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México:Marchas contra liquidación de la empresa estatal de electricidadEl 10 de octubre 6.000 policías y soldados enviados por el presidente Felipe Calderón, ocuparon "preventivamente" las instalaciones de la empresa estatal Luz y Fuerza del Centro (LFC) y del Sindicato Mexicano de Electricistas. Horas después, el gobierno federal decretó la desaparición del organismo y anunció la liquidación de sus empleados. Un verdadero golpe de Estado contra los trabajadores. Ya se iniciaron movilizaciones obreras contra la medida y se anuncia una gran marcha para el jueves.
Para dar el golpe, Calderón aprovechó la victoria de la selección de fútbol mexicana sobre El Salvador, por 4-1, y la euforia que provocó la clasificación al Mundial de Sudáfrica 2010. Las grandes televisoras ignoraron a los centenares de patrulleros y transportes de tropas de la Policía Federal que atravesaron la ciudad la noche del sábado, ante la mirada azorada de la gente que suponía iban a controlar a los desaforados que celebraban. Los 66.000 trabajadores sindicalizados fueron declarados cesantes y reemplazados por personal de confianza de la Comisión Federal de Electricidad, que estará a cargo del servicio. Quieren privatizar El gobierno ha pretendido justificar el asalto, digno de una dictadura militar, responsabilizando al sindicato de la quiebra de la compañía. "Las condiciones establecidas en el contrato laboral impedían la operación de la empresa", dijo el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont. La acusación es falsa. Es lo mismo que decían en los 90 Menem y sus funcionarios para justificar la privatización de empresas públicas en nuestro país. El gobierno mexicano desde hace años está descapitalizando a propósito a la empresa pública LFC. La obligó a subsidiar a las grandes empresas privadas e incluso reparticiones públicas y la propia residencia presidencial de Los Pinos, están “enganchados”, sin pagar la electricidad que consumen. El secretario general del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), Martín Esparza, afirmó que la liquidación de la empresa Luz y Fuerza del Centro (LyFC) tiene como trasfondo la privatización de una red de 1.100 kilómetros de fibra óptica. De acuerdo con el líder sindical, LyFC estaba en condiciones de dar servicios de Internet, telefonía y televisión por cable a precios bajos para las familias de menores ingresos, mediante una red de fibra óptica. Pero esta red fue concesionada por el gobierno de Calderón a la empresa WL Comunicaciones, perteneciente a Fernando Canales Clariond y Ernesto Martens, secretarios de Energía durante el anterior gobierno de Vicente Fox, del mismo partido que el actual (diario La Jornada). El reaccionario gobierno de Calderón viene articulando una ofensiva antiobrera y éste pretende ser el golpe de gracia para descabezar a uno de los sindicatos más combativos. Movilización obrera La reacción de los trabajadores no se hizo esperar. Ya se realizó la primera marcha masiva con 15.000 participantes, junto a otros sindicatos, y se convocó a una “megamarcha” para el próximo jueves. Los compañeros del Partido Obrero Socialista (POS) -organización integrante de la Corriente Internacional Revolucionaria, que ha constituido un Comité de Enlace con la Unidad Internacional de Trabajadores (UITCI)- nos manifestaron que convocan a todos los trabajadores y el pueblo a la gran marcha del jueves y que todo el partido se pone al servicio de esta gran lucha, llamando a la solidaridad internacional. Desde Izquierda Socialista hacemos nuestro ese llamado. En nuestro país, la Federación de Trabajadores de la Energía de la República Argentina, FeTERA-CTA, convoca a una campaña. Llaman a enviar mensajes al gobierno mexicano de solidaridad con los trabajadores, exigiendo la restitución de sus empleos, así como la preservación de la empresa estatal que es de todo el pueblo mexicano. Mensajes a felipe.calderon@presidencia.gob.mx; luisfelipe.bravomena@presidencia.gob.mx; javierlozano@stps.gob.mx |
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