Se acaba de protagonizar una enorme rebelión en La Matanza. Cientos de choferes repudiaron el brutal asesinato de Leandro Alcaraz (ver páginas 4 y 5). En medio del dolor expresaron su indignación con paros y marchas masivas, lucha que fue acompañada por miles de vecinos reclamando seguridad.
Este crimen se da en un distrito hundido en la pobreza y la desigualdad social culpa de Cambiemos, con la gobernadora Vidal a la cabeza, como del peronismo. La actual intendenta es Verónica Magario, del Frente para la Victoria. El PJ vino gobernando allí desde 1983, es decir, durante 35 años, con los deplorables resultados a la vista.
Vidal se acuerda ahora, ante la muerte de un trabajador, de dar créditos para cámaras de seguridad y botones antipáticos. Magario (la que ploteó los patrulleros con su nombre para hacer campaña contra la inseguridad) criticó a Vidal porque no le manda gendarmes. Magario se comparaba con Vidal diciendo “tenemos esta cuestión de sensibilidad que demanda la sociedad, la sencillez… vamos a trabajar en conjunto”. Vidal y Magario hacen anuncios o se “pelean” para la tribuna, cuando son las responsables de la pobreza y la inseguridad que llevan a estas muertes evitables.
Este cruel hecho mostró también la complicidad de los dirigentes de la UTA. No movieron un dedo sabiendo que de 19.000 colectivos que circulan por Capital y Buenos Aires solo 1.000 tienen cámaras de seguridad. Son encubridores de las patronales del transporte que se llevan subsidios millonarios a costa de la vida ajena. Por eso fueron ampliamente repudiados.
Otro hecho de gran connotación -aunque silenciado por los medios nacionales- es el plan de lucha ejemplar que están llevando adelante los docentes de ATEN Neuquén. Con asambleas masivas y una conducción combativa, como la de ATEN Capital, están defendiendo el salario y la escuela pública.
La docencia neuquina viene de quebrar el techo salarial del año pasado. Lograron un aumento de hasta el 37% con cláusula gatillo. Un ejemplo para todo el movimiento obrero. Vienen avanzando porque también están sobrepasando los obstáculos que ponen los dirigentes de la conducción provincial que responden a la Celeste y al kirchnerismo, que intenta darle oxígeno al gobierno ajustador del MPN, cuando hay una bronca tremenda por el robo salarial y los descuentos de los días de paro.
Esta lucha es un ejemplo porque es lo opuesto a lo que hacen las conducciones traidoras y la CGT, que vienen firmando paritarias por el 15%, en cuotas y sin cláusula gatillo. Traidores que también dejan pasar los despidos. El legendario burócrata Armando Cavalieri, de Comercio, dijo estar “contento por frenar los despidos” en Carrefour, cuando lo cierto es que habilitó los retiros voluntarios (despidos encubiertos) en beneficio de esa mafiosa multinacional francesa.
La rebelión de los choferes de La Matanza, como la de los docentes de Neuquén, muestra que hay una gran predisposición a la lucha y que sobre la bronca contra los despidos, el robo salarial y la inseguridad. Que ante ataques concretos se responde con paros y movilizaciones a pesar de los dirigentes traidores.
Es evidente que si hubiera una convocatoria para un plan de lucha nacional y un paro general contra el ajuste, el vergonzoso techo del 15%, los tarifazos y los despidos, habría una gran demostración de fuerza en todo el país. Eso permitiría unificar al movimiento obrero en una lucha nacional, retomando las gestas de diciembre pasado contra el robo jubilatorio. Es lo que venimos impulsando desde el sindicalismo combativo y la izquierda.
Al 15% de la inflación no se lo cree nadie. Hasta el propio FMI, que apoya a Macri, dijo que la inflación rondará el 20%. Otras proyecciones dan que llegaría a casi el 25%. ¡Y la CGT mantiene el pacto con el gobierno y sigue en la rosca por los sillones de una posible reunificación! ¡Vergüenza total!
Los bancarios vienen de paros contundentes ante las patronales del sector que hacen fortunas siderales y solo les ofrecen un aumento de miseria. Una provocación total. Otras conducciones, como la de la UOM, no se animan a firmar por el 15% y piden un poco más ante el miedo de sus bases. Lo mismo pueden hacer otras cúpulas acosados por la bronca desde abajo y ante un gobierno que mete tarifazos y avala la suba de precios que carcome día a día los bolsillos populares. Hay que llamar a los trabajadores de los gremios donde se firmó a la baja a que lo repudien, exigiendo un aumento de emergencia y que reabran las paritarias.
Este jueves habrá en Buenos Aires una marcha de la Multisectorial contra el tarifazo, Camioneros, la Corriente Federal de Bancarios, las CTA, cooperativas y otras organizaciones. Llamamos a concurrir, pero no puede ser una acción aislada. Tiene que ser parte de un plan de lucha no solo contra las subas de las tarifas, sino contra el robo salarial, los despidos y el ajuste de conjunto. Muchos de los convocantes llamaron a la marcha del 21F pero lamentablemente después se borraron. Los llamamos a que convoquen al paro general y a un plan de lucha.
Y el 1º de Mayo, día internacional de los trabajadores, el Frente de Izquierda convoca a un gran acto en Plaza de Mayo y en todo el país, contra el ajuste de Macri y los gobernadores (ver contratapa). En apoyo a las luchas de Argentina y el mundo, por el paro general y un nuevo sindicalismo combativo contra la burocracia traidora. Para postular medidas de fondo, como dejar de pagar la deuda externa, entre otras, que combatan al ajuste capitalista. Un acto para fortalecer una alternativa política de la unidad de la izquierda. Para enfrentar al gobierno y a los políticos patronales de Cambiemos, el peronismo y los que se dicen “opositores” pero son cómplices de Macri, levantando una salida opuesta.
Convocamos a participar de los actos del 1º de Mayo para levantar una tribuna de lucha, obrera y socialista, para prepararnos para los desafíos que se vienen. Invitamos a todos nuestros lectores a participar.