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Roggio, el gobierno y la UTA contra los trabajadores del subteLa lucha de los trabajadores del subte por el reconocimiento del sindicato que hace casi un año decidieron crear, sumó el jueves pasado un nuevo capítulo. Las 6 líneas y el Premetro se paralizaron completamente durante las últimas 3 horas de servicio en lo que significó una nueva ratificación de la masividad del reclamo. De nada sirvieron los amedrentamientos de la patronal negrera del grupo Roggio ni las intimidaciones de la patota que responde a la burocracia de la UTA. El paro fue total. Mientras tanto, el gobierno peronista de los Kirchner sigue demostrando su verdadero rostro de aliado de las patronales negreras y de la burocracia sindical. Lejos de sus discursos progres, el ministerio de Trabajo lleva casi un año negándose a darle siquiera la inscripción gremial a la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP). No solo le vienen dando la espalda a los reclamos y medidas de fuerza de los trabajadores, sino también a diversas intimaciones judiciales para que se expidan sobre el tema. Incluso han realizado operaciones de prensa anunciando reuniones con los delegados legítimos, a los que nunca han convocado. Pero las medidas contrarias a la libertad sindical y a favor de la burocracia del gobierno K no terminan aquí. Frente a un muy posible endurecimiento de las medidas de fuerza, el ministerio, en sintonía con los voceros de Metrovías, analiza declarar la ilegalidad de nuevas interrupciones del servicio. Un nuevo ejemplo de persecución a los trabajadores que se organizan y enfrentan a las patronales y a la burocracia sindical. A quienes, a su vez, le han impuesto compulsivamente el descuento del 1% de sus salarios para las arcas de la UTA. Frente a estas amenazas tenemos que profundizar la solidaridad y unificar la lucha del subte con todas las luchas contra la criminalización de la protesta social. |
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