Lavando su auto en la puerta de su casa lo rodeó una balacera de la que participaron fuerzas policiales y el comando radioléctrico. Hubo muchísimas pruebas aportadas por la familia para demostrar su asesinato y que fue una víctima del gatillo fácil. Pero la justicia miró para el lado de los verdugos avalando la violencia institucional. La sentencia en día de paro general no fue casual. Se inscribió en el propio fallo. Quisieron impedirnos la movilización y que reclamemos perpetua para los asesinos. Fue un juicio oral y público sin garantías adecuadas para el desarrollo de las audiencias, en un proceso plagado de irregularidades. Montaron un operativo policial inédito adentro de los Tribunales y con violencia luego de conocido el fallo, sacando por la fuerza a la familia. Tampoco garantizaron atención médica ni ambulancia cuando frente a la crisis que provocó la vergonzosa sentencia era urgente asistir a familiares de la víctima. Los jueces absolvieron a la principal responsable de la muerte, la agente Gladis Beatriz Galinde, a quien se le atribuye el disparo letal en la cabeza. Al resto de los policías involucrados se le dieron penas menores. Aún así no pudieron impedir que el juicio sea presenciado por centenares de personas en la puerta de los Tribunales. La familia Herrera fue rodeada por familiares de muchos otros jóvenes víctimas del gatillo fácil en la Multisectorial contra la violencia institucional de la que somos parte. Esta Multisectorial (de organizaciones políticas, sociales, sindicales, de derechos humanos, culturales, académicas y familiares) acompañó el proceso de lucha y el juicio con diferentes acciones en la calle como murales, marchas, conferencias de prensa, volanteadas o intervenciones teatrales. En el acto, luego de escuchar el fallo, María Elena, mamá de Jonatan y su hermana Julieta, con una fuerza digna de admiración se comprometieron a seguir la lucha por verdadera justicia. ¡Apelarán! Por cárcel perpetua a los policías y ¡destitución para los jueces! Los gobiernos son responsables de esta impunidad.