En Economía, por primera vez en décadas, la participación en el paro se discutió en numerosas oficinas y resolvió en asamblea convocada por la nueva junta interna de ATE. Después de un rico debate, por amplia mayoría se resolvió ser parte de la jornada de paro levantando nuestros reclamos, sumándonos a los cortes y reclamando la continuidad en un plan de lucha. Muchos jefes intentaron disimular la adhesión de los trabajadores indicando en el parte que no concurrían por razones de fuerza mayor. Hecho que fue rechazado en los sectores con mayor grado de organización, donde se reclamó que figurara claramente la adhesión al paro.