Redacción de Izquierda Socialista y de El Socialista
Muy lejos de los intereses de los trabajadores, el "plenario" sindical de Mar del Plata no delineó ninguna medida de fuerza ni plan de lucha. Un guiño a políticos patronales, empresarios y a la CGT oficialista.
Por Juan Rivera
El denominado plenario sindical entre Hugo Moyano y Luis Barrionuevo no ayuda en nada a los trabajadores para pelear por aumento de salario y otras reivindicaciones. Ni siquiera para organizarse de cara a las paritarias. Tampoco tenía intención de hacerlo. Por el contrario, como lo evidencian los documentos, los discursos y los invitados -incluso aquellos que decidieron pegar el faltazo-, lejos de intentar delinear un plan de lucha, se trató de un hecho político-patronal.
Pocos días de presión mediática le bastaron al titular de la AFA, el mafioso Julio Grondona, para lograr que el gobierno le entregue 100 millones
de pesos extras para financiar las millonarias deudas de los clubes con los futbolistas. Capitanich salió presuroso a autorizar el giro de fondos a los clubes para frenar una eventual medida de fuerza de los jugadores que impidiera el normal comienzo del torneo. Una vez más el gobierno ha dado muestras que el saneamiento de los clubes que prometió cuando comenzó Futbol para Todos eran fuegos de artificio.
El gobierno Kirchnerista, después de su derrota electoral de octubre, pretendió cambiar su imagen para remontar la caída en su apoyo popular. Para eso sacaron a Guillermo Moreno y pusieron a Capitanich como jefe de gabinete, con la orden de que saliera a "hablar" con el periodismo y la oposición. Pero como se trata de tapar el sol con la mano, desde entonces no embocan una. Todo les sale al revés. Porque justamente es un maquillaje para mantener la misma política contra el pueblo que los llevó al desastre electoral. Con el agravante que el gobierno vive una crisis política profunda de la que no puede salir.
Como todos los años para esta fecha, nuestro partido está en campaña financiera, recolectando aportes económicos para poder seguir interviniendo en las luchas políticas y sindicales. Izquierda Socialista se sostiene con el aporte de trabajadores, amigos y simpatizantes. Al contrario, los políticos patronales son financiados por multinacionales y grandes empresarios, a quienes representan.
Casi no hubo líder de la política mundial imperialista y hasta del empresariado mundial que no expresara una gran admiración por el recientemente fallecido líder sudafricano Nelson Mandela. En la época del Apartheid, muchos de ellos hubieran apoyado su encarcelamiento. Que ahora le rindan honores también muestra los dos rostros de la trayectoria de Mandela. El de la lucha revolucionaria contra el régimen racista y el posterior, de sostén del capitalismo en Sudáfrica.