de nuestros recursos.

Escribe José Castillo, candidato a Diputado Nacional por la Ciudad de Buenos Aires

Sabemos que muchos de nuestros compañeros de trabajo, estudio, vecinos o familiares tienen expectativas en que votar a Alberto Fernández servirá para “cambiar algo” con relación a la pesadilla que viene siendo el gobierno de Macri.

Alberto Fernández y todos sus voceros han dicho una y mil veces que garantizarán la continuidad de los pagos de la deuda externa. Más aún, ni siquiera se plantean romper el actual acuerdo con el FMI. ¿Cómo harán para desarrollar alguna política de reactivación económica o aumento de salarios con esa hipoteca encima? Fernández nos responde que la salida es “renegociar” (o, usando lo que se ha impuesto como una palabra más moderna “reperfilar”) la deuda externa. Para hacer eso lo primero es negociar con el FMI ¿Es que acaso el Fondo aceptará un cambio de condiciones a cambio de nada? Es imposible: así lo marcan todas y cada una de los acuerdo con ese organismo a lo largo de su historia. Y, en el pasado cercano, las que realizaron Grecia, Portugal y Ucrania. Para renegociar la deuda el Fondo le va a exigir a Alberto Fernández que lleve adelante las reformas laboral y previsional. “Entre los jubilados y los bancos, defenderé a los jubilados”, dice el spot de campaña del Frente de Todos. ¡Mentira! Desafiamos a Alberto Fernández a que explique cómo va a hacer cuando el FMI le exija la reforma previsional. ¿Acaso la va a poner en práctica con otro nombre? Con la reforma laboral ya está claro: el propio candidato a presidente ya afirmó que “está abierto” a flexibilizaciones “gremio por gremio” y ese será el camino. Guillermo Nielsen, el economista que más descarnadamente dice lo que va a suceder en el futuro, lo expresó con todas las letras: “tenemos FMI para ocho años más”.

Sigamos buscando en los dichos de Alberto, o en este caso de Cristina, “como sería” un futuro gobierno de los Fernández. Ya en su libro Sinceramente la actual candidata a vicepresidenta empezó a hablar y elogiar el “pacto social”. Hace quince días, en Tucumán, Alberto empezó a darle cuerpo definitivo, en una reunión en la que estuvieron presentes la cúpula de la CGT (en la persona del burócrata mayor Héctor Daer) y del titular de la UIA Miguel Acevedo. En concreto se planteará un “acuerdo de precios y salarios” por seis meses. Traduzcamos: a cambio de un hipotético “congelamiento de precios”, que ya sabemos que los empresarios no cumplirán, los trabajadores quedaremos comprometidos a no recomponer nuestros salarios. ¡Todo lo perdimos el año pasado y lo que llevamos perdiendo de este!

¿Pero hay acaso algún sector por dónde el gobierno de los Fernández se juegue priorizar para desde ahí reactivar la economía? Sí, eso existe. Pero se trata nada más ni nada menos de, otra vez, apostar al saqueo de nuestros recursos no renovables. La única política en que hay coincidencia absoluta entre macristas y peronistas: la explotación de Vaca Muerta. Más aún, Guillermo Nielsen puso la cuestión blanco sobre negro, proponiendo mayores beneficios y garantías para los “inversores” (léase pulpos multinacionales del gas y del petróleo) que vengan a llevarse nuestros recursos y a destruir nuestro ambiente. Por supuesto, manteniendo el convenio superexplotador para los trabajadores del sector.

Seguir con el FMI y los pagos de deuda, las reformas laboral y jubilatoria, un pacto social que congelará nuestros salarios y más saqueo al estilo Vaca Muerta. Queremos debatir francamente: estamos convencidos que un futuro gobierno del Frente de Todos nos llevará a la continuidad del ajuste y el sometimiento con el FMI. Así de crudo. Eso es, en concreto, lo que sucederá con un futuro gobierno de los Fernández. Ya no estará Macri, es cierto, pero seguirán el ajuste y la entrega, con todas las consecuencias que eso con lleva para los trabajadores.

Por eso decimos que la única salida es la que propone el Frente de Izquierda Unidad: romper con el FMI, dejar de pagar la deuda, nacionalizar la banca y el comercio exterior, recuperar todos nuestros recursos naturales hoy en manos de los pulpos extranjeros y poner todos esos recursos al servicio de un plan de emergencia, obrero y popular, que priorice resolver las más urgentes necesidades populares.


Daer, Acevedo y el pacto social

El titular de la CGT, Héctor Daer y el presidente de la UIA Miguel Acevedo, estuvieron juntos en una entrevista realizada el domingo 22 en el programa “hagan algo” de C5N. Ambos se dedicaron a cantar loas al “pacto social”, diciendo que “garantizaría la recuperación salarial y la reactivación del mercado interno, creando miles de puestos de trabajo”. Claro que el diablo metió la cola cuando el periodista Julián Guarino les preguntó cómo sucedería eso, si los propios empresarios hoy se niegan a pagar el miserable bono de 5.000 pesos que propuso el gobierno de Macri, aduciendo que “no tienen plata para hacerlo”. Lo que siguió fue de antología: Acevedo y Daer se miraron, cada uno esperando que el otro inventara una respuesta. Finalmente, salió a hablar Acevedo, diciendo que los empresarios podrían empezar a dar algún aumento, “luego de que vengan las nuevas inversiones”. Sonó como la lluvia de inversiones que prometía Macri. El “pacto social” quedó desnudo: el pato de la boda serán los trabajadores.

 

Opina el lector

Nombre 
Mensaje 
Localidad 
Teléfono 
email