Escribe Miguel Lamas, dirigente de la UIT-CI
El viernes 19 de abril Israel realizó un nuevo ataque a Irán arrojando misiles. El 1° de abril Israel había bombardeado el consulado de Irán en Damasco, Siria, destruyendo el edificio y asesinando a doce personas. Posteriormente fue Irán que envió drones y misiles sobre Israel respondiendo a ese ataque y sin mencionar al genocidio en Gaza.
El objetivo de Israel era justamente lograr nuevamente “victimizarse” como “atacada” por otros países, y que se dejara de hablar de su genocidio en Gaza, que ya provocó más de 40.000 muertos, la mayoría mujeres y niños y ahora además bloquea alimentos causando hambruna.
Y recientemente, según algunos medios árabes y de Israel, Estados Unidos habría autorizado el ataque masivo de Israel por tierra a Rafah, la ciudad del sur de Gaza donde hay más de un millón de refugiados que tuvieron que dejar sus casas en otras partes de Gaza. El parlamento yanqui, votó recientemente nueva ayuda en armas a Israel, cuando ya el 60% de las armas y bombas que recibe Israel vienen de Estados Unidos.
Además de continuar las masacres en Gaza, al menos catorce personas murieron en los últimos días en una incursión israelí en el campo de Nur Shams, cerca de Tulkarem, en el norte de Cisjordania, la otra región donde habitan palestinos donde desde el 7 de octubre fueron asesinados más de 480 personas. En respuesta hubo una gran huelga general palestina en Cisjordania.
La solidaridad con Gaza contra el genocidio se sigue multiplicando en el mundo con decenas de actos masivos cada semana en Europa, Estados Unidos y países árabes. El domingo pasado salió de Turquía la “Flotilla de la Libertad”, una iniciativa para intentar romper el bloqueo de Gaza y hacer llegar alimentos y medicamentos, con 800 activistas de treinta países y 5.500 toneladas de ayuda humanitaria. Desde la UIT-CI participamos en marchas y actos en Argentina y otros países y llamamos a la unidad apoyando todas las acciones en solidaridad con Palestina.