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Editorial
¿Relaciones carnales o segunda independencia?
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Una de dos. O Cristina delira, o nos quiere tomar de ignorantes. Recientemente se autodenominó la “Sarmiento del Bicentenario” al anunciar computadoras para las escuelas. Antes se había identificado con Evita. Y este lunes, invitada por Chávez para conmemorar el Bicentenario de Venezuela, se comparó con los próceres de 1810. Un falso discurso que busca mostrarse como independiente, justo cuando la semana anterior, en la cumbre de Seguridad Nuclear en Estados Unidos, actuó como perro faldero del imperialismo norteamericano.
En EE.UU. Cristina obtuvo la foto y Obama le concedió una cita de 15 minutos porque, de cuerpo presente, la presidente fue a rendirle cuentas sobre el canje de la deuda, robo que otorga jugosos beneficios a los usureros internacionales de quienes el presidente norteamericano es su representante. Además, le lavó la cara al imperialismo, ya que, mientras éste prometió un parcial desarme nuclear, direccionó toda la cumbre para atacar a Irán (ver página 11), con el apoyo de Argentina, mientras China y Brasil se negaron a formular condena alguna contra ese país. Y se sumó a la campaña “contra el terrorismo”, la misma de Bush, ahora enarbolada por Obama, cuando fue el propio EE.UU. quien financió a Al Qaeda. ¡Cristina elogió el “pacifismo nuclear” en una reunión donde estaban los gobiernos de países que tienen la bomba atómica. Y uno ya la usó, Estados Unidos, en Hiroshima y Nagasaki! Hablar de pacifismo en territorio norteamericano sin condenar la política armamentista de ese país, sus invasiones a Irak, Afganistán y su apoyo al estado genocida de Israel contra el pueblo palestino, es nada más ni nada menos que una política rastrera, pro-sionista y proimperialista pocas veces vista. Además, Cristina evitó cualquier política de defensa nuclear, ratificando la política menemista de los 90. Recordemos cuando Menem, por pedido expreso del imperialismo norteamericano, desmanteló el proyecto Cóndor II, aceptando de esta forma que sigan siendo EE.UU. y las grandes potencias quienes tengan hegemonía en materia bélica con fines de dominación. Obama, agradecido.
Pero volvamos a Venezuela. Cristina en su discurso agregó: “El Bicentenario encuentra a los pueblos de América del Sur en una nueva etapa de transformación y una segunda independencia”. También la presidente hizo alusión al peronismo de 1945, mientras Chávez exclamaba ¡Viva Perón!
Cristina -más allá de los debates sobre el viejo peronismo, cuestión que no es motivo de esta editorial-, se cuidó de no mencionar que aquel peronismo nacionalizó los ferrocarriles y otras empresas de servicios (cosa que no hace su gobierno). Y evitó que se conocieran ejemplos más recientes sobre la actuación del PJ. Como, por ejemplo, cuando el ahora denominado peronismo kirchnerista apoyó el remate del patrimonio nacional protagonizado por el PJ de Menem en los 90, poniendo incluso un avión a disposición de un legislador de Santa Cruz para que diera quórum para la venta-robo de YPF. Los diarios venezolanos lo hicieron saber, calificando a la primera mandataria argentina como “una senadora que apoyó las privatizaciones y abogada de cobranzas exitosas” (Clarín, 20-04).
¿A qué segunda independencia se refirió la presidente? Su gobierno trabaja para más dependencia, no para la independencia nacional. Los héroes patrios usaron todas las herramientas que tuvieron a su alcance para liberarse de la corona española. Tomando medidas económicas, militares y diplomáticas de ruptura, llamando a poner de pie a los pueblos latinoamericanos provocando una verdadera gesta liberadora continental. ¿Cristina nos quiere hacer creer que está impulsando otra independencia pagando puntualmente la deuda externa? ¿Manteniendo el robo de las privatizaciones? ¿Gobernando para Repsol y el Citibank? ¿Permitiendo el robo de nuestro oro y demás recursos naturales a la Barrick y Bajo de La Alumbrera? ¿Hablando contra el colonialismo en Malvinas cuando designó al banco inglés Barclays coordinador del canje, el mismo que es accionista de la petrolera que nos roba el oro negro de las islas? ¿Promoviendo el Mercosur, negocio para las multinacionales? ¿O el Unasur, junto a gobiernos genocidas como el de Alvaro Uribe de Colombia?
Esto vale también para el promocionado “Socialismo del Siglo XXI” enarbolado por Chávez. No habrá segunda independencia ni mucho menos socialismo, si los gobiernos latinoamericanos siguen pagando la deuda, dejando las manos libres a las multinacionales y banqueros para que nos roben nuestros recursos naturales y finanzas, no hacen la reforma agraria o expropian a los grandes capitalistas. La “economía mixta” en alianza con multinacionales, como ocurre en Venezuela, o el “capitalismo andino” de Evo Morales no son salida.
Para que se den pasos hacia una segunda Independencia es necesario emprender una lucha frontal contra el imperialismo y las multinacionales. Conformar un Frente de Países deudores para dejar de pagar la deuda externa. Romper con el FMI, el Banco Mundial y con todos los tratados políticos y económicos que nos atan al imperio. Expulsar a las multinacionales, banqueros y terratenientes. Es el camino que emprendió Cuba en el 59, logrando enormes conquistas que se fueron perdiendo con el tiempo, al negarse a extender ese proceso revolucionario al resto del continente.
Cristina, al ponerse a la altura de los héroes patrios, además de falsear burdamente la historia, apela al peor de su doble discurso para encubrir que su gobierno mantiene los pilares del capitalismo semicolonial argentino. Cifrando expectativas en que el peronismo que ella encarna puede dar pasos liberadores.
Argentina, con los Kirchner, no está dando pasos hacia ninguna segunda independencia. Al contrario, está reinaugurando las viejas relaciones carnales de los 90, bajo otro discurso.
Los nuevos héroes patrios son los trabajadores, campesinos, estudiantes, aborígenes y pueblos originarios que en todo nuestro continente libran duras peleas contra el imperialismo opresor. Apoyando esas luchas y construyendo herramientas políticas para imponer gobiernos de trabajadores en camino al socialismo, lo podremos intentar. Tarea que impulsa Izquierda Socialista, para emprender junto a los trabajadores, luchadores y la izquierda. Como lo haremos sentir en los actos de este 1º de Mayo, día internacional de lucha, en Plaza de Mayo y otros puntos del país, a los cuales llamamos a concurrir.
Marcha por Silvia Suppo
Este martes, convocada por el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia -espacio del cual participan partidos de izquierda-, se realizó una nueva marcha a Plaza de Mayo, a tres semanas del asesinato de Silvia Suppo, sobreviviente que con su testimonio colaboró para que se condenara por primera vez en el país a un juez de la dictadura. Un hecho similar al de Julio López. “Julio López - Silvia Suppo. Exigimos al gobierno nacional y gobiernos provinciales el esclarecimiento de los hechos y el castigo a los responsables materiales e instigadores. Desmantelamiento del aparato represivo de la dictadura. Juicios a todos los genocidas por todos los compañeros. Cárcel común y efectiva ya a todos los genocidas”, fueron las consignas de la convocatoria.
Te pedimos un aporte para seguir apoyando las luchas de los trabajadores.
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