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Elecciones en ParaguayCayó el Partido ColoradoPor primera vez en 61 años fue derrotado el Partido Colorado en Paraguay. Gobernó con la feroz dictadura de Stroessner durante 35 años, hasta 1989. Luego lo siguió haciendo con un fraude, siempre con entrega total al imperialismo y una corrupción desenfrenada. Triunfó por amplio margen la Alianza Patriótica para el Cambio (APC), encabezada por el ex obispo Fernando Lugo, con el 41% de los votos, contra el 31% que sacaron los colorados y el 21% del coronel Lino Oviedo. El general Alfredo Stroessner gobernó desde 1954 hasta 1989 con una férrea dictadura antipopular. Pero en 1989, la creciente resistencia popular y la caída de las dictaduras latinoamericanas jaquearon al dictador, quien fue destituido por los propios militares y el Partido Colorado, deseosos de conservar el poder mediante una reforma del régimen. Hubo una apertura democrática donde se formaron sindicatos, partidos de oposición y organizaciones campesinas. Pero, mediante el fraude y un fuerte aparato corrupto, el Partido Colorado retuvo el poder (se sucedieron cuatro presidentes colorados), no sin fuertes crisis, hasta las presentes elecciones. En los últimos años se fortaleció el sector burgués terrateniente en base a la exportación de soja. El 1% de los propietarios tiene el 77% de las tierras. 351 concentran 9.7 millones de hectáreas, mientras existen, según las organizaciones campesinas, más de 350.000 familias campesinas sin tierra o con cantidad insuficiente. Paraguay tiene una población de 6 millones y una enorme emigración, de 2 millones. La Alianza Patriótica para el Cambio La APC de Lugo está conformada por una alianza de 10 partidos y 20 organizaciones sociales, entre ellas, las más importantes de las sindicales y campesinas. El vicepresidente electo por la APC es el médico Federico Franco, titular del PLRA (Partido Liberal Radical Auténtico). Lugo hizo uno de sus ejes electorales en la promesa de reforma agraria. Sin embargo, su definición es totalmente vaga. Habla de un “catastro nacional” y de propiedad de la tierra para los campesinos. Pero nada dice sobre el fin del latifundio, sin el cual, no habrá tierra para los campesinos, pues toda la acaparan los oligarcas. Promete renegociar pactos internacionales por precio de la energía de Itaipú y Yaciretá con Brasil y Argentina (que hoy desfavorecen mucho a Paraguay). Habla de “soberanía nacional”, pero no hace ni mención de la base militar yanqui en Mariscal Estigarribia. Al ser electo Lugo dijo: “No soy de izquierda ni de derecha. Estoy ubicado en el centro”. Por su parte, Federico Franco, el vice del PLRA, afirmó hace poco ser admirador del reaccionario español José María Aznar. El PLRA es históricamente un partido del régimen. Durante décadas, incluso bajo la dictadura de Stroessner, fue la oposición consentida a los Colorados (a cambio de algunos puestos y “mordida” en la corrupción). La APC también incluye en sus listas a candidatos de grupos izquierdistas como el movimiento Tekojojá y el partido Movimiento al Socialismo (P-MAS), que se consideran chavistas. El triunfo de Lugo tiene una evidente conexión con el proceso latinoamericano. Los pueblos repudian a los viejos partidos de derecha neoliberal y buscan nuevas alternativas que prometen un cambio. En campaña Lugo elogió a los presidentes Chávez, Correa y Evo Morales, por su «valentía de hacer rupturas históricas ». Pero al mismo tiempo, dice que la «vía paraguaya» hacia el «socialismo del siglo XXI» tendrá “caminos propios, sin sobresaltos”. Esto es toda una definición. “Sin sobresaltos” significa que ni siquiera se propone alguna medida antiimperialista como las que tomaron aquellos presidentes. La heterogeneidad de su Alianza y muy probablemente la propia movilización del postergado pueblo guaraní, que se siente triunfante al derrotar a los colorados, probablemente le empiece a plantear “sobresaltos”. Debería saber un ex obispo que no se puede estar bien con Dios y con el Diablo. Y menos con terratenientes explotadores y campesinos sin tierras, con el imperialismo y a su vez con el pueblo paraguayo. |
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