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¿Qué pasa con el Belgrano Cargas?
¿Qué pasa con el Belgrano Cargas? 6 Lo podrían declarar en estado de emergencia, ante la presión de los gobiernos provinciales, voceros de los grandes cargadores cerealeros. Ricardo Jaime, Secretario de Transporte de la Nación, anunció que se está avanzando en la reestatización del Belgrano Cargas y que tal medida beneficiaría a 14 provincias argentinas. Una falacia. Lo que está evaluando es su eventual entrega a «un operador privado». Concretamente, el Belgrano Cargas va a caer en manos de Macri y los capitales chinos quienes, junto a Pedraza, lo van a transformar en un ferrocarril sojero-granelero. El Banco Mundial prestaría un crédito, ya que lo mueve el interés de que ese ferrocarril es la herramienta fundamental para el proyecto de los corredores bioceánicos, proyecto de las multinacionales ligadas a la COPAL y que se interrelaciona con el ALCA. Al Belgrano lo desmantelaron y se lo obsequió Menem a la Unión Ferroviaria en la figura de Pedraza, en agradecimiento por los servicios prestados a las privatizaciones. Todos guardaron un cómplice silencio, desde la clase política con raras excepciones, los gobernadores que hoy claman por su retorno, dirigentes gremiales, los claustros universitarios y así de seguido, menos los trabajadores que se manifestaron en las huelgas del año 1991 y 1992, anunciando el desastre por venir. La Unión Ferroviaria se apoderó de ese ferrocarril, a través de la concesión, transformando a algunos de sus talleres en cooperativas. Este ferrocarril nace dentro de un proyecto que debía unir e integrar grandes zonas donde el capital privado (inglés), no le interesaba. Eran los ferrocarriles de fomento nacidos en tiempos de Figueroa Alcorta, que se expande por todo el territorio nacional, menos la pampa húmeda. La paralización paulatina y metódica del Belgrano Cargas tiene sus inicios en el gobierno de Arturo Frondizi. Ahí recibe el primer embate con el cierre de servicios, falta de presupuesto para sus talleres, levantamiento de ramales. La política del actual gobierno es forjar ferrocarriles sojerosgraneleros al servicio de los grandes cargadores de granos, nacionales e internacionales. El proyecto de reprivatización del Belgrano Cargas y el Metropolitano (suburbano de pasajeros) es la afirmación de que los ferrocarriles continuarán concesionados. Hoy, las mismas fuerzas de dominación que lo depredaron, necesitan el Belgrano Cargas de pie. Es que el sistema de transporte automotor carretero ha demostrado su incapacidad como medio de transportación terrestre. Productores agrícolas e industrias del Norte ahorrarían un 50% en fletes si el Belgrano estuviese en forma. Llevar una carga de granos por camión hacia las terminales portuarias cuesta no menos de $ 0,10 por kilómetro y por tonelada, cuando por tren el costo bajaría a $0,05. Para eso quieren al Belgrano, la principal arteria ferroviaria de cargas desde Buenos Aires hasta Bolivia, Chile y Paraguay. Hay que recuperar este ferrocarril, pero para unir las economías regionales y que le sirva esencialmente a los pequeños productores aislados, para que puedan transportar y comercializar sus productos. |
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