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PerúRebelión indígena contra las multinacionalesLa masacre de Bagua, con decenas de muertos, centenares de heridos y muchos desaparecidos, conmovió mucho más allá de las fronteras peruanas. Los indígenas awajún defienden su supervivencia contra las multinacionales que pretenden saquear la Amazonía. La muerte de 22 policías, un número desconocido de indígenas y centenares de heridos, es responsabilidad directa del gobierno proimperialista de Alan García. La gran movilización indígena y popular, posterior a la masacre de Bagua, obligó al gobierno a derogar los decretos-ley más cuestionados.
El 5 de junio, en la llamada Curva de la Muerte, norte de la Amazonía peruana, la policía atacó con armas de guerra y helicópteros a varios miles de indígenas awajún que cortaban la ruta en reclamo de la derogación de 9 decretos que abren la selva a la explotación multinacional. Los indígenas se defendieron. El gobierno reportó 22 policías muertos y 9 indígenas. Estos últimos dicen que sus muertos son muchos más, dado que hay decenas de desaparecidos. Los policías fueron enviados como carne de cañón contra los indígenas que habían defendido su reclamo pacíficamente durante casi dos meses de huelga amazónica. Los 60.000 indígenas awajún, la etnia más numerosa de los 300.000 que pueblan la Amazonía peruana y que conservan su idioma y modo de vida, tienen una tradición secular de defensa de su territorio. Ni el imperio inca ni los colonizadores españoles pudieron dominarlos. Las grandes transnacionales del gas y del petróleo como la anglofrancesa Perenco, la española Repsol, la canadiense Petrolífera Petroleum Limited, Pluspetrol, Petrobras y otras, son las que ahora están alentando la masacre, para poder llevarse tranquilamente su botín, sin indígenas “molestos”.En julio del año pasado, cuando ya el conflicto de la selva se gestaba, hubo una reunión en Colombia entre los presidentes Lula de Brasil, Uribe de Colombia y Alan García para acordar un sistema militar, policial y de inteligencia común para el control de la Amazonía “ante problemas de narcotráfico y terrorismo” (Clarín, 21/8/2008). Lula actúa al servicio de la multinacional Petrobrás, empresa supuestamente brasileña (pero con mayoría accionaria de multinacionales) con fuertes intereses en la Amazonía peruana, también en Bolivia y Ecuador. Gran protesta popular nacional El 11 de junio hubo grandes movilizaciones en todo Perú en solidaridad con los indígenas y reclamando la renuncia y el castigo a Alan García. En Lima, decenas de miles de personas fueron reprimidas por la policía. Las protestas fueron intensas en los departamentos de Loreto, extremo nororiental, y en el oriental Ucayali. También en las localidades sureñas de Puno, Arequipa y Tacna se movilizaron y hubo paros de 24 horas. Desde el 11 la protesta se extiende. Campesinos del departamento de Apurímac, en la zona surcentral de Perú, bloquean las carreteras que comunican con Ayacucho y mantienen tomado el principal aeropuerto de la zona. En el departamento de Junín, en la región central, miles de indígenas mantienen cortada la principal carretera. En la carretera entre las ciudades de Tarapoto y Yurimaguas, dos de las más importantes de la Amazonia, hay 4 mil indígenas apostados. El lunes 15, después de estas grandes manifestaciones, el gobierno derogó los decretos 1090 y 1064, los más cuestionados. Un evidente paso atrás. Ahora todo el movimiento indígena, campesino y popular exige la completa derogación de los 9 decretos que afectan a la Amazonía. Alan García tiene sólo el 21% de popularidad, renunció una ministra y una corriente interna del APRA lo acusa de derechista. El Frente Nacional por la Vida y la Soberanía conformado por AIDESEP, CONACAMI, CGTP, SUTEP, CCP, CNA, CAOI, Movimiento Cumbre de los Pueblos, CPS, Unios en la Lucha (organización de la UIT-CI) y otras organizaciones sociales y políticas, han convocado a nuevas acciones de lucha y a un paro nacional para el próximo 8 de julio. El Comité de Enlace de la Unidad Internacional de Trabajadores (que integra Izquierda Socialista) y la Corriente Internacional Revolucionaria, es parte de una campaña internacional de solidaridad, que incluyó actos ante embajadas y consulados peruanos en Buenos Aires, Caracas y otras ciudades latinoamerícanas, llamando a la solidaridad con el pueblo peruano, por el cese a la represión, satisfacción de los reclamos indígenas y apoyar la lucha para que se vaya Alan García del gobierno. La lucha de los indígenas peruanos contra las multinacionales es la misma lucha de todos los pueblos latinoamericanos por expropiar y expulsar a esas malditas empresas imperialistas, por terminar con el saqueo y la explotación. |
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