Escribe Juan Carlos Giordano, candidato a diputado nacional por Izquierda Socialista/FIT Unidad
El pasado 23 de agosto se votó en la Cámara de Diputados una reforma a la ley de alquileres completamente perjudicial para millones de inquilinas e inquilinos y en beneficio de los especuladores y el negocio inmobiliario. Entre otras cosas, se bajó de tres a dos años el plazo del contrato (y de su renovación) y los aumentos serán cada cuatro meses y no al año como estaba ahora, dejando en manos del propietario el mejor índice de actualización, abriendo incluso las puertas para que sea en dólares, además de quitarles impuestos. Escandaloso por donde se lo mire. ¿Pero cuál es la conclusión política? Que solo las cuatro bancas del Frente de Izquierda lo rechazaron categóricamente y propusieron la única salida en beneficio de las y los inquilinos. Miremos qué hizo el resto.
El peronismo proponía otro proyecto que también exima de impuestos a los propietarios con el verso de que así “iban a poner en alquiler sus propiedades”. Nada de gravar a los dueños de las 250.000 viviendas ociosas que hay en CABA, por ejemplo. Su proyecto no se aprobó, y cuando se puso a votación el de las y los diputados de Patricia Bullrich y Larreta de Juntos por el Cambio (con el apoyo de Schiaretti y el quórum que le dio Milei) hubo trece ausencias y una abstención que permitieron que la ley salga. ¿Así se combate a la derecha?
Por su parte, la Libertad Avanza del ultraderechista Milei, al dar el quórum permitió que se apruebe la ley aunque luego votó en contra. ¿Por qué? Porque en nombre “de la libertad” dice que no tiene que haber ninguna ley que regule nada. Considera por ejemplo que un joven precarizado con un sueldo miserable puede negociar “libremente” y en las mismas condiciones con el dueño. Queda claro que el plan motosierra de Milei es en contra de la juventud, de la clase trabajadora y de los más humildes.
Solo el bloque del Frente de Izquierda Unidad (sin ausencias ni fisuras) votó en contra, denunciando a las corporaciones inmobiliarias y en defensa de las familias trabajadoras que no pueden pagar un alquiler. Conclusión: cuando hay que estar del lado de los que menos tienen, solo van a estar las bancas de izquierda. Una razón muy valiosa para apoyar al Frente de Izquierda Unidad que encabezan Bregman-Del Caño.