
Escribe Juan Carlos Giordano, diputado nacional de Izquierda Socialista/FIT Unidad
Izquierda Socialista en el FIT Unidad rechaza el proyecto de la ultraderecha de Milei y también los del peronismo. Ninguno está por el pleno empleo, por terminar con el empleo precarizado y tercerizado, ni por salarios y jubilaciones dignas. Para lograrlo hay que tomar medidas de fondo que solo el Frente de Izquierda postula.
Rechazamos la jornada de 12 horas y las 48 horas semanales actuales, una de las más altas del mundo. En Chile es de 40, Brasil 44 y en países de la Unión Europea baja a 35 semanales. Estamos por la reducción de la jornada laboral a seis horas diarias (30 semanales) y por el reparto de las horas de trabajo entre toda la mano de obra disponible, con igual salario. Con estas medidas se acabaría con la desocupación actual.
A su vez, planteamos el pase a planta permanente de las y los contratados y precarizados de todas las actividades; la prohibición de despidos y suspensiones y la estatización de toda empresa o establecimiento que cierre o despida, poniéndolo a funcionar bajo control obrero. Para terminar con el trabajo no registrado, hay que intimar a las patronales para que un plazo razonable registre a su personal, bajo apercibimiento de fuertes sanciones económicas. Y volver a imponer los aportes patronales a la seguridad social que fueron reducidos en los años ‘90.
Postulamos un inmediato aumento de salarios y jubilaciones al valor de la canasta familiar de ATE Indec, 1.979.000 pesos. Hoy la canasta de pobreza, aun mal calculada, asciende a 1.176.852 (no tiene en cuenta un montón de ítems como educación, salud o vivienda). Monto al que no llega la mayoría de los laburantes ya que el promedio salarial es de 970 mil pesos. Y la mayoría de las y los jubilados, con su mínima de 390.000 pesos incluido el bono, no llegan ni siquiera a la canasta de indigencia valuada en 527.736, quedando ese monto también arriba del vergonzoso salario mínimo vital y móvil (322.000 pesos).
Para reactivar la economía y generar más puestos de trabajo, además de las medidas señaladas, hay que implementar un plan de obras públicas en base al no pago de la deuda externa y fuertes impuestos a las ganancias capitalistas de bancos, multinacionales, terratenientes, como parte de un plan económico obrero y popular que erradique los males capitalistas y brinde a nuestra clase trabajadora y a la juventud un futuro laboral y de ingresos dignos.










