El segundo cuatrimestre del 2025 arranca con el atraso salarial más grande de la historia de lxs trabajadorxs universitarixs, con presupuestos de funcionamiento congelados y sin ningún tipo de respuesta ante la realidad de que miles de estudiantes están abandonando sus cursadas por no poder afrontarlas económicamente (apuntes, transporte, alojamiento). 

Comienza, además, con la certeza que de avanzar en el Congreso el proyecto de Ley de Financiamiento Universitario que parcialmente recompone las partidas, éste va a ser inmediatamente vetado en pos del criminal ajuste que lleva adelante Javier Milei para cumplir con los pagos de la deuda. Salud, discapacidad, jubilaciones, universidades, CONICET y todo el sistema científico, todo vetado, mientras se le bajan las retenciones a la Sociedad Rural, se le bajan impuestos a las multinacionales petroleras y mineras, y se cumple a rajatabla con el pago de la deuda al FMI. El gobierno muestra con claridad que gobierna para los de arriba y no le interesa la universidad a la que ingresan y los hospitales en los que se atienden lxs trabajadores. 

Lamentablemente, también, el segundo cuatrimestre comienza como se fue el primero: sin un plan de lucha unificado del Frente Sindical Universitario, donde todos los gremios nacionales, los rectores y las Federaciones estudiantiles se deberían reunir para planificar una acción en común, solo hay confianza en el Congreso y acciones aisladas y por separado. Es decir, los mismos errores que nos llevaron a no ganar el presupuesto en el 2024.

No sólo eso, sino que para peor, en vez de profundizar la resistencia ante el ataque de un privatista como Milei a la universidad pública, nos encontramos con que por el contrario, las autoridades de todo color político (radicales “con y sin peluca”, peronistas y ultrakirchneristas por igual), rectorados y decanatos de todo el país aplican el autoajuste: se cierran cursos y comedores, se acelera la búsqueda de recursos privados, se propone avanzar con el cobro de la atención en los hospitales universitarios, etc.. Todo un curso de achicamiento y mercantilización que se corona con el impulso del Sistema Argentino de Créditos Universitarios (SACAU) que profundiza la precarización laboral y busca homologar las carreras de las universidades públicas a la “oferta” de las privadas. 

Frenarlos está en nuestras manos

Frente a este panorama está claro que la posibilidad de poder ponerle un freno a la destrucción de la universidad pública está en manos de sus estudiantes y trabajadores. Es importante que las dos federaciones docentes nacionales (CONADU Histórica y CONADU) hayan resuelto un paro de una semana. Pero ya vemos como gremios como FEDUBA se bajaron a solo un día. Lo mismo que la FATUN. 

Defendemos el NO INICIO en la primer semana de clases como una forma de profundizar la lucha e instalar el reclamo. Pero creemos que es necesario combinar los paros con medidas de articulación entre estudiantes, docentes y no docentes. 

Docentes y nodocentes saben plenamente por su salario que la situación no da para más, y así lo demuestran las miles de renuncias en este año y medio. Lxs estudiantes también dejan sus cursadas porque es insostenible el nivel de recorte de horarios y la crisis económica para sostener estudiar. Por eso es importante repetir como en el 2024 la organización del movimiento estudiantil que pudo tomar más de 100 facultades en todo el país. 

Solo con paros no vamos a poder torcerle la mano a este gobierno ultraderechista. Hacen falta que se convoquen Asambleas estudiantiles, de docentes y no docentes y que se convoquen Interclaustros para pensar un plan de lucha unificado, Jornadas de Clases Públicas, radios abiertas, ruidazos, cortes de calles, y movilizaciones que preparen una TERCER MARCHA FEDERAL que golpee en cada provincia y en el centro del poder político al gobierno nacional.

El Frente Sindical y la FUA, tienen que terminar con la política de autoajuste y confianza en el Congreso. Exigimos que se ponga en pie un plan de lucha unificado y contundente hasta derrotar el ajuste. Y al mismo tiempo, desde cada unidad académica, impulsemos las acciones que podamos poner en pie en cada lugar entre estudiantes, docentes y no docentes.

JIS - Lista Fucsia docentes - No docentes en Lucha