Raúl Lescano fue condenado por organizar un “escrache” contra Sobisch, ex gobernador de Neuquén, en el marco del repudio popular frente a la muerte de Carlos Fuentealba en abril de 2007.
Al momento de la ratificación de su condena y posterior detención, a fines del año pasado, los médicos de la Corte dictaminaron que debía recibir atención médica permanente, razón por la cual se pidió se le diera el beneficio de la pena domiciliaria. El tribunal Oral Federal Nº 3 le negó esta posibilidad a pesar de estar reponiéndose de una intervención quirúrgica. Tanto el poder judicial, como el gobierno nacional, dieron un trato revanchista a Raúl Lescano y su compañero Esteche: ambos fueron condenados por haber organizado un escrache contra Sobisch, mientras los miembros del gobierno de Neuquén y los jefes policiales neuquinos responsables del asesinato de Carlos Fuentealba gozan de impunidad. Más tarde, a pesar de los riesgosos problemas de salud de Lescano, negaron la posibilidad de la prisión domiciliaria.
Los organismos de derechos humanos nucleados en el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia exigimos a las autoridades nacionales se tomen todas las medidas necesarias para salvaguardar la salud del compañero.
AEDD-Asoc iac ión Ex Detenidos Desaparecidos; APEL-Asociación de Profesionales en Lucha; CADEPCoordinadora Antirrepresiva por los Derechos del Pueblo; CADHU-Centro de Abogados por los Derechos Humanos; CEPRODH-Centro de Profesionales por los Derechos Humanos; CMC-Colectivo Memoria Militante; LIBERPUEBLO- Asociación por la Defensa de la Libertad y los Derechos del Pueblo.