Jul 21, 2024 Last Updated 5:23 PM, Jul 20, 2024

Izquierda Socialista


Escribe Mercedes Trimarchi, legisladora porteña electa por Izquierda Socialista/FIT Unidad

El próximo 8, 9 y 10 de octubre se realizará el 35° Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis, Bisexuales , Intersexuales y No Binaries en la ciudad de San Luis. Con Isadora, Disidencias en Lucha  e Izquierda Socialista en el Frente de Izquierda-Unidad vamos por un plan de lucha feminista para terminar con todas las formas de violencia de género. ¡Te invitamos a viajar con nosotras y nosotres!
 
En cuatro semanas estaremos en San Luis. Con Isadora y Disidencias en Lucha estamos realizando distintas actividades financieras para costear los pasajes de manera autogestiva y que nadie se quede sin viajar. Como cada año, miles de participantes nos reunimos desde distintos puntos del país, para debatir las mejores estrategias que nos permitan a las mujeres y disidencias organizarnos para conquistar nuestros derechos.

Las consecuencias más graves del ajuste que está aplicando el gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner las sufrimos mujeres y disidencias. Somos quienes tenemos los trabajos más precarizados y peores pagos. Sostenemos los hogares más humildes y sobre nuestras familias recaen los tarifazos que anunció el superministro Massa para cumplir lo pautado con el FMI.

La miseria creciente y la carestía de vida, consecuencia de esta política de ajuste, no se soporta más. En San Luis tenemos una gran oportunidad, no solo para encontrarnos luego de dos años de pandemia, sino para debatir acerca de cuál es la salida para enfrentar la brutal crisis económica y social a la que nos llevaron todos los gobiernos, sean peronistas, kirchneristas, radicales y macristas, y que nos afecta mayormente a las mujeres y disidencias de los sectores populares.

Que el Encuentro resuelva democráticamente un plan de lucha

El esfuerzo que implica viajar (no solo económico sino también en la organización familiar) y llegar a San Luis es enorme. No debemos desaprovechar esta oportunidad. En cada uno de los talleres que participemos debemos alzar nuestra voz y desde allí, desde el corazón mismo de los Encuentros, resolver democráticamente un plan de lucha feminista para enfrentar el ajuste y conquistar nuestros derechos.

Nunca ningún gobierno nos regaló nada. Todo lo que hemos conquistado es producto de nuestro esfuerzo, de nuestra organización y fundamentalmente de nuestra acción callejera. El mejor ejemplo, lo tenemos con la #mareaverde y el derecho al aborto. Nos decían que no, que no se podía, que la relación de fuerzas no daba, que las iglesias y el Vaticano tenían demasiado peso.  Hasta llegaron a decir en 2019 (el anterior Encuentro en la ciudad de La Plata) que hablar de aborto durante la campaña electoral era piantavotos. Sin embargo, lejos de amedrentarnos con sus discursos, las mujeres y disidencias continuamos en las calles solo confiando en nuestra propia fuerza. Así logramos la legalización. No fue un Ministerio, ni un presidente. No fueron los diputados ni las diputadas. Fueron las pibas y les pibis en la calle con la movilización. Este aprendizaje colectivo quedó en nuestra memoria y no es tan fácil borrarlo, aunque decreten desde presidencia que el patriarcado llegó a su fin.

Las mujeres y disidencias tenemos mucha fortaleza cuando nos organizamos. Por eso el gobierno, la oposición patronal y las iglesias pretenden que nos vayamos del Encuentro sin resolver nada, menospreciando todo el esfuerzo que significó llegar hasta allí. Desde Isadora y Disidencias en Lucha sostenemos lo opuesto. Creemos que la mejor manera de fortalecer los Encuentros, además de su masividad, es mantener su independencia política frente a los gobiernos y las iglesias. Es también apostar al debate y a la resolución democrática de un plan de lucha feminista contra el ajuste del gobierno y el FMI. Viajá con nosotras y nosotres al 35° Encuentro plurinacional de mujeres, lesbianas, trans, travestis, bisexuales, interseuales y no binaries y demos juntes estas peleas.

Escribe Tata Gayone, Izquierda Socialista Bahía Blanca

El mes de agosto y la asunción de Sergio Massa al mando del ministerio de Economía estuvieron cruzados no solo por un brutal ajuste económico, sino también por la promoción del avance de proyectos extractivistas (sojeros, mineros y petroleros) en todo el territorio nacional.

El 5 de agosto, con la presentación ante la Cámara Federal de Mar del Plata de un nuevo estudio de impacto ambiental trucho, el gobierno volvió a la ofensiva con el proyecto de las petroleras offshore. Pero “la marea siguió creciendo” y el 25A la movilización de las asambleas costeras incluso llegó a CABA, junto a la Coordinadora Basta de Falsas Soluciones. Hoy la lucha se centra en la presión sobre el Juzgado Federal que tiene en sus manos la decisión de autorizar o no el inicio de la exploración por parte de la empresa noruega Equinor.
 
También, en los primeros días de agosto, Massa visitó al embajador de Estados Unidos Marc Stanley, quien viajó el 8 de agosto a Neuquén y concurrió al yacimiento Loma Campana acompañado del presidente de YPF, Pablo González, y el gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez. Luego anunció la construcción de una planta de gas natural licuado en Bahía Blanca, destinada a la exportación de gas que estaría operativa en 2025. La construcción de dicha planta ya fue rechazada en 2011 por las comunidades de Cerri, Bahía Blanca e Ingeniero White, en una lucha masiva que derrotó a las autoridades locales en una Audiencia Pública memorable. El departamento de Biología de la Universidad Nacional del Sur se pronunció contra el dragado, brindando argumentos muy valiosos sobre la importancia de los humedales y la defensa de la flora y fauna costera. Argumentos aún más vigentes ante la ampliación del Polo Petroquímico y el incremento de la extensión de los muelles. Dos fallos reconocieron en los últimos meses que la ría está contaminada con metales pesados, entre otros vertidos. En ambos casos se ordena remediación, que sabemos que es imposible. Por eso creemos que es necesario retomar la lucha. Cada metro entregado a las multinacionales no volvemos a recuperarlo.

El 25 de agosto la mira apuntó hacia Río Negro, provincia que resistió los sucesivos proyectos que desde los ‘90 intentan transformar sus playas en un puerto petrolero. Luego de varios años de lucha los vecinos lograron que en 1999 se promulgue la Ley 3.308 que protege al frente marino costero rionegrino. Esta Ley prohíbe con absoluta claridad las actividades de exploración, extracción e instalación de muelles para la carga de buques, para la exportación de petróleo y gas. Con solo treinta horas de anticipación se dio a conocer el proyecto de reforma y la legislatura sesionó a puertas cerradas. Ambos bloques (Frente de Todos y Juntos por el Cambio) aprobaron la reforma, a medida de los requerimientos de YPF y las multinacionales involucradas. Desde ese día empezaron a organizarse las reuniones y actividades contra el proyecto que impulsan a nivel provincial la gobernadora Arabela Carreras y el gobierno nacional. El 9 de septiembre se prevé una importante concentración en la legislatura. Ahí estaremos presentes.

Mirando las fotos de la prensa, ya sea en los yacimientos de Vaca Muerta, los oleoductos, los muelles o a La Ortelius, la depredadora draga Jan de Nul (de la transnacional Compañía Sudamericana de Dragados), se los ve en “el desierto”. Pero a no engañarse, a escasos metros vivimos los pobladores de esas localidades, condenados por un puñado de inciertos dólares. Tres conflictos, dos provincias, el mar nos une y la marea sigue creciendo.

Desde Ambiente en Lucha e Izquierda Socialista/FIT Unidad seguiremos acompañando e impulsando cada una de estas peleas para ponerle un freno al impulso del saqueo extractivista del gobierno y el FMI.

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En septiembre de 1975 ocho militantes del Partido Socialista de los Trabajadores (PST), partido antecesor de Izquierda Socialista, fueron asesinados por bandas fascistas amparadas por el gobierno peronista de Isabel Perón. Su asesinato fue un ataque al movimiento obrero y popular que entonces venía luchando contra el “Pacto Social” y el ajuste. Fue también un ataque contra el PST y su política revolucionaria. Hoy seguimos exigiendo justicia por nuestras compañeras y compañeros asesinados del glorioso PST y continuamos su legado.

Escriben: José “Pepe” Rusconi y Federico Novo Foti

La noche de 4 de septiembre de 1975 un grupo de jóvenes militantes del Partido Socialista de los Trabajadores (PST) de La Plata se dirigía hacia la fábrica Petroquímica Sudamericana para llevar dinero de una colecta en apoyo a su fondo de huelga. Pero nunca llegaron. Fueron interceptados, secuestrados y, luego de una terrible tortura, acribillados a balazos por una banda fascista. Sus cuerpos fueron tirados en La Balandra, playa de la ciudad de Berisso. Ellos eran, Roberto “Laucha” Loscertales, que había sido dirigente estudiantil en la Facultad de Ingeniería y trabajador del Astillero Río Santiago, Adriana Zaldúa, referente estudiantil de Arquitectura y trabajadora del Ministerio de Obras Públicas (MOP), Hugo Frigerio, delegado gremial del MOP, Ana María Guzner Lorenzo, delegada no docente de la UNLP y Lidia Agostini, joven odontóloga, integrante del frente de profesionales. Al día siguiente, alarmados por su desaparición, pero aún sin conocer su suerte final, se convocó a una asamblea en el MOP que resultó multitudinaria. Hacia allí se dirigían otros tres militantes del PST para repartir volantes denunciando los hechos. Pero tampoco pudieron llegar a su destino. Fueron interceptados y secuestrados a la vuelta del local central del PST de La Plata. Sus cuerpos también aparecieron acribillados al poco tiempo. Ellos eran, Oscar Lucatti, trabajador del MOP, Carlos “Diki” Povedano, trabajador de Previsión Social, y Patricia Claverie, estudiante de Ciencias Naturales. El asesinato de los ocho militantes del PST, perpetrado por bandas fascistas que actuaban al amparo del gobierno de Isabel Perón y el gobernador Victorio Calabró, buscó asestar un duro golpe al conjunto del movimiento obrero y popular de la región y, en particular, a la política revolucionaria que impulsaba el PST.

El regreso de Perón y la política del PST

El “Cordobazo”, la insurrección obrera y estudiantil del 29 de mayo de 1969, dejó herida de muerte a la dictadura militar de Juan Carlos Onganía. Alejandro Lanusse, uno de los sucesores de Onganía, lanzó el Gran Acuerdo Nacional (GAN), junto a dirigentes radicales y peronistas, para lograr una transición ordenada mediante el llamado a elecciones y el fin de la proscripción al peronismo. Su objetivo era frenar el ascenso de las luchas obreras y populares. Pero, a pesar del triunfo electoral del peronista Héctor J. Cámpora, en marzo de 1973, las luchas no cesaron. La burguesía y el imperialismo exigieron entonces que Juan Domingo Perón controlara directamente la situación. Perón, había regresado en noviembre de 1972 de su largo exilio. Era aún respetado y recordado por su resistencia al avance del imperialismo yanqui y sus concesiones a la clase obrera desde mediados de la década de 1940, por lo que logró un amplio triunfo en las elecciones de septiembre de 1973.

Entre tanto, el Partido Socialista de los Trabajadores (PST), fundado en 1972 y perteneciente a la corriente trotskista impulsada por Nahuel Moreno, en la coyuntura abierta por el GAN se dio a la tarea de construir un partido revolucionario inserto en la clase obrera. Debatió duramente con la guerrilla, planteando que ese no era el camino para la revolución en el país, sino la pelea por una nueva dirección para la clase trabajadora, con un programa y una política que enfrentara a la burocracia sindical, al peronismo y al propio Perón. Explicando pacientemente que Perón no volvía para reinstaurar los “días felices” del primer peronismo o para la “liberación nacional”, sino para frenar las luchas contra el ajuste con el “Pacto Social”. En esa perspectiva el PST presentó candidaturas independientes (Coral-Ciapponni y Coral-Páez) en las elecciones de 1973.

En efecto, tras su asunción en octubre de 1973, Perón se abocó a derrotar el ascenso. En 1974, bandas fascistas como Alianza Anticomunista Argentina (Triple A) o Concentración Nacionalista Universitaria (CNU), organizadas desde el Ministerio de Bienestar Social conducido por el siniestro ministro José López Rega, comenzaron a realizar atentados contra locales y militantes de la JP, el PC y el PST. El 7 de mayo fue asesinado el militante del PST, Inocencio “Indio” Fernández, delegado combativo de la fundición Cormasa. El 29 sucedió la Masacre de Pacheco, donde fueron asesinados otros tres militantes. El PST denunció a las bandas fascistas como parte integrante del gobierno y llamó a las organizaciones combativas a derrotarlas construyendo brigadas o piquetes antifascistas. Pero su llamado no fue escuchado por la mayoría de las organizaciones.

El 1° de julio de 1974 murió Perón, asumiendo como presidenta María Estela Martínez, más conocida como Isabelita. Sin embargo, la verdadera conducción del país quedó en manos del “brujo” Lopez Rega, quien profundizó las medidas represivas y el plan de ajuste, cuando el flamante nuevo ministro de Economía, Celestino Rodrigo, promovió una devaluación superior al 100%, aumento de los servicios públicos y la liberación de precios, apoyado en el “Pacto Social”. Pero su plan fue derrotado por la masividad y la fuerza de la primera huelga general contra un gobierno peronista, el “Rodrigazo” de junio de 1975.

Seguimos exigiendo justicia

El “Rodrigazo” marcaría, en definitiva, el final del gobierno de Isabel. Comenzaba a incubarse entre la burguesía, el imperialismo y un grupo de militares la idea del golpe de Estado. Pero, entre tanto, continuaron actuando las bandas fascistas y centenares de activistas políticos, sindicales y estudiantiles aparecían muertos a diario. La región platense, que era escenario de varias luchas en las que la militancia del PST participaba activamente, fue una de las más golpeadas. El asesinato de los ocho militantes del PST fue entonces no sólo un ataque al movimiento obrero y popular que venía enfrentando el “Pacto Social” y el ajuste, sino específicamente contra militantes que aspiraban en cada lucha a construir una nueva dirección sindical y política de la clase obrera.

A partir del 24 de marzo de 1976, la dictadura militar buscó terminar con todo ese proceso. Pero pese a que dejó más de 30.000 detenidos desaparecidos, entre los que se cuentan más de cien militantes del PST, tras su caída, las luchas contra el ajuste y el saqueo del país por los sucesivos gobiernos radicales, peronistas o macristas al servicio de la burguesía y el imperialismo continuaron. Así también, desde hace 47 años, exigimos que la Masacre de La Plata se esclarezca y sus perpetradores sean juzgados y encarcelados. Denunciamos la impunidad y seguimos reclamando verdad y justicia. Hoy hacemos un especial homenaje y continuamos la tarea de aquellos militantes que entregaron sus vidas por construir un partido revolucionario que, inserto en el movimiento obrero y sus luchas, enfrente a los gobiernos capitalistas en el camino de conquistar un gobierno de las trabajadoras y trabajadores y por el socialismo.

Reivindicamos con orgullo al glorioso PST y levantando como siempre los puños bien en alto decimos, ¡compañeras y compañeros asesinados y detenidos desaparecidos del PST, hasta el socialismo siempre!



Escribe Adolfo Santos
 
En septiembre de 1962, después de realizada una Asamblea Constituyente, asumió como primer ministro de la recientemente independizada Argelia, Ahmed Ben Bella, dirigente del FLN.  Fue la culminación de un año clave en la heroica lucha argelina contra el colonialismo francés. El 18 de marzo en la ciudad de Evian el general Charles de Gaulle, en nombre del gobierno de Francia, había firmado un alto al fuego para la realización de un plebiscito cuyo resultado llevó a la declaración de la independencia el 5 de julio.  
 
En 1830 las fuerzas colonialistas francesas ocuparon Argelia desplazando al dominio turco. Sin embargo, encontraron una gran resistencia que solo consiguieron derrotar en 1840 con la instalación de más de cien mil soldados. De esa forma, colonos franceses se apoderaron de las mejores tierras y, aliados a una pequeña aristocracia argelina, consiguieron aplastar las poblaciones originarias formada por árabes, bereberes y musulmanes.

La pobreza y las penurias producidas por el éxodo rural generaron una gran masa de asalariados en las ciudades y un caldo de cultivo que durante años fue alimentando la lucha anticolonial. En 1945 los festejos por la victoria contra el nazi fascismo se transformaron en una rebelión popular contra la ocupación, que fue violentamente reprimida dejando un saldo de 45.000 argelinos y 108 europeos muertos según un informe oficial francés. Fue el punto de partida de una resistencia que se fortalecería en la década siguiente.

La guerra de liberación nacional

Convencidos de la inutilidad de los procesos electorales fraudulentos convocados por los franceses para perpetuar el colonialismo, en 1954 el Movimiento por el Triunfo de las Libertades Democráticas (MTLD) funda el Frente de Liberación Nacional (FLN) e inicia la lucha armada. A la cabeza estaban los principales dirigentes del MTLD, entre ellos, Ben Bella y el médico e intelectual Franz Fanon, nacido en Martinica y combatiente de la liberación en Francia durante la segunda guerra mundial. Las luchas anticoloniales avanzaban y los franceses se habían debilitado después de la derrota en Indochina en 1954.

Para mantener la “Argelia francesa” y proteger los pieds noir (pies negros, colonos que colaboraban con la ocupación) el gobierno francés redobló la apuesta. Movilizó quinientos mil soldados, a los que se sumaron las fuerzas civiles de la Organización Armada Secreta (OAS), que utilizaban métodos fascistas y de terror para defender sus propiedades. Destruyeron ocho mil aldeas, utilizaron sistemáticamente la tortura y llevaron a cabo ejecuciones en masa dejando más de un millón de argelinos muertos.

La batalla de Argel fue uno de los mayores símbolos de esa lucha. Desarrollada en 1958, quedó registrada en la célebre película dirigida por Gillo Pontecorvo, demostrando que la Francia de “la libertad, igualdad y fraternidad” era solo una bella consigna. El filme expone la lucha casa por casa en las villas, llamadas casbah, localizadas en los alrededores de Argel. El FLN respondió heroicamente, pero fue inicialmente derrotado por las tropas de ocupación.

El FLN toma el poder, pero reconstruye el estado burgués

Los combates no daban tregua, la rebelión anticolonial era imparable y la resistencia argelina nucleada en el FLN conseguía apoyos por el mundo, sobre todo en Francia. Su principal vocero era Franz Fannon, apoyado por Jean Paul Sartre, Simone de Beauvoir, Simone Signoret, Ives Montand, entre otras personalidades. La población francesa estaba cansada de esa guerra sin fin. Al iniciarse la década del ‘60 hasta el PC francés, que antes les había dado la espalda a los combatientes, se acabó sumando al apoyo por la liberación.

En 1962 Francia se vio obligada a negociar con el FLN en el famoso acuerdo de Evian, que culminó con la independencia y el triunfo del pueblo argelino. El 5 de julio fue proclamada la independencia de Argelia y reconocida por el gobierno francés. Fue uno de los triunfos más espectaculares de la lucha por la liberación nacional. Sin embargo, por la política de su dirección, el FLN, encabezado por Ben Bella, no avanzó “conforme con los principios del socialismo y del ejercicio efectivo del poder del pueblo”, como rezaba su nueva constitución, algo que pudo haber cambiado la historia del norte de África y los países musulmanes.

Como muy bien sintetiza Nahuel Moreno en Revoluciones del siglo XX: “El FLN […] desde su posición de gobierno obrero y campesino retrocedió a la reconstrucción del estado burgués. […] El gobierno del FLN se transformó en obrero y campesino contra su voluntad expresa, ya que no fue él quien rompió con la burguesía y sus partidos, sino la burguesía con él. Casi la totalidad de la burguesía, […] huyó de Argelia aterrorizada por el triunfo árabe, dejando solo al FLN, sin partido ni clase burguesa para hacer un gobierno de frente popular, como era su intención. El imperialismo francés (y mundial) maniobró con habilidad, haciéndole toda clase de concesiones al nuevo régimen obrero y campesino. Esta política le dio un resultado extraordinario, ya que logró que el FLN reconstruyera un estado burgués semicolonial, dependiente del imperialismo francés y norteamericano, en lugar del estado colonial anterior.”


Escribe Blanca Lopez, diputada provincial Izquierda Socialista/FIT Unidad
 
En diciembre de 2017 los obreros de la maderera MAM, en el Parque Industrial de Neuquén, fueron desalojados por la policía. Ocupaban la empresa en defensa de su fuente de trabajo y por la reincorporación de los despedidos. Su lucha es muy recordada por el tiempo que duró, por la firmeza de los obreros y porque las organizaciones de izquierda la acompañamos con todo tipo de acciones. Hasta que el 8 de diciembre del 2017, de madrugada, la policía provincial comenzó con el desalojo. Cuando éste ya estaba consumado y mientras seguía la protesta en la puerta de la empresa, el policía Palomino disparó, a muy corta distancia, contra el cuerpo de Raúl Godoy, diputado del PTS/FIT Unidad.  El juicio duró varios años bajo la carátula de Lesiones agravadas por el uso de armas, además de ser provocadas por un agente policial en abuso de sus funciones.

Se determinó una sentencia de cinco años de prisión. Durante todo el juicio la defensa del policía intentó derribar las pruebas que presentaron los abogados de Godoy. Fueron muy evidentes los videos presentados en la prueba que demostraron la intencionalidad de Palominos cuando realiza el disparo. Tiró a pegar y a cortísima distancia. Es que se estaba juzgando a un policía que había reprimido una ocupación de fábrica. El gobierno y el régimen no querían dejar el antecedente de que los policías que reprimen con balas vayan presos. Finalmente la jueza Raquel Gass dispuso la detención de Sergio Palominos, quien deberá cumplir su pena en una cárcel común, contradiciendo lo solicitado por la defensa que pretendía prisión domiciliaria.

Desde Izquierda Socialista acompañamos el juicio en todas sus instancias y por eso el día de la condena final festejamos en la puerta de los tribunales junto a Raúl, junto a los compañeros y compañeras de las organizaciones presentes.

Nuestro semanario. En el que te acercamos el reflejo de las luchas del movimiento obrero, las mujeres y la juventud, además un análisis de los principales hechos de la realidad nacional e internacional.

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