Por Armando Aligia, Ambiente en Lucha Bariloche
El comienzo de marzo, nos sorprendió con un nuevo incendio de bosques en la zona cordillerana de Chubut y Río Negro y en esta oportunidad de interfase (que afecta también viviendas) resultando hasta ahora en el lamentable saldo de tres muertes y más de 400 casas quemadas. Incluyendo el incendio que comenzó a fines de enero en el Bolsón se han quemado más de 40 mil hectáreas de bosque. Hubo focos de incendio simultáneos en varias localidades (Golondrinas, Lago Puelo, El Hoyo, El Maitén, Epuyén, Cholila) por lo que se presume que el incendio fue intencional. Las asambleas ambientalistas argumentan con fundamento que sectores ligados a las megamineras originaron el incendio para suprimir emprendimientos productivos de la zona como la fruta fina en la comarca (sector cercano a la frontera interprovincial) o la ganadería en Cholila (más al sur, en Chubut). El senador de Río Negro Alberto Weretilneck culpabilizó irresponsablemente a “sectores mapuches radicalizados”, lo que fue repudiado por ambientalistas y organismos de derechos humanos.
Más allá de la intencionalidad, los incendios en la zona son frecuentes en los veranos secos y las graves consecuencias se deben a la falta de recursos dedicados a prevenir y combatir los incendios. En la zona de Bariloche en 1996 tuvimos varios incendios que afectaron la zona del Cerro Catedral, el río Manso y el lago Guillelmo, originados por fogones mal apagados y que quemó unas 20 mil hectáreas. Muchos vecinos de la ciudad hemos colaborado como voluntarios ayudando a los bomberos y construyendo cortafuegos. Esto fue una advertencia y se contrataron al año siguiente aviones hidrantes canadienses que capturaban agua de los lagos y la arrojaban contra los incendios, lo que hizo que en los veranos siguientes la situación mejorara.
Sin embargo, en febrero de 2015 otro incendio en la comarca destruyó más de 40 mil hectáreas de bosque. La descripción se encuentra en un artículo de Rodolfo Sánchez y Agustín Gigli en El Socialista (https://izquierdasocialista.org.ar/2020/index.php/blog/elsocialista/item/12656-fuego-en-la-patagonia). En esa oportunidad, ya los trabajadores habían denunciado graves falencias estructurales por parte del estado: poco personal destinado a la tarea además de estar precarizados, carencia de verdaderos aviones hidrantes en el territorio nacional, desfinanciamiento de la Ley de Bosques y falta de planes y obras permanentes, como la disminución de material combustible durante la temporada baja de incendios (momento en que se dan de baja los contratos). La respuesta del gobierno de Cristina Kirchner fue lanzar un ataque contr esos trabajadores.
Hoy la situación no ha cambiado. Mientras que en 2012 Cristina anunció que se contaría con 26 aviones hidrantes, en estos incendios actuaron tres aviones fumigadores reformados.
Ante la falta de recursos humanos y materiales, los vecinos debieron hacer varias colectas para buscar distintas herramientas para combatir el fuego y actuar como voluntarios. Articularon los esfuerzos con los bomberos, brigadistas y trabajadores de distintos organismos responsables, centralizando donaciones, alimentos, suministros de agua enfriada, insumos, herramientas, y haciéndolos llegar a la primera línea de combate mediante un complejo sistema de postas a través de la montaña. Al mismo tiempo enviaron una carta al presidente exigiendo los recursos necesarios para combatir los incendios.
Desde Ambiente en Lucha e Izquierda Socialista de Río Negro en el FIT Unidad también hemos exigido que se pongan todos los recursos nacionales y provinciales para terminar de apagar el fuego (mientras estaba activo) de manera inmediata y reparar todos los daños causados, empezando por las viviendas que se han quemado. En particular el comunicado manifiesta que “El gobierno del Frente de Todos destina en el Plan Nacional de Manejo del Fuego un presupuesto de 682 millones de pesos, varias veces menos que el gobierno del centroderechista Piñera en Chile. Solo se ponen 25 pesos por año para proteger una hectárea de bosque nativo, 1.000 veces menos que la media internacional. Todo esto ocurre cuando el 1 de febrero de este año se pagaron 300 millones de dólares de deuda externa.”
La muy escasa ayuda del gobierno nacional es la causante del enojo de muchos vecinos, que ante la reciente visita del presidente Alberto Fernández a la zona, han reaccionado repudiando su presencia.
Allí, varios asambleistas contra la megaminería fueron agredidos por patotas de la Uocra, quienes recibirían una parte de las regalías de la megaminería de acuerdo a las promesas del gobernador de Chubut, Arcioni. Varios manifestantes fueron detenidos y luego liberados, y actualmente hay 12 procesados. La represión y el procesamiento es una de las armas favoritas de Arcioni para perseguir a los ambientalistas. Juan Carlos Giordano, diputado nacional de Izquierda Socialista en el FIT Unidad ha repudiado esta persecución.
Una vez más los gobiernos privilegian el pago de la deuda externa a las necesidades elementales para la defensa de un ambiente sano.