El Frente de Izquierda hizo una muy buena elección a lo largo de todo el país. Como reflejamos en estas páginas, fuimos capaces de enfrentar la polarización que se dio en la provincia de Buenos Aires, obteniendo el 3,62%, porcentaje superior al que se había obtenido en las PASO 2015. Con estos guarismos estamos garantizando renovar nuestra banca en la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires y en carrera en la disputa por el diputado nacional. Las mejores votaciones se lograron en el conurbano bonaerense y en particular en las barriadas obreras y populares. Estos resultados tienen más valor ante una elección donde se jugaron las figuras más importantes de los partidos tradicionales, como Cristina Kirchner, Massa, Stolbizer, Randazzo, Esteban Bullrich y Graciela Ocaña y apelaron a la gobernadora Vidal.

En la Ciudad de Buenos Aires también realizamos una muy buena performance, que con idénticos números nos permitirá obtener un nuevo legislador porteño en octubre. Claramente, si no fuera por el rol divisionista de Zamora, también estaríamos en condiciones de pelear por el diputado nacional.
A esto le tenemos que agregar las muy altas elecciones logradas en Jujuy, Santa Cruz, Mendoza, Santiago del Estero, Salta, Neuquén y Córdoba, como ilustramos en el cuadro de resultados de esta misma página.

En las elecciones de años anteriores se dio siempre el fenómeno de que el Frente de Izquierda aumentó su votación entre las PASO y las elecciones generales. Será un gran desafío a alcanzar que, de lograrlo, nos permitiría obtener más bancas y ser una referencia más fuerte aún para los luchadores y los trabajadores en general. 

Los votantes del Frente de Izquierda apostaron por listas llenas de luchadores, del sindicalismo combativo, del movimiento de mujeres y de la juventud. Fue un voto para fortalecer cada uno de estos sectores y sus luchas. Y también ha sido un voto por un programa de fondo, que arranca por la suspensión inmediata de los pagos de la deuda externa para destinar ese dinero a salario, trabajo, salud, educación y vivienda. Y para continuar exigiendo la aparición con vida de Santiago Maldonado y castigo a los culpables.

El voto al FIT, a su vez, ha sido en apoyo a la construcción que venimos realizando desde 2011 de una alternativa de la unidad de la izquierda. Los que trataron de “parasitar” del prestigio y el nombre del Frente de Izquierda, apelando a la confusión, fracasaron estrepitosamente, como la alianza entre el Nuevo MAS y el MST, u obtuvieron votaciones inferiores a las nuestras, como Zamora.

Agradecemos a todos los compañeros que nos acompañaron con su voto, a los que nos ayudaron en la campaña dando a conocer nuestras propuestas y a los miles de fiscales que participaron el domingo. Ahora debemos redoblar el esfuerzo hacia octubre. Invitamos a todos a acercarse a nuestros locales, a participar de nuestras reuniones de balance electoral y a discutir juntos cómo la seguimos, para hacer más grande a Izquierda Socialista y al FIT, obtener más bancas en octubre y fortalecer una alternativa política que enfrente con más fuerza el mayor ajuste que se viene, combatiendo a Macri y a sus cómplices del peronismo, en la perspectiva de la auténtica salida, un gobierno de los que nunca gobernaron, los trabajadores y demás sectores populares.