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1810 – 2006Por la Segunda IndependenciaEste año, el recordatorio de la fecha patria tiene un componente particular. El presidente Kirchner lo ha convertido en un acto político en la Plaza de Mayo. Al mismo tiempo, seguramente en los discursos de los docentes en las escuelas, se hablará de los próceres de Mayo, de la independencia de España, del nacimiento de una “nueva y gloriosa Nación”. El último medio siglo de historia del país y los tres años de gobierno de Kirchner muestran que el peronismo no representa ningún proyecto de liberación nacional.
En la década del ’40, el peronismo caló hondo en el corazón de millones de hombres y mujeres argentinos. Los trabajadores comenzaron a lograr importantes conquistas en su nivel de vida, como el pleno empleo, excelente salud pública y educación estatal, vacaciones pagas con hoteles sindicales en sierras y mar, jubilación, fueros sindicales para delegados y comisiones internas, entre tantas otras. Durante la presidencia de Perón se nacionalizaron los ferrocarriles y los teléfonos, hubo roces importantes con el imperialismo yanqui y la jerarquía católica, crecieron las fuentes de trabajo industriales, no había endeudamiento externo y se alcanzó un récord mundial del consumo per cápita de carne. ¿Volver al 45? De aquel particular período quedaron ligados al peronismo símbolos y consignas como “las tres banderas” y “liberación o dependencia”. Hoy día hay sectores minoritarios del peronismo (o que se le han sumado), que convocaron al acto del gobierno el 25 con esos objetivos. Por ejemplo, el diputado nacional Miguel Bonasso, la organización Patria Libre- Barrios de Pie, sectores de la CTA, el diputado provincial y funcionario Luis D’Elía, entre otros. Es totalmente utópico prometer la vuelta al bienestar del ’45. Circunstancias excepcionales del país y del mundo explican aquellos grandes progresos populares bajo un gobierno de la burguesía y en el marco del capitalismo. Pero medio siglo imparable de decadencia del país y empobrecimiento de los trabajadores, como ocurrió en décadas posteriores, son la prueba trágica de que no hay liberación nacional ni progreso bajo el capitalismo, con gobiernos patronales y con una fortísima burocracia sindical enquistada en los sindicatos. Con Kirchner y el PJ sigue la dependencia El regreso de Perón en la década del ’70 y el gobierno de Isabel fueron poniendo cada vez más al descubierto que el PJ no tenía nada que ver con un proyecto de liberación. La clase obrera tuvo que hacer la primera huelga general, el Rodrigazo contra un gobierno justicialista. Posteriormente, el gobierno encabezado por Menem, que ganó el voto apelando a la simbología del PJ, profundizó la entrega al imperialismo y el ataque a los trabajadores con las privatizaciones, el crecimiento de la deuda externa y el feroz desempleo. Desde que asumió, Kirchner viene pronunciando discursos antimenemistas y “antimodelo”. Prometió la redistribución de la riqueza y la independencia nacional. Sin embargo, Repsol nos sigue robando el petróleo y el gas, las privatizadas siguen con sus fabulosas ganancias, los acreedores externos siguen cobrando la deuda, mientras el gobierno recibe periódicas felicitaciones de altos funcionarios de Bush por los servicios que presta para ayudar a contener las luchas en el cono Sur, junto a Lula. Todo esto no tiene nada que ver con la liberación y la independencia nacional. El PJ, con Kirchner a la cabeza, mantiene su fidelidad a los grandes patrones y al imperialismo. ¿Quiénes son los patriotas del siglo XXI? Dicen que para muestra basta un botón. Aquellos patriotas de Mayo armaron improvisados ejércitos. Belgrano, Castelli y San Martín encabezaron sus tropas y fueron peleando con inmensos sacrificios, palmo a palmo , la independencia de España. No sólo la nuestra, sino la de toda América del Sur. ¿Y Kirchner? Poco después de asumir envió tropas, pero a Haití, para apoyar a un gobierno títere de los yanquis. Semejante conducta, en la gesta de Mayo, hubiera merecido un severo castigo por parte del gobierno patriota. Como conclusión, decimos que el camino de la segunda independencia del imperialismo no vendrá de la mano de los viejos políticos ni del PJ. Los verdaderos patriotas de hoy son los trabajadores, desocupados y demás sectores populares que enfrentan los modelos imperialistas y luchan cotidianamente para tener salarios dignos, trabajo, salud y educación. Luchadores que, junto con la izquierda, tenemos el enorme desafío de ir construyendo una nueva herramienta política para dar pasos urgentes en ese camino. |
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