Además de contaminar nuestros suelos, el agua y expoliar nuestras riquezas, la Barrick despide masivamente. Desde Izquierda Socialista venimos llevando adelante una campaña por la reincorporación inmediata de los compañeros, a la vez que peleamos por la expulsión de la Barrick y por una minería no contaminante, sustentable, estatal, al servicio de las necesidades populares y en consulta con los pueblos originarios.