El gobierno corrupto de los Zamora (que en su momento fueron radicales K y ahora están “girando” hacia el macrismo) junto con el ajuste que se da a nivel nacional, son los responsables de haber convertido a nuestra provincia en la capital de la pobreza y la desigualdad. A la vez, todo el que denuncia o lucha contra esta realidad es perseguido y criminalizado. En Santiago del Estero reina la censura y la violación de los derechos humanos. La ONU nos da la razón a quienes venimos luchando por terminar con esta situación y exigimos que la crisis la paguen los empresarios y terratenientes, no el pueblo y la juventud trabajadora.