El 18 de enero se realizó el segundo Atlanticazo en todo el país, organizado por la asamblea de Mar del Plata (Mar libre de Petroleras) e impulsado a nivel plurinacional por la coordinadora Basta de Falsas Soluciones. Hubo movilizaciones en varios puntos de la Costa Atlántica, Ciudad de Buenos Aires, La Plata, Neuquén, Córdoba, Misiones, La Rioja y Santa Cruz, entre otros.
El Atlanticazo, aprendiendo del camino marcado por el Chubutazo, está desarrollándose en todo el territorio para ponerle un freno a la luz verde que le dieron desde el gobierno de Alberto Fernandez, con el ministro Cabandié y el aval del gobernador Kicillof y los intendentes de la costa atlántica, al proyecto de exploración sísmica en nuestro mar argentino para la instalación de petroleras.
Este proyecto aprobado el 30 de diciembre de 2021, está enmarcado en un plan del gobierno de avanzar con un paquete extractivista para conseguir los dólares que necesita para pagar la deuda externa. Por eso, no es de extrañar que en el paquete de leyes que propone tratar el gobierno nacional en febrero en el Congreso Nacional, esté incluída la ley de Hidrocarburos, mientras no aparece la ley de Humedales que entonces pierde estado parlamentario.
Con este proyecto de Equinor junto a Shell e YPF, primer paso para la explotación petrolífera en el Mar Argentino, será inevitable, como lo demuestran los estudios, que se produzcan derrames de petróleo, incluso en grandes cantidades, mayores a 1.000 barriles.
La semana pasada fue noticia el derrame en las costas de Perú de miles litros de petróleo en un yacimiento de características similares a la que quieren instalar en Argentina. Esta vez en manos de la multinacional Repsol, quien mintió intentando minimizar y ocultar la noticia del desastre ambiental que generó el derrame, y se negó a actuar rápidamente para intentar solucionar la catástrofe que el derrame estaba ocasionando para el ecosistema del lugar. Tal como denuncia nuestro partido hermano Uníos de Perú, “según la empresa, se enteraron de la magnitud del desastre por las redes sociales que daban cuenta del derrame de más de seis mil barriles de petróleo, con 18 mil metros cuadrados de mar afectado, dejando a su paso muerte, contaminación, desolación e indignación”. Un proyecto como el impulsado por Equinor, traería los mismos riesgos para nuestro mar, afectando su flora y fauna, y generaría una contaminación sin precedentes.
Por todo esto, es fundamental seguir impulsando el Atlanticazo para frenar este proyecto extractivista.