Trabajadores de Latam contra el vaciamiento
La aerolínea Latam anunció el cierre de operaciones en varios países, incluido Argentina. Son más de 1.700 familias que ven peligrar sus puestos de trabajo ante el intento de la empresa de vaciar la empresa llevándose las aeronaves que están en el país, para lo que ha contratado mecánicos y pilotos, de una empresa tercerizada de Mendoza, para que pongan en marcha los aviones de matrícula Argentina y así poder llevarlos a Chile. Ante esta maniobra, el martes los trabajadores técnicos de Latam nucleados en el sindicato Ustara frenaron los aviones y la patronal no logró sacarlos del país. Luego de esta importante acción cortaron la avenida Costanera frente al Aeroparque porteño a fin de visibilizar el conflicto, se sumaron trabajadores autoconvocados nucleados en APA y del cuerpo de delegados de los técnicos de Austral que unidos reclamaron “exigirle al gobierno que intervenga y que los sindicatos se pongan al frente de esta pelea”, como dice el comunicado de los trabajadores. Izquierda Socialista acompañó la concentración y Juan Carlos Giordano volvió a llevar la solidaridad de nuestro partido y el Frente de Izquierda Unidad.
Lecheros en lucha por salarios
Los trabajadores de la actividad pararon el pasado lunes en reclamo de una recomposición salarial por el retraso del sector ante la inflación y las postergaciones en las negociaciones. Denunciaron a las patronales que, a pesar de la pandemia, siguen produciendo hasta los días feriados, obligando a los trabajadores a hacer horas extras. Por otro lado, el negocio de la leche en polvo para exportar, a un valor de 3.200 dólares la tonelada, pone al sector como uno de los más beneficiados a pesar de la crisis, motivo suficiente para actualizar los sueldos.
Rápidamente, el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria, pero desde la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera (Atilra) comunicaron que el acatamiento al paro fue total.
Hospital Posadas. Repudiamos despido
Al despido del compañero Mariano Roldán, que hasta el jueves 25 brindaba servicios en la atención de pacientes Covid, lo consideramos una medida arbitraria e injusta ya que, tal como fue aplicada, coarta un derecho elemental que como trabajadores nos asiste, el de expresar en libertad planteos y/o reclamos que nos son propios, agravado porque se da en medio de una pandemia donde el Posadas es hospital de referencia frente al Covid-19.
Este despido nos remite al pasado reciente, cuando durante el gobierno macrista cientos de trabajadores, muchxs con veinte años o más de contrato, fuimos despedidxs por el solo motivo de exigir derechos postergados. Todo esto amparado por la precariedad laboral que hoy tristemente continúa. De hecho, Mariano Roldán trabajaba como monotributista, lo que facilitó su separación.
Tras años de intensos reclamos por nuestra reincorporación, cuando asumió el presidente Alberto Fernández las autoridades del Ministerio de Salud entendieron que nuestros despidos fueron injustos y por ello fuimos reincorporados. Del mismo modo reclamamos al ministro Ginés González García y al director del hospital Posadas, Alberto Maceira, igual tratamiento para con Mariano y que sea reincorporado en lo inmediato. Además, que se cumpla la disposición vigente del Ejecutivo nacional sobre la prohibición de los despidos, en especial por tratarse de personal asistencial, profesional calificado de enfermería, en medio de esta pandemia donde el recurso humano es esencial y fundamental.
Los trabajadores del hospital Posadas no podemos permitir un solo despido más. Basta de monotributos y precarización laboral.
Trabajadores reincorporadxs del hospital Posadas
Bariloche. Marcha de choferes
Luego de doce días de paro, el lunes 13 se realizó una marcha impulsada por los choferes desde la base, quienes mantienen un enfrentamiento con el burócrata local que responde a la línea nacional de UTA. El fin de semana hubo una ofensiva del intendente, de la empresa Mi BUS, de la conducción de la UTA local y de algunos medios buscando el enfrentamiento entre trabajadores. El reclamo era por el pago de salarios adeudados y que el SAC no sea pagado en cuatro cuotas. La empresa viene recibiendo subsidios millonarios y escalonados. Debido a la movilización lograron un primer paso, que se les pague el sueldo de junio, mientras sigue la pelea por el aguinaldo completo. Izquierda Socialista estuvo presente marchando con los choferes y solidarizándose con su lucha.
Trabajadores de Noly. Un paso adelante en sus reclamos
La panificadora de zona oeste con plantas en Caseros y Ciudadela es otra de las empresas que tiene trabajadores contagiados con Covid-19 y, sin embargo, la patronal sigue produciendo de manera normal. Los trabajadores, junto a la comisión interna, hace semanas vienen denunciando que la empresa no toma los recaudos necesarios de salubridad. Le exigen a la patronal la realización de hisopados y aislamiento del personal infectado para evitar la propagación de casos que ya alcanzan a una veintena. La comisión interna y la directiva del Sindicato de Pasteleros radicaron una denuncia en el área de Trabajo y de Salud del municipio de 3 de Febrero, que conduce Diego Valenzuela, de Cambiemos.
Debido a la fuerza de la base y a la visibilidad que empezaron a tener estas denuncias se logró que en estos días se empiecen a realizar los hisopados a los trabajadores y a tomar las medidas de salubridad.
González Catán. No al desalojo de los vendedores ambulantes y feriantes
La semana pasada la policía municipal, por órdenes de funcionarios del municipio de La Matanza, que dirige el peronista Espinoza, desalojó de forma violenta a los manteros que trabajan en el playón de los galpones ferroviarios abandonados de González Catán. En el galpón 3 funciona también un espacio recuperado por los vecinos que luchan contra la contaminación ambiental del Ceamse en la zona, donde se realizan actividades culturales y hay una feria. Los feriantes también fueron violentamente desalojados y les robaron todas sus pertenencias, incluidas sus herramientas de trabajo. El martes 14 se realizó una asamblea en el galpón donde participaron unos 150 compañeros y compañeras, en su gran mayoría vendedores ambulantes y feriantes. Desde Izquierda Socialista nos hicimos presentes con los compañeros de la zona, entre ellos dos vendedores ambulantes, y tomamos la palabra repudiando la represión ordenada por el municipio y la policía y exigiendo que se deje trabajar a los compañeros. A propuesta nuestra se votó la realización de una movilización el próximo martes 21 de julio a las 10 frente al municipio de La Matanza para exigirle al intendente que deje trabajar a los compañeros y cese la represión.