La propuesta fue impulsada por el artista lujanense radicado en México y amigo de Dardo, Osvaldo Caldú. La obra, realizada en hierro forjado de varias toneladas y traída en barco desde este país representa una mano empuñando una plumilla para escribir emergiendo de la tierra. En la parte posterior lleva inscripta la expresión: “Quisieron enterrarnos, pero no sabían que éramos semilla” en solidaridad con los estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa. Junto a una placa con el poema de Dardo“Declaración Jurada” que finaliza diciendo “sobre mi tumba verán florecer un puño”, motivo de inspiración de Caldú para realizar la pieza artística.

El acto sencillo pero emotivo contó con más de un centenar de personas. Estuvieron además referentes de organizaciones de derechos humanos y políticas locales.

Izquierda Socialista se hizo presente con un escrito que fue leído reivindicando “lo que compartimos y seguimos compartiendo con Dardo, porque como hizo él, seguimos luchando por una Argentina socialista, por una Argentina gobernada por los trabajadores, hermanada con los trabajadores y los pueblos de Latinoamérica, con justicia para los 24 compañeros desaparecidos de Luján y para el resto de los 30 mil, sin jóvenes apropiados por genocidas, sin pibes asesinados por la policía del gatillo fácil, sin desaparecidos en democracia, sin presidentes millonarios y trabajadores pobres. Y porque estamos orgullosos de que haya florecido un puño sobre la tumba de nuestro compañero.”