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Socialista es una publicación de Izquierda Socialista
Escribe:
Juan Carlos Giordano
Frente de Izquierda
Avancemos en la unidad
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El pasado 15 de marzo, la dirección nacional de nuestro partido envió una carta a los compañeros del Partido Obrero y demás organizaciones de izquierda llamando a conformar un frente, la cual transcribimos en estas páginas. Posteriormente, el dirigente nacional de PO, Marcelo Ramal, escribió una nota titulada “Un Frente de Izquierda en la agenda del Congreso del PO”, cuyas partes referidas al tema también damos a conocer aquí. Considerando a la misma como un paso muy positivo para avanzar.
Este martes hubo una reunión entre PO, PTS, Izquierda Socialista y el Nuevo MAS, a fin de intercambiar ideas para explorar pasos unitarios. Por nuestra parte, volvimos a insistir en que hay que hacer los máximos esfuerzos para presentar un candidato presidencial único y lograr acuerdos para presentarnos unidos en las elecciones provinciales que están en curso.
Concretamente, dentro de dos semanas -el próximo 13 de abrilvence el plazo para presentar alianzas en las elecciones provinciales convocadas en Neuquén. Izquierda Socialista ha presentado en tiempo y forma todas las afiliaciones requeridas en esa provincia, a fin de que seamos reconocidos legalmente como partido. Personería que ponemos al servicio de conformar un frente en ese importante distrito. Además, se adelantaron las elecciones en Capital para el 10 de julio -donde también estamos involucradas todas las fuerzas interesadas en un frente-. Ante ello, nuestro partido llama no sólo a concretar acuerdos en esos lugares, si no a encarar un debate hacia un acuerdo nacional. Y si hay bases para el mismo, se podría concretar antes, sin esperar al 15 de junio, fecha en que vence el plazo para inscribir las alianzas nacionales, como también coincide PO.
El artículo de PO -más allá de las apreciaciones sobre que no están reunidas las condiciones “para desarrollar un partido político único”, cosa que no está en debate hoy, ya que de lo que se trata es de conformar un frente electoralseñala su voluntad de que se pueda lograr una “alianza nacional”, la cual, en caso de alcanzarse, “permitiría una campaña común en las elecciones provinciales adelantadas… y, naturalmente, la propaganda con vistas a romper el cepo de la “interna” de agosto”. Además de considerar que, un frente, potenciaría las luchas obreras y contra la burocracia, con lo cual coincidimos.
En nuestra carta decimos que, en relación a acordar un programa para concretar un frente, no debería haber dificultades ya que, en actos y marchas comunes, hemos acordado puntos programáticos que se podrían usar como base. Y que, en relación a las candidaturas y para facilitar la unidad, “proponemos que el candidato a presidente de un posible frente sea del Partido Obrero”. Hoy avanzamos aún más.
Proponemos que el cargo de vicepresidente lo integre un compañero del PTS. Es decir, que la fórmula presidencial esté integrada por PO-PTS. Creemos que esta propuesta refuerza aún más nuestro aporte en pos de avanzar en la unidad. Y desde allí ubicar el resto de las candidaturas (tanto a cargos nacionales como provinciales, según el caso), las cuales deberán ser repartidas en forma equilibrada para que todas las fuerzas estén representadas. Como sería el reconocimiento de que nuestra actual legisladora de Córdoba, Liliana Olivero -abanderada de la unidad y quien puso a lo largo de años su banca al servicio de las luchas obreras y populares-, pueda pelear por su reelección en esa provincia.
Nuestra voluntad política es clara. Queremos avanzar en concretar el frente. Considerando que es una necesidad para brindar una alternativa unitaria de la izquierda combativa a los luchadores y trabajadores que no quieren apoyar con su voto al falso progresismo de Cristina, detestan a la oposición patronal de la UCR, PRO, Peronismo Federal, Coalición Cívica y gobernadores provinciales, y no se tragan el verso de nuevas variantes de centroizquierda, como la que encarna Pino Solanas.
Llamamos a difundir la campaña por un frente de izquierda. Y a sacar pronunciamientos en los lugares de trabajo, estudio y barrio para que haya un candidato presidencial único.
“Situación Política
Un Frente de Izquierda en la agenda del Congreso del PO”
Extracto del artículo publicado en Prensa Obrera Nº 1169 del 23/3/2011. Después de distintas consideraciones políticas, en lo referido a la izquierda, el mismo señala:
La izquierda y la crisis política
En este marco de crisis, hay una clara integración de una parte importante de la izquierda al campo de los bloques capitalistas. El partido comunista, el humanismo y otros integran la colectora K de Sabbatella, la cual quiere brindarle una cobertura progresista o de izquierda a la coalición oficialista de los K con Moyano, Scioli, Reutemann o Saadi. Por su parte, el MST y el PCR se han integrado a Solanas y Proyecto Sur, que cada vez más acentuadamente actúa como una colectora del frente de Alfonsín-Sanz-Binner: Solanas llamó a votarlos para los cargos ejecutivos en la elección de Santa Fe; apoyó a un alfonsinista (cuyo liderazgo nacional es socio de los pulpos mineros) para la intendencia de Andalgalá y negocia, en la Capital, la reconstrucción de una alianza ibarrista o incluso un Frente Cívico (con la UCR y el PS) bajo la pantalla del “antimacrismo”. Con la intermediación de Solanas, una parte del voto de izquierda, nacionalista, ambiental o antiminero quiere ser llevado al carro de los representantes de la gran minería y el capital sojero o sea de los Alfonsín y Binner.
La izquierda que está al margen de la cooptación debe soportar, en relación al proceso electoral, una reforma política que ha confesado ser proscriptiva -tanto, que el Ejecutivo vetó los dos artículos que limitaban esa proscripción. Los requisitos leoninos para preservar u obtener personerías, por un lado, y la propia “interna abierta” (que impone un piso de votos para acceder a la elección general), por el otro, son una tentativa de concentración del proceso electoral en torno de los grandes bloques capitalistas. La “reforma” afecta también al centroizquierda; pero, en este caso, las trabas proscriptivas sirven de pretexto para justificar una política de disolución o apoyo a las candidaturas del gran capital.
La función de un frente de izquierda
Para la izquierda, la reunión de fuerzas para superar el piso del 1,5% en las internas abiertas y llegar a la elección general se plantea como una tarea elemental. La actuación cotidiana de las corrientes ligadas a la izquierda, sin embargo, está surcada de divergencias de magnitud y hasta de principios, como se ha expresado recientemente en el conflicto ferroviario e incluso también en el subte, porque tienen que ver con la defensa de la lucha de los trabajadores contra el Estado capitalista y la burocracia sindical. Es decir que no hay una unidad programática para un frente político. Esto significa que no están reunidas las condiciones para un acuerdo estratégico. La convocatoria de la CRCI a discutir un programa para desarrollar un partido político único, sobre la base del centralismo democrático, ha sido rechazada. Pero sigue en pie la voluntad proscriptiva de la burguesía contra nuestros partidos -o sea, la necesidad de un acuerdo circunstancial para estas elecciones. Este acuerdo podría tener un alcance político mayor si es capaz de potenciar las luchas obreras, la lucha contra la burocracia, despertar el interés de la opinión pública popular y favorecer una delimitación con las expresiones políticas de los explotadores.
El Partido Obrero ha logrado defender su personería nacional. Otros partidos que podrían integrar este frente aún están batallando por ello. Si logran vencer los obstáculos legales, el frente podría traducirse en una alianza entre los diferentes partidos nacionales. De lo contrario, el Partido Obrero colocaría a disposición su personería nacional para constituir una alianza nacional junto a las personerías de distrito de las otras agrupaciones. Izquierda Socialista ha hecho una propuesta de Frente de Izquierda que toma como base, entre otros, los resultados de las elecciones en Catamarca. Es cierto que las alianzas con vistas a la “interna abierta” tienen como plazo el 15 de junio. Pero un acuerdo previo, en caso de alcanzarse, permitiría una campaña común en las elecciones provinciales adelantadas, para reforzar las listas en esos distritos y, naturalmente, la propaganda con vistas a romper el cepo de la “interna” de agosto. En el Congreso que realizaremos a fines de abril, vamos a discutir la oportunidad y los progresos de este planteo político, a la luz del proceso apasionante de la crisis mundial, de la crisis política nacional y de la transición que recorre a la clase obrera argentina.
Marcelo Ramal
Carta al Partido Obrero y demás organizaciones de izquierda
Por un candidato presidencial único de la izquierda
Enviamos esta carta a fin de proponer un Frente de Izquierda para las próximas elecciones presidenciales, que debería concretarse antes del 15 de junio próximo, fecha en que vence el plazo para inscribir las alianzas.
Consideramos que la izquierda debe presentar un candidato presidencial único. Llamado que hacemos, en primer lugar, a los compañeros del PO, del PTS y Nuevo MAS -con quienes conformamos frentes de izquierda en anteriores oportunidades- y demás organizaciones de izquierda. El MST tomó otro camino, integrándose a otra variante de centroizquierda, Proyecto Sur.
La unidad es necesaria para enfrentar a los candidatos del gobierno, de la oposición patronal y de la centroizquierda. Cristina muestra las “bondades” de su modelo, basado en un crecimiento para los grandes empresarios y multinacionales, destinando las reservas para pagar deuda externa y subsidiar a las patronales. Los Macri, Alfonsín, Duhalde, Carrió, De Narváez y los gobernadores, si bien critican al oficialismo, coinciden en mantener las privatizaciones, el saqueo de los recursos naturales y los pagos fraudulentos de la deuda externa. Pino Solanas, quien dice encarnar una alternativa al bipartidismo, teje alianzas con el juecismo y llama a unirse con Binner, quienes, donde gobernaron, lo hicieron de la misma forma que el PJ y la UCR.
Los resultados electorales en Catamarca mostraron una fuerte polarización entre dos variantes patronales, lo que llevó a que la izquierda pierda votos. Ante este panorama, es imprescindible que la izquierda se una, como reclaman miles de luchadores, tanto en las elecciones presidenciales como en las provinciales que se están realizando. Sabiendo que la división es funcional al FpV-PJ, UCR, Peronismo Federal, Coalición Cívica y PRO.
Siempre fue importante la unidad. Mucho más ahora, ante la posibilidad cierta de que se proscriba a la izquierda de las presidenciales. La antidemocrática reforma política aprobada por Cristina y la UCR ha hecho caducar las personerías jurídicas de los partidos de izquierda, obligándolos a juntar miles de afiliaciones con enormes trabas. Por más que logremos conquistar nuevamente las personerías nacionales (como lo estamos intentando con grandes posibilidades PO, PTS y nuestro partido), con las tramposas internas obligatorias del 14 de agosto quieren impedir que se presente todo partido que no obtenga en las mismas el 1,5% del total de votantes (350.000 sufragios), con el objetivo de que queden sólo 3 o 4 variantes patronales.
Si no se da un frente entre las organizaciones que nos reclamamos de la izquierda combativa, existe la posibilidad que ninguno de nuestros partidos se pueda presentar a las presidenciales. Si nos unimos, podemos dar mejor pelea para lograrlo.
Un frente se hace, en primer lugar, con un programa. Para acordarlo, no debería haber dificultades, ya que para los 24 de Marzo, aniversarios del Argentinazo y los primeros de Mayo se han plasmado documentos políticos comunes. Segundo, hace falta acuerdos sobre las candidaturas. Por nuestra parte, y para facilitar la unidad, proponemos que el candidato a presidente de un posible frente sea del Partido Obrero (Altamira, Pitrola o quien PO designe). Y desde allí ubicar el resto de las candidaturas, las cuales deberán ser repartidas en forma equilibrada para que todas las fuerzas estén representadas. Priorizando llegar a un acuerdo. Si surgen diferencias, se puede apelar a mecanismos democráticos. El propio Partido Obrero, en elecciones pasadas, propuso realizar internas entre fuerzas de izquierda para determinar el orden de las candidaturas. U otras variantes. Si hay voluntad política, nada tiene que impedir la unidad.
Compartimos con PO que “la reforma política está apuntada especialmente a la proscripción de una oposición por izquierda al gobierno” (Prensa Obrera 1164). Por eso no hay que especular, sino trabajar desde ahora por la unidad. Ante la pregunta acerca de si podrá llegar al 1,5% en las internas abiertas, Jorge Altamira respondió: “Para contestarte eso quiero ver los resultados de las elecciones en Catamarca, Salta y Santa Fe, donde nos va muy bien.” (Clarín, 13/2). Precisamente, Catamarca demostró que no hay aún un giro político hacia la izquierda. PO, -que aspiraba a obtener el 6% y algunas bancas-, a pesar del esfuerzo militante, sacó tres veces menos, en una provincia donde no había otra fuerza de izquierda. Todos tenemos que reflexionar sobre esto desde ahora.
A fines de abril tendrá lugar el congreso anual de PO, donde votará las candidaturas principales de dicho partido, según dijeron públicamente. Sin intentar inmiscuirnos en la vida interna de cada partido, le hacemos llegar la propuesta al Partido Obrero que dicho congreso sea una oportunidad para que apruebe explorar un acuerdo unitario, y que las candidaturas que allí se proclam en sean puestas a disposición de un frente.
Que haya un candidato presidencial único de la izquierda alentaría a que un sector de trabajadores que participaron en las principales luchas y del sindicalismo combativo, se sumen a las listas y lleven las propuestas y candidatos del frente a los lugares de trabajo, estudio, barrio y lugares públicos. Hacer una campaña común fortalecería la enorme pelea que tenemos por delante contra los partidos patronales apoyados por la burocracia sindical.
La unidad nos permitiría difundir en forma unitaria el gran triunfo de los tercerizados del Roca. El pase a planta de 1.500 compañeros, la reincorporación de 200 despedidos y el encarcelamiento de Pedraza, -fruto de esta heroica lucha y del repudio popular ante el asesinato de Mariano Ferreyra-, fueron grandes logros que fortalecen la lucha contra todas las tercerizadas y la podrida burocracia sindical. Banderas que hay que llevar en forma unitaria al terreno electoral. La división de la izquierda, lamentablemente, atentaría contra ello.
La izquierda -más allá de sus diferencias que no se pueden ni deben ocultar-, viene ocupando un importante espacio en el sindicalismo combativo -ganando o influenciando comisiones internas, cuerpos de delegados y seccionales-; en los barrios; entre el movimiento de mujeres y en las luchas estudiantiles. “¿Si la izquierda se une en las luchas, por qué no hace lo mismo en las elecciones?”, se preguntan miles de trabajadores. A eso queremos responder con esta carta.
Proponemos a las distintas fuerzas de izquierda, -entre otras urgentes tareas-, seguir apoyando los reclamos obreros y populares; redoblar la campaña por cárcel para todos los asesinos de Mariano Ferreyra; hacer un acto unitario el 1º de Mayo, donde llamaremos a seguir apoyando a la heroica revolución árabe; bregar por una lista única de oposición en las próximas elecciones nacionales de ATE y, como ya dijimos, avanzar en la concreción de un frente de izquierda. Llamado que hacemos extensivo a todas las organizaciones de la izquierda combativa, a la izquierda no partidaria, a los luchadores sociales y a todos aquellos que consideren que la unidad es un paso fundamental. Esperando, desde ya, una respuesta favorable.
Comité Ejecutivo Izquierda Socialista
15 de marzo de 2011
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