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“Cheque, cheque”Mientras que Tamborini y Mosca hacían discursos de catedráticos, confusos y aburridos para los oídos de los trabajadores, Perón decía cosas que estos entendían y querían oir: “De cada 35 rurales, sólo uno es propietario. Miren si andamos lejos cuando decimos que deben facilitarse el acceso a la propiedad rural. Debe evitarse la injusticia de que 35 personas anden descalzas, descamisadas y sin techo, para que un lechuguino venga a lucir la galerita y el bastón por la calle Florida”. Al estribillo que se cantaba masivamente de “Braden o Perón”, se sumó luego otro: “Cheque, Cheque”. Denunciaba un jugoso cheque que la UIA entregó a la Unión Democrática, que fue descubierto y publicado en una página completa del diario La Epoca, que apoyaba la campaña del peronismo. El 12 de febrero decía: “Hermanos, con pensamiento criollo, sentimiento criollo y valor criollo, estamos abriendo el surco y sembrando la semilla de una patria libre, que no admita regateos en su soberanía, y de unos ciudadanos libres que no sólo lo sean políticamente, sino que tampoco vivan esclavizados por el patrono. Síguenos: tu causa es nuestra causa; nuestro objetivo se confunde con tu propia aspiración, pues sólo queremos que nuestra patria sea socialmente justa y políticamente soberana.” El 22 de febrero hizo el último llamado: “Todos deben ir a votar. Rompan, si es preciso, cerraduras y candados, salten tranqueras. No tomen bebidas alcohólicas de ninguna clase. Pasado mañana se juega el destino de los trabajadores de la patria: se vota por Braden o Perón.” |
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