El pasado 4 de marzo Juan Carlos Giordano se hizo presente en la puerta de la planta de Klaukol en Virrey del Pino, La Matanza. Un grupo de vecinos autoconvocados estaba haciendo un bloqueo frente a la fábrica. Ya son más de cien las vecinas y vecinos fallecidos por la contaminación que emana en el barrio Las Mercedes, noventa y nueve a causa de cáncer. Klaukol irradia sílice en el aire (vidrio molido), entre otros contaminantes. Nadia Carabajal, vecina del barrio, de tan solo 27 años, se encuentra luchando por su vida. Hubo una asamblea donde se relataron casos escalofriantes de vecinos que perdieron a todos sus familiares. “Klaukol mata y nadie hace nada”, dicen.
Hace más de una década vienen reclamando el traslado de la planta a 8 kilómetros del casco urbano, como establece la ley para fábricas de nivel 3 de contaminación, y que se preserve la fuente de trabajo (con obreros que también se enferman). Los vecinos, con la compañera Susana Aranda a la cabeza, vienen dando esa pelea en las calles, juzgados y medios de comunicación, pero la multinacional suiza Klaukol goza de impunidad y favores del intendente peronista Espinoza y la Justicia local. Todos operan para protegerla. “Estamos frente a la Mercedes-Benz, donde los obreros se enferman por Klaukol, y el burócrata del Smata Pignanelli no dice nada”, relata Susana.
Giordano llevó la solidaridad de Izquierda Socialista, siendo el primer diputado nacional en visitar el barrio, difundiendo inmediatamente el caso con un video junto a los vecinos y el compromiso de denunciarlo nacionalmente. Nuestra militancia desde hace tiempo es parte de esta gran lucha junto con otras organizaciones.
Corresponsal