|
|||
|
|||
Compartir esta nota en
|
|||
Escribe: |
¿Hacia dónde va Elisa Carrió?
Lilita ha anunciado su alejamiento de la conducción del ARI. Argumentó que es un cambio necesario para el crecimiento de los dirigentes de su partido y para conseguir más libertad: “No puedo estar demasiado tiempo encorsetada”, dijo. Lo cierto es que detrás de su discurso se esconde el fracaso del proyecto político de “centroizquierda” de Carrió. Incluso, hace poco, ha venido mostrando posturas opuestas a las de su bloque. Por ejemplo, en cuanto a la ley que contemplaba la ligadura de trompas y la vasectomía, tratada hace dos semanas en el Congreso, Carrió estuvo en contra, en tanto que el resto de los diputados del ARI, a favor. Es decir, Carrió se mostró contraria a una ley que evitaría nacimientos no deseados. Ni qué hablar de su oposición al aborto, el cual salvaría la vida de miles de mujeres humildes que recurren a “médicos” truchos en situaciones desesperadas. Sin embargo, Carrió siempre habla de poseer políticas… en defensa de la mujer. Tal vez su decisión de alejarse fue porque no logró hegemonizar la conducción del partido, que ella misma fundó, alrededor de su política de alianzas con personajes como López Murphy, a quien no se cansa de elogiar, llamando a impulsar un acuerdo bajo un supuesto “contrato moral”, o de “alianzas de conductas”, aunque sea con personajes de derecha como el ex ministro de De la Rúa, quien tuvo que renunciar en 48 horas cuando quiso aplicar un severo ajuste. Carrió se dice de “oposición”, pero no se la ve apoyando ningún reclamo popular, respalda los pagos de la deuda externa, no dice que hay que echar atrás las privatizaciones menemistas, ni siquiera cuestionó el aumentazo que se dieron Kirchner y los diputados, ya que sostiene que los mismos “tienen que ganar bien” y es demagógico plantear que tienen que ganar como una directora de escuela, como sostenemos desde estas páginas. No hay que olvidarse de que Carrió apoyó a la Alianza y que, habiendo roto con De la Rúa después, en las elecciones del año pasado, hizo una alianza con el delarruista Olivera, llevándolo en su lista, confirmando de esta manera que ella es radical de toda la vida, como lo planteaba en las legislativas del año pasado. Al igual que el Frepaso (que estuvo con De la Rúa y ahora con Kirchner prestándole funcionarios, como Chacho Alvarez, su principal referente, que es el actual titular de la Comisión de Representantes del Mercosur, o D’Alesandro, hoy embajador en Cuba), Carrió y el ARI siguen esos mismos pasos. Si no miremos a Ocaña, que asumió como titular del PAMI, siendo hoy una fervorosa kirchnerista. Carrió y el ARI, mostrados como figuras de centroizquierda, no son alternativa ante el modelo de Kirchner. Por eso no hay que dejarse engañar. Una verdadera alternativa hay que seguir buscándola entre los luchadores y la izquierda. |
||
|
|||
Izquierda Socialista en Internet: |
|||