|
|||||
|
|||||
Compartir esta nota en
|
|||||
Escribe: |
Bush quiere 285 mil millones más para la guerra
Bush pidió 93.400 millones adicionales al Congreso de Estados Unidos para su guerra invasora contra Irak. 2007 se convertirá así en el año de mayor gasto militar en la historia de Estados Unidos. Para 2008 exige 141.700 millones, y otros 50 mil para 2009. Para entonces, el total de la campaña en Afganistán e Irak habrá ascendido a unos 800 mil millones, superando a Vietnam y cualquier otra guerra que haya combatido EE.UU. La cifra equivale a 5 veces la deuda externa argentina. Para el año que viene la Casa Blanca propone aumentar el gasto público en 100.000 millones de dólares, hasta dejarlo en 2,9 billones de dólares. En ese océano de cifras, gana el Departamento de Defensa y pierden los pobres. Bush quiere un recorte de 70.000 millones de dólares en los próximos cinco años en los programas sociales Medicare - asistencia sanitaria a los mayores de 65 años- y Medicaid -servicios similares a las personas de ingresos bajos-. Medidas que titula en el presupuesto como “Compasión”, “Mejora del Sistema Sanitario” y “Modernización y mejora del Medicare y Medicaid”, ¡cuando son absolutamente lo contrario! Además dispone hacer permanentes los recortes de impuestos a los más ricos. «Este presupuesto es una noticia devastadora para los niños, ancianos y discapacitados que dependen de los programas sociales», aseguró Rich Umbdenstock, presidente de la Asociación Norteamericana de Hospitales. Bush no solo pide plata, sino que manda más tropas a Irak, reforzó la flota en Medio Oriente para amenazar a Irán, y está inventando nuevas armas sofisticadas para usar en esos países. ¡Fuera yanquis de Irak y de América Latina! Pero no todo es color de rosas para este genocida. Bush tiene hoy un índice de popularidad del 30%, similar al de Nixon antes de su caída en plena catástrofe yanqui en la guerra de Vietnam. En las manifestaciones antibélicas semanas atrás, miles exigían su juicio político y retirada inmediata de las tropas de Irak. Este es el verdadero sentido del aplastante voto popular contra el partido de Bush en las legislativas del año pasado. Actuando como un bombero loco, Bush quiere apagar incendios con nafta al profundizar la política económica de guerra. Y lo hace cada día con menos posibilidades de éxito. Este presupuesto ya generó “tironeos” con los demócratas, que si quisieran, al tener mayoría en ambas cámaras, podrían hacerlo fracasar inmediatamente. Pero aunque dicen estar por la vuelta de los soldados de Irak, solo proclamaron una declaración “no vinculante” que a nadie obliga. No es casual. Los demócratas son el otro partido imperialista que no quiere desestabilizar al régimen como lo sería ahora una destitución de Bush. Por eso lo decisivo es la movilización. Lo más importante es que Bush no logra dominar Irak (en estos días perdió otros 5 helicópteros) y la movilización antiguerra crece en Estados Unidos. Su extensión puede llevar a la caída de Bush y a la derrota final en Irak como sucedió en Vietnam hace 30 años. Llamamos a redoblar la solidaridad con el heroico pueblo irakí. Y a apoyar al pueblo norteamericano para que junto a sus sindicatos y organizaciones populares y antiguerra, se rebelen contra su siniestro gobierno para imponer la retirada de Irak y la destitución del sanguinario fantoche que gobierna Estados Unidos. Un nuevo Vietnam, es casi un hecho. Kirchner recibe a enviados de Bush
El secretario de Justicia de Bush, Alberto Gonzáles, estuvo en nuestro país. Se entrevistó con Aníbal Fernández y Alberto Iribarne en representación del gobierno argentino. Los diarios señalaron que prefirieron no recibirlo en la Rosada por sus antecedentes y críticas de los organismos de DDHH. Lo llaman el «caballero de la tortura» porque las justificó en Guantánamo y Abu Ghraib. Se reunió con la comunidad judía y elogió a la Justicia argentina por el pedido de captura internacional a ex funcionarios iraníes por el caso AMIA. También llegaron a Argentina el subsecretario para Asuntos Políticos de Estados Unidos, Nicholas Burns, y el subsecretario para Asuntos Hemisféricos, Thomas Shannon. Ellos sí fueron recibidos cálidamente por Kirchner. Es para «relanzar» las relaciones bilaterales entre la Casa Blanca y nuestro país. Es decir más dependencia. Ante una pregunta, Burns dijo “nosotros, mi país, los Estados Unidos, somos campeones de los derechos humanos en el mundo”. ¡Cuando invadieron Irak y tienen 460 prisioneros sin defensa en Guantánamo! Kirchner habla de los derechos humanos, pero no tiene problemas en estrecharle la mano a estos agentes de Bush, representantes del mayor genocida del mundo. |
||||
|
|||||
Izquierda Socialista en Internet: |
|||||