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Kirchner ante las patotas, el caso López y las papeleras…Se deshilacha el doble discurso
Casi todos los días, subido a alguna tribuna, Kirchner pregona las bondades de su propio gobierno. Sin embargo, varios hechos de la realidad demuestran que del dicho al hecho presidencial hay mucho más que “un largo trecho”. Cinco hechos lo prueban.
Uno. El bochornoso espectáculo que se vivió en San Vicente, con el traslado del cadáver de Perón, fue de alto impacto. Bandas de matones agarrándose a palos, piedrazos y algunos disparos de pistola. A pesar de la ausencia física de Kirchner, eran el peronismo gobernante y su cúpula sindical quienes protagonizaron el escándalo, en un acto que sin ser directamente “oficial” contaba con la participación del Ejército, la Policía y la Gendarmería en su organización, y hasta el presidente iba a hacer uso de la palabra. Kirchner dice encarnar una “nueva política”. Estos hechos demuestran que siguen las viejas patotas de la burocracia sindical y el viejo PJ.
Dos. Mientras tanto, el testigo Jorge Julio López sigue sin aparecer. Ya ha pasado un largo mes sin noticias. Se ha realizado una nueva e importante marcha en Capital y varias en el interior, reclamando por su aparición con vida y castigo a los culpables. Ni Kirchner, tampoco sus funcionarios, ni institución estatal alguna, han podido presentar ningún dato o pista que dilucide su paradero. Kirchner habla de los “derechos humanos”, pero no protegió a López y mantiene el viejo aparato represivo que viene de la dictadura, responsable de su secuestro.
Tres. El matón y ñoqui del PJ Sergio “Tuto” Mahuand -joven K fotografiado al lado del mismo Kirchner cuando le hizo de guardaespaldas en su campaña presidencial de 2003- sigue en libertad. La semana pasada encabezó una patota enviada por el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, para atacar a los trabajadores del Hospital Francés, que están luchando para impedir su cierre. Al comienzo de esta lucha Kirchner hizo su habitual promesa de solución. Pero ocurrió todo lo contrario. En el vaciamiento del hospital tuvo mucho que ver la intervención puesta por el propio gobierno, que intenta vaciarlo para entregar ese nosocomio a los mercaderes privados de la salud. Por eso Kirchner se niega a estatizarlo como lo piden sus trabajadores y médicos. El gobierno habla de defender los “intereses populares”, pero se niega a poner un hospital de alta tecnología al servicio de la salud de la población. ¿En qué quedamos?
Cuatro. Han tenido que regresar a los cortes los vecinos de Gualeguaychú. Kirchner prometió que no permitiría papeleras contaminantes sobre el río Uruguay. Resultó otro engaño. El gobierno ahora rechaza los cortes y hace filmar a los asambleístas, poniendo el litigio en manos de los jueces de La Haya, mientras el Banco Mundial ya dio su veredicto: las papeleras no son contaminantes y por eso anunció un préstamo de 170 millones de dólares para Botnia.
Cinco. Para poner un broche de oro agreguemos que sigue el flagelo de la inflación y los bajos salarios, la mayoría de pobreza. Los Moyano y compañía, jefes de las patotas de San Vicente, pactaron un tope salarial con Kirchner evitando que los salarios superen la inflación, aumento que no le corresponde al 50% de los trabajadores que lo hacen en negro. Ahora es esa misma CGT que está negociando otro tope mucho más bajo para el año próximo. Es por eso que siguen las luchas. Los trabajadores del Francés siguen movilizados. Los hospitales de la provincia de Buenos Aires, nucleados en la CICOP, han votado un plan de lucha con paros de 24 y 48 horas para las semanas venideras. Esta semana hay anunciado un paro de parte de los trabajadores del SMATA. El Suteba-Lomas, junto a ATE Sur, vienen de paro y los docentes bonaerenses vienen debatiendo salir por aumento y contra la ley de educación privatizadora de Kirchner-Filmus.
Para combatir el doble discurso oficial hay que empujar y coordinar las luchas en curso, por la aparición con vida de López, aumentos salariales, contra las papeleras y por trabajo, salud y educación. A su vez, hay que darle el apoyo a los nuevos dirigentes sindicales democráticos y combativos que vinieron surgiendo en los distintos procesos. En el mes de septiembre fue ratificada la conducción del cuerpo de delegados del subterráneo, en elecciones que contaron con la masiva participación de los trabajadores. El 8 de noviembre, en las líneas Sarmiento y Mitre de los ferroviarios de TBA, se realizarán las elecciones a cuerpos de delegados de TBA, donde es un desafío mantener las conducciones combativas y antiburocráticas que se presentan en la Lista Bordó, contra la Lista Verde del burócrata Pedraza. Apoyar las luchas en curso y a los nuevos dirigentes que están surgiendo es la tarea de la hora. |
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