Escribe Gabriel Massa

Todos los sectores en los que se encuentra dividido el peronismo posan de opositores. Es parte, como siempre, del circo electoral. Pero no hay que dejarse engañar: como ya ha trascendido en los medios de comunicación, en bambalinas se está cocinando el realineamiento del peronismo de cara a 2019. Será la pelea por la conducción de esa fuerza política patronal, inmersa en una fuerte crisis.

El tan postergado confederal de la CGT anunciado por Schmidt el 22 de agosto en Plaza de Mayo, asegurando que votaría un plan de lucha, se realizó finalmente el 3 de octubre. Como titula el diario La Nación, lejos del enfrentamiento la reunión “oficializó la etapa de diálogo con el gobierno”. La prenda de paz sería que la liquidación de conquistas vía la reforma laboral se haría en negociación con los sindicatos y por gremio y que habría más beneficios para las obras sociales, es decir más plata para que se roben los dirigentes sindicales ladrones.

Después de la detención del Pata Medina

El pasado martes 26 de septiembre, tras un enorme operativo policial, fue detenido el Pata Medina, acusado de lavado de dinero, extorsión y amenazas. El gobierno, hipócritamente, se quiere adjudicar la “lucha contra las mafias”. Pero de lo que se trata es de echar a todos los burócratas sindicales que anidan en cada sindicato. Esa es la tarea del sindicalismo combativo.

Este plenario tiene un valor muy importante. En primer lugar, porque mientras la burocracia sindical ha pactado una tregua con Macri dejando pasar el ajuste, y esa misma burocracia va en las listas de Cristina Kirchner, Sergio Massa y Randazzo, acá está el sindicalismo combativo que apoya al Frente de Izquierda.
Salimos a decirle a los compañeros de trabajo que mientras la CGT, la CTA y las cúpulas de la UOM,

Le damos la bienvenida a todas las delegaciones presentes. ¡Acá está la única alternativa para enfrentar a la burocracia sindical! Hacemos este plenario aquí en Lanús en un momento justo. Cuando el gobierno de Macri busca aprovechar las elecciones para fortalecerse y lanzar nuevos ataques al movimiento obrero, como la reforma laboral. Cuando la burocracia sindical vuelve a borrarse. Pasó del paro sin fecha a la tregua con fecha. Todos los días siguen pactando con el gobierno y la patronal.