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Los ferroviarios en lucha
En estos años han ido creciendo los reclamos entre los trabajadores del transporte. Los ferroviarios del Sarmiento y del Mitre, junto a ferroviarios de la Bordó de otras líneas y acompañados por compañeros de otros gremios y los usuarios hemos llevado adelante todo tipo de medidas por aumentos de salarios, mejoras en las condiciones de trabajo, contra la inseguridad y los despidos. También enfrentamos la política de los gobiernos de proteger los negocios de los concesionarios que siguen destruyendo el patrimonio de los ferrocarriles. Recordaremos algunas de esas jornadas. ¡No pasarán los despidos! En diciembre del 2001 la patronal de TBA pretendió cerrar el año postergando el pago de sueldos y aguinaldos a los ferroviarios de TBA. El país estaba conmocionado por el Argentinazo. La rebelión popular acababa de echar a De la Rúa y los ánimos seguían muy caldeados. Los ferroviarios queríamos cobrar, paramos y la patronal despidió a 144 trabajadores. Hubo un conflicto que duró dos meses, recibió la solidaridad de comisiones internas y sindicatos combativos, asambleas barriales y de la Interbarrial de Parque Centenario. Terminó en un triunfo muy importante, que fortaleció a la conducción combativa y democrática de Haedo, que había derrotado en febrero del 2001 a Pedraza en la Seccional GBA Oeste. Hubo asambleas permanentes, cortes de vías, una firme determinación, discutida y votada entre todos, de enfrentar a la policía, a la patronal y a la conducción de Pedraza que la ayudaba. Se hicieron mesas de denuncia en las estaciones de Once y Retiro, juntando firmas solidarias de los usuarios, que se enviaban por fax al ministerio de Trabajo y a la empresa. Gracias a la firmeza de la lucha fueron reincorporados los 144 trabajadores despedidos, entre ellos varios de los principales activistas y dos miembros de la nueva Comisión Ejecutiva. Desde entonces, no se permitió ningún despido en TBA. La Marcha Federal contra la «Emergencia Ferroviaria» La lucha contra esa maniobra de Duhalde y las empresas comenzó en una asamblea general del 29/01/03. Se denunciaron el proyecto de reducción de servicios, los subsidios, la creciente inseguridad. Se votaron reclamos de salario y convenio. Y el 20 de febrero, impulsada por la Seccional Oeste, los Cuerpos de Delegados de TBA, la Comisión Salvemos al Tren y otras organizaciones, se realizó la Marcha Federal. Trabajadores ferroviarios y usuarios se concentraron en Once, Constitución y Retiro y confluyeron en una nutrida manifestación en la Plaza de Mayo, que exigió la derogación de la emergencia ferroviaria. Un paro por la democracia sindical La experiencia de las asambleas, de la democracia obrera y de la lucha contra la patronal, la conducción burocrática de la Unión Ferroviaria y el gobierno, que vienen haciendo en estos años los trabajadores del Sarmiento y el Mitre tuvo una expresión inédita con el paro del 8 de setiembre de 2004 en el Sarmiento. Se paralizó el ferrocarril, luego de una campaña de esclarecimiento a los usuarios, para exigir la oficialización de la lista Bordó, que enfrentaba a Pedraza y era impulsada por las conducciones combativas de Haedo y Victoria. Pedraza modificó el estatuto de la Unión Ferroviaria, haciéndolo aún más proscriptivo, para tratar de barrer a los dirigentes combativos. A pesar de todo, la lista Bordó logró presentarse en cinco seccionales de las más importantes: Norte, de la Costa, Oeste -donde la Bordó estaba en la conducción desde febrero del 2001-, Sur y Mar del Plata. Ante esto, pese a que cumplían los requisitos proscriptivos, Pedraza impugnó a las tres últimas. Comenzó una dura lucha para lograr el reconocimiento de la Bordó en la seccional Oeste. Hubo actos ante la Unión Ferroviaria y el ministerio, volanteadas a los usuarios, solidaridad de gremios combativos, como el Cuerpo de Delegados del Subte, de dirigentes políticos y sociales. La fuerza de esta campaña preparó las condiciones para que se realizara el exitoso e inédito paro del 8 de setiembre. Cuando estaba por comenzar un segundo paro, el 7 de octubre, el ministerio de Trabajo ordenó a la Junta Electoral de Pedraza que oficializara la lista en Oeste. Se conseguía así un enorme triunfo en defensa de la democracia sindical y los nuevos dirigentes. Como parte de este proceso, a pesar de perder la Seccional Oeste por lo fraudulento de la elección, ganamos la Seccional Victoria y en las elecciones de delegados, que se realizaron una semana posterior, ganamos los dos cuerpos de delegados al servicio de la pelea contra la patronal y por la democracia sindical. La conquista de los Convenios 2003 y 2005 De las luchas más destacadas de los Cuerpos de Delegados de TBA fueron la conquista del convenio y el salario en el 2003 y en el 2005. Discutiendo las distintas medidas de acción en asambleas y votando en la base a los paritarios conseguimos: importantes aumentos salariales y votamos los convenios en asambleas generales llevándolo de 11 categorías a 7 en favor de las reivindicaciones de los compañeros. Este método nos permitió llevar a fondo la democracia sindical, que la base decida, sentando un precedente que excedió los ámbitos del riel preocupando tanto a las patronales como a los dirigentes gremiales vendidos. Al haber incorporado la actualización anual del salario, en el 2004 se discute nuevamente obteniendo otro importante aumento con el mismo método de lucha junto a los paros, movilizaciones, mesas de denuncia y ollas populares. En el 2005 antes de que venza el plazo establecido para la discusión de convenio tanto en lo normativo como lo salarial, en unidad y con los dos cuerpos de delegados a la cabeza obtenemos un aumento promedio de $500 para todos los compañeros. Pasamos de ser el peor convenio flexibilizado y el salario más bajo cuando dirigía la verde de Pedraza en el ‘95. A recuperar el salario y el convenio ganando conquistas, sacando aspectos muy importantes de flexibilización laboral. Mientras seguimos reclamando el convenio único ferroviario. |
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