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Carlos Bach

Canje de la deuda

Un robo por partida doble

Estados Unidos dio luz verde al nuevo canje de la deuda que en dos semanas estará en marcha. Será mucho más beneficioso para los banqueros que el anterior, realizado en 2005. Se le reconocerán los intereses desde esa fecha y un cupón atado al crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI). Los grandes inversores, banqueros y el imperialismo aplauden. El gobierno dice que es en beneficio del pueblo. En realidad, es un nuevo robo que significará más endeudamiento, más ajuste y pobreza.

Actualmente, la deuda externa asciende a unos 175 mil millones de dólares entre capital e intereses. Con este canje, el gobierno va a reconocer otros 20 mil millones más que quedaron fuera del canje anterior que realizó Néstor Kirchner en 2005. A esto hay que sumarle aproximadamente unos 10 mil millones más de intereses devengados desde esa fecha a la actualidad. De esta forma, la deuda alcanzará o superará los 200 mil millones de dólares. Sin embargo, el gobierno dice que esta medida es para “desendeudarnos”, una nueva mentira. Veamos.

El gobierno decía en 2005 que quienes no entraran al canje en ese momento, nunca más se los iba a reconocer. Es decir, que esta suma de 20 mil millones no iba a existir más como deuda. Incluso, el kirchnerismo hizo votar una ley que llamó “ley cerrojo”, para impedir cualquier negociación con estos bonistas. Sin embargo, en diciembre último, el gobierno, apoyado por la UCR, Carrió y el peronismo disidente, derogaron esa ley, habilitando este canje. Una estafa y primer robo. Pero el plan no termina allí.

El gobierno ya está diciendo que va a reconocer esta parte de la deuda con una quita de aproximadamente un 65%. La trampa de esta maniobra es que los tenedores de los bonos, que son grandes bancos como el Citi, el Deutsch y el Barclays -implicado en el emplazamiento de la plataforma petrolera inglesa en las islas Malvinas-, compraron los mismos totalmente devaluados en momentos en que Argentina estaba en default. Ahora, aunque le hagan una quita, van a hacer un gran negocio del cuál sacarán una ganancia de alrededor de un 150%. Supongamos que un bono que hoy vale 100 le hagan una quita del 65%, le van a pagar 35… ¡pero esos bancos buitres los compraron en su momento por 10! Serán ellos los grandes beneficiarios del canje.

El gobierno espera que se apruebe el canje exigido por los yanquis para volver a endeudarse con el FMI, Banco Mundial y el BID. Necesita cubrir el agujero financiero de 90.000 millones de pesos que tiene el Presupuesto 2010. Y, por supuesto, endeudarse para seguir pagando más deuda externa. Además, después del canje, Cristina entablará negociaciones para pagar los 7.000 millones al Club de París, una deuda que viene de la dictadura. Por si algo faltara, el canje beneficiará a grandes empresas como Repsol-YPF, IRSA, Telefónica, Pan American Energy, entre otras, quienes podrán pedir préstamos a intereses más bajos. Un verdadero riesgo. Recordemos cuando Cavallo, siendo funcionario del Banco Central en la dictadura, estatizó la deuda privada.

Estados Unidos ha salido a apoyar esta medida y las bolsas acompañaron con grandes subas. No es para menos. Es un gran negocio para bancos e inversores. Cristina y su ministro Amado Boudou dicen que esto es parte de su política de “desendeudamiento”. Nada más lejos de la realidad. Este canje significará más endeudamiento que terminarán pagando los trabajadores y el pueblo con menos salario, menos trabajo, ajuste y pobreza. Porque esas son las consecuencias de pagar una deuda ilegítima y fraudulenta que no contrajimos.

Izquierda Socialista llama a repudiar este nuevo canje y a seguir movilizados por el no pago de la deuda, como lo haremos el próximo martes 30 con otras organizaciones (ver nota).

Desde Izquierda Socialista habíamos realizado, junto a otras organizaciones, la marcha del 23 de enero y la jornada nacional del 12 de febrero que culminó en un acto frente al Obelisco, ambos con el No Pago de la Deuda Externa como eje central. La centroizquierda, por su parte, fundamentalmente en la figura de sus diputados Pino Solanas, Claudio Lozano y Victoria Donda, venían poniendo el centro en la consigna de “Comisión Investigadora”, con la que discrepábamos. Habían llegado, incluso, a realizar afirmaciones con las que diferíamos, relativas a pagar “en consignación” mientras se realizaba el proceso investigativo, como lo señaló Solanas o Lozano, quien impulsa un proyecto de ley para pagar deuda que no sea con las reservas (ver El Socialista 161).

Por eso consideramos sumamente auspicioso que las fuerzas que veníamos trabajando juntos durante enero y febrero, hayamos podido acordar con la centroizquierda en la realización de una marcha común bajo la consigna de no pagar. Ya que, más allá de las diferencias y de la necesidad de continuar la discusión sobre ellas, acordamos en dos puntos fundamentales: en que hay que parar el saqueo de la deuda, siendo en ese marco la consigna central “No al pago”, y en que tenemos que movilizarnos para imponerla. Se trata de una acción unitaria auspiciosa que esperamos sea un primer paso para seguir movilizando juntos, convocando a importantes sectores de los trabajadores y el pueblo.

Te pedimos un aporte para seguir apoyando las luchas de los trabajadores.

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