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Otro caso de Gatillo Fácil
¡Castigo a los asesinos de Sonia Colman!
El pasado 23 de diciembre Sonia Colman recibió un balazo de Itaka en el corazón. Estaba trabajando, como siempre, vendiendo en la esquina de la estación Del Viso. El perdigón vino de la mano del oficial Benítez de la Bonaerense, quien perseguía a dos menores desarmados. Bajó del patrullero y, en medio de una multitud, no dudó en disparar. Como dijo Antonio Espasa, marido de Sonia, “este asesino tiró a matar y mató”. Días antes, el actual ministro de Scioli y ex fiscal Stornelli, había dicho que le iba a dar “más poder de fuego” a los uniformados.
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Por la rápida acción de movilización y denuncia, y porque Antonio es un reconocido luchador socialista de Pilar, se logró desmontar la mentira policial inicial que “había sido un tiroteo”. La fiscal reconoció los hechos y se logró que Benítez sea destituido. Pero por la carátula de la causa (“homicidio culposo”- es decir, sin intención-), esperará el juicio en libertad. Además, de ser considerado culpable, su prisión quedaría “en suspenso”. Por eso apoyamos el reclamo de que se cambie la carátula por homicidio “con dolo agravado”, para que el asesino espere el juicio en la cárcel y sea castigado con mayor dureza al tratarse de un oficial de la policía.
No al plan represivo de Scioli. ¡Desmantelar el aparato represivo!
La Bonaerense sigue siendo la de Camps y la dictadura. Ese aparato represivo es, además, corrupto, siempre está detrás de todo el accionar delictivo y al narcotráfico, desarmaderos, prostitución, juego clandestino, secuestros extorsivos. Blumberg pide “más policía” pero hasta la banda que asesinó a su hijo estaba conformada por uniformados.
Los empresarios quieren “controlar” a la Bonaerense para que sólo se dedique a perseguir a los sectores populares, reprimir los reclamos sociales, custodiar sus riquezas. Y evitar que sigan delinquiendo contra los ricos, con secuestros o robos violentos.
Los trabajadores sufrimos la inseguridad por partida doble. Cuando nos roban los pocos pesos que cobramos o atacan a nuestra familia. Y la inseguridad del “gatillo fácil”, que nos mata en cualquier momento o lugar, como a Sonia.
Esta policía no está para cuidarnos. Este aparato, intacto, es usado también para secuestrar a Julio López o perseguir y amenazar a luchadores obreros y populares. La solución a la inseguridad popular no vendrá de Scioli y su ministro Stornelli, ni con falsas “depuraciones”, “bonaerense 2” ni “mano dura”. El gobernador bonaerense anunció un plan con amplias facultades represivas que traerá más violaciones a los derechos humanos, detenciones ilegales, torturas y muertes.
Tampoco se soluciona la inseguridad con “discursos progres” como los de Cristina, sino con hechos.
Mientras seguimos luchando por medidas de fondo que terminen con la pobreza, la exclusión, la desocupación para erradicar todo tipo de causas sociales que empujen al delito, hay que autoorganizarse en los barrios para la autodefensa y disuadir el delito. Y fundamentalmente luchar para desmantelar el aparto policial. Destituyendo a quienes fueron parte de la fuerza en la dictadura, a los que intervinieron en casos de “gatillo fácil” o graves delitos. Eligiendo a los comisarios por el voto popular con cargos revocables, entre otras medidas. La presidenta, Scioli-Stornelli y demás gobernadores apuntan para otro lado.
Sonia, un ejemplo de vida al servicio de la lucha de los trabajadores y el socialismo
Sonia, de 44 años y familia peronista, en el año ´83 se sumó a las filas del socialismo revolucionario donde ya, desde la década del ´70, militaba su compañero de toda la vida, el dirigente socialista de Pilar, Antonio Espasa, con quien tuvo sus tres hijas. Desde ese momento su vida y la de su familia estuvieron al servicio de la lucha de los trabajadores y el socialismo. Participó en el apoyo de cuanta lucha estuvo a su alcance. Su casa siempre fue local para la organización revolucionaria y ayudaba a la construcción de un Partido Socialista Internacional. Allí se acercaban siempre dirigentes socialistas de otros países llevándose, como todos los que la conocimos, su calidez, hospitalidad y alegría de vivir y luchar.
Fue abnegada militante del MAS, del MST y de Izquierda Socialista, hasta hace un año cuando, aunque abandonó la militancia orgánica producto de las polémicas políticas en curso, seguía colaborando solidariamente con cuanta lucha y compañero lo requería. Ejemplo para las nuevas generaciones de revolucionarios, nos solidarizamos con nuestro querido Antonio y sus hijas Natalia, Laura y Melisa. Compañera Sonia, ¡Hasta el Socialismo Siempre!
Dijo Antonio, su esposo: «...tenía un corazón inmenso... fue el que la bala asesina destruyó...»
El 29 de diciembre se realizó en la esquina de Del Viso donde fue asesinada Sonia un acto homenaje y de exigencia de castigo a los asesinos. Estuvo presente todo el arco político y social de Pilar, mostrando el respeto que Sonia había logrado. En nombre de la dirección de Izquierda Socialista habló Guillermo Sánchez. Reproducimos partes del discurso con el que cerró el acto Antonio Espasa.
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Antonio Espasa. A su lado, Ofelia, mamá de Sonia, Natalia, Melisa y Laura, sus tres hijas. |
“Buenos días, a todos los presentes. Quiero agradecer en primer lugar a la mamá de Sonia, Ofelia, porque ella está entera. A mis hijas a Natalia, Laura y Melisa, presentes después de haber enterrado a su mamá. A los comerciantes, al presidente de la instituciones de Manuel Alberti, a todos los gremios, organizaciones sociales y políticas que se han acercado, en las cuales Sonia militó y en las que no militó porque, compañeros, todos ustedes son mis compañeros.
Agradecer a las abogadas por lo que están haciendo y el trabajo arduo que les espera.
Quería decirles que ustedes la conocían a Sonia, luchadora, trabajadora, solidaria, incansable, se hacía tiempo para todos. Ha caminado kilómetros en este semáforo para ganarse un peso y ese día, como todos los sábados, domingos y feriados, tal vez mientras algunos preparaban por ahí el asadito, ella trabajaba para colaborar, para ayudar en la crianza de sus hijas.
Era compañera esforzada. Han terminado las clases y en 4º D mi hija menor, de 10 años, Melisa, recibió un diploma. Y tiene relación con las horas que Sonia se quedaba enseñándole las tablas para que levantara ese 5 y pasara a un 10, como lo hizo. Ese diploma fue el más importante, el diploma al esfuerzo. Y que, como madre, también es para Sonia.
Natalia y Laura terminaron sus escuelas primarias y secundarias como abanderas y, más allá de su capacidad personal, también fue por el esfuerzo de Sonia.
La lucha recién comienza. Iremos por la parte legal, muy importante y también con la movilización, muy importante.
Quiero agradecer a los testigos que valientemente aportaron datos. Fíjense la versión primera de la policía, un “enfrentamiento”. O los chorros se escapan o los agarran y les hacen decir lo que ellos quieren. Esa versión se les cayó.
Luego inventaron lo de la bala, que dio tantas vueltas, rebotó por todos lados y después, terminó matando a Sonia. Esa versión también cayó.
No les voy a decir que Sonia era perfecta. Pero nadie puede negar que tenía un corazón inmenso. Y ese corazón fue el que la bala asesina del oficial Benítez destruyó, perforó y mató y por eso tiene que pagar e ir a la cárcel. Y lo vamos a lograr con todos ustedes, porque cuando lo logremos y terminemos con que la bonaerense nos esté matando, va a ser el triunfo de todos ustedes muchachos.
Muchas gracias y sigamos la lucha. ¡Sonia Colman presente, ahora y siempre!”
ACTO EN LA PLATA
Este 23 de enero habrá un acto con distintas organizaciones reclamando cárcel para el asesino de Sonia frente a la gobernación. Izquierda Socialista llama a participar.
Te pedimos un aporte para seguir apoyando las luchas de los trabajadores.
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