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ItaliaHuelga metalúrgica y 50.000 manifestantesMás de 50.000 personas salieron a la calle en Roma para rechazar los cierres de fábricas. La Fiat amenaza con cerrar dos fábricas más en Italia, sin importarle la cantidad de trabajadores que quedarán en la calle. Entre los manifestantes serpenteaba un pulpo gigante con una inscripción que decía “Finanzas globales” y, en los tentáculos, llevaba muñecos con las caras de Monti, el primer ministro italiano, la canciller alemana Angela Merkel y el presidente de Estados Unidos, Barack Obama. La FIOM (Federación de Empleados y Obreros Metalúrgicos), es el sindicato que organizó la huelga. La Fiat ha decidido hace algún tiempo no permitir el retorno al trabajo de los asociados a este sindicato que cuestionan los acuerdos firmados con otros trabajadores. Por eso, la manifestación no sólo apuntó sus cañones contra el gobierno, pidiéndole que no toque el artículo 18 del estatuto de los trabajadores que garantiza la estabilidad en el trabajo, sino también contra la Fiat y su gerente general, Mario Marchionne. Desde que Fiat pasó a ser socia mayoritaria de la norteamericana Chrysler, intenta trasladar sus fábricas a países con mano de obra barata, especialmente México, para penetrar en el mercado yanqui. A la marcha no concurrió el Partido Democrático (centro izquierda), pero sí otras agrupaciones de izquierda y centroizquierda. Así, el movimiento obrero comenzó a enfrentar abiertamente al gobierno “técnico” de Mario Monti, que sucedió a Berlusconi, que intenta imponer el ajuste como en España, Grecia y Portugal, para pagarle la deuda a los banqueros alemanes y franceses. |
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