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De Narváez-Solá y el peronismo disidentePolíticos millonarios y de la mano dura¿Sirve votar al “peronismo disidente”? ¿Qué tiene para ofrecerle al pueblo el multimillonario De Narváez, sospechado incluso de vínculos con el narcotráfico? Un ejemplo en acción: Macri, su socio porteño que gobierna la Ciudad para los ricos y los turistas extranjeros
Muchos trabajadores, hartos del kirchnerismo, se preguntan como “castigar mejor al gobierno”. Basta levantar la vista en cualquier avenida o encender un rato la televisión, para que nos aparezca el “colorado” De Narváez. Nos dice en sus carteles que “va a solucionar la inseguridad” y pide que “lo ayudemos”. Se presenta como “el peronismo disidente”, sugiriendo detrás de esta denominación que con su propuesta encarna el “verdadero peronismo”. Se está construyendo una imagen falsa, como en su momento se hizo con Macri en la Ciudad de Buenos Aires. De Narváez es un multimillonario, en su momento dueño de Casa Tía (de la que echó a todos sus trabajadores), con una fortuna estimada en 200 millones de dólares. Actual dueño de Clan Comunicaciones e Imagen (la empresa más fuerte de publicidad en la vía pública) y dueño del predio de la Sociedad Rural, es socio propietario con Daniel Vila y José Luis Manzano del multimedio América. Tiene su propio avión, valuado en 6 millones de dólares. Ante la seria sospecha de estar involucrado en el narcotráfico de la efedrina, respondió textualmente sobre las llamadas hechas a un capo de la mafia mexicana desde un celular de su propiedad, que “no tenía idea quien las había realizado, ya que tiene 1156 celulares a su nombre!!! ¿Qué tiene que ver un trabajador, un joven desocupado o un kiosquero de un barrio del conurbano, con semejante personaje? Logró hacerse conocer a partir de un descomunal gasto de publicidad. Ya lleva “invertidos” 4,4 millones de pesos en carteles gigantes en la vía pública. Para dar un ejemplo, sólo los que están en la autopista Buenos Aires-La Plata salen 100.000 pesos por mes. Es imposible calcular cuánto ha gastado en propaganda televisiva: se sabe que para aparecer en el partido de la selección con Venezuela pagó 550.000 pesos. Tiene un bunker de campaña en el exclusivo barrio de Las Cañitas, de Capital, con 120 asesores, tres sitios de internet y una línea 0800 las 24 horas. ¡A cuántos sueldos de un trabajador equivalen esas cifras! El verso del combate a la inseguridad Analicemos las propuestas de De Narváez, al igual que las del resto de los políticos del denominado peronismo disidente. ¿Alguien se imagina que habla de parar la ola de suspensiones y despidos? ¿Existe algún planteo de aumento salarial para maestros, trabajadores de la salud o estatales? ¿Está a favor de reabrir las paritarias? No encontraremos una sola línea. Eso sí: hay una larga explicación de porqué hay que eliminar las retenciones y dar satisfacción a todos y cada uno de los reclamos de la Sociedad Rural. Pero su perlita es el “mapa del delito”. Con gran despliegue informático nos muestra en qué zonas del conurbano ha habido más robos, violaciones o asesinatos. Se presenta como el “experto para resolver el tema de la inseguridad”. Pero nunca menciona la complicidad de la policía bonaerense con la droga, la prostitución, el juego clandestino o los piratas del asfalto. Ninguna denuncia de los cientos de casos de gatillo fácil. Su propuesta “especializada” para resolver la inseguridad pasa por contratar más de esos mismos policías corruptos y reprimir más a los jóvenes. El principal socio de De Narváez es Felipe Solá, que de funcionario menemista en los ’90 pasó a gobernador kirchnerista hasta el 2005. ¿Qué hizo Solá para disminuir la inseguridad? ¿Acaso se redujo la pobreza o la marginación en la provincia? ¿La salud y la educación pública mejoraron algo? Ambos tienen un tercer aliado: otro empresario millonario, Mauricio Macri. ¿Qué está pasando en la Ciudad de Buenos Aires desde que gobierna el PRO? Las escuelas están sin gas y se caen a pedazos, el déficit habitacional ya llega a las 500.000 personas, otras 22.000 están a punto de ser desalojadas, quienes viven en la calle pasaron de 1.000 a 1.950 familias, y se cerraron programas enteros de atención a la pobreza ¡Hasta quieren levantar un muro “para que no se vea” la escuela a la que asisten la mayoría de los chicos de la Villa de Retiro! Incluso han llegado al colmo de crear su propia patota para amedrentar a los que viven o trabajan en la calle: la Unidad de Control del Espacio Público (UCEP). Nos dirigimos a usted, compañero trabajador, que está pensando cómo castigar mejor al gobierno; a vos, que después de ser explotado durante horas por un salario miserable, al volver a tu casa no sabés si tener más miedo a que te roben o a la policía: no votes a estos millonarios. No tienen nada que ver con los trabajadores o el pueblo. Son los que se están preparando para ser el “recambio” ante el hundimiento de los Kirchner, para seguirle garantizando sus negocios a los ricos. Dale la espalda. |
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