|
|||
|
|||
Compartir esta nota en
|
|||
La metamorfosis de Julio César Strassera
Strassera fue el fiscal que pidió en 1985 las penas para los máximos responsables de la última dictadura militar. Así se ganó un gran prestigio nacional. Pero después de más de veinte años utilizó esa trayectoria para intentar salvar a su amigo Aníbal Ibarra. Es decir, para que el ex jefe de Gobierno no responda por las muertes de 194 pibes, posibilitadas por la corrupción que aceita los engranajes para que los empresarios hagan ganancias a costa de la vida ajena. Se ve que para este funcionario las muertes en dictadura son distintas de las ocurridas en democracia. Una sutil e hipócrita diferencia que no pudo lograr que sea percibida de la misma manera por los familiares de las víctimas, que hasta último momento y sorteando la enorme campaña mediática intentando desprestigiar su lucha, lograron mantener bien alto sus banderas hasta lograr un paso sin precedentes. El mismo que el fiscal quería evitar y no pudo. |
|||
|
|||
Izquierda Socialista en Internet: |
|||