Fruto del fuerte reclamo de los delegados y despedidos de Lear, con bloqueos, cortes, marchas y un acampe permanente frente a la puerta de la autopartista estadounidense de cables para autos en Pacheco, se logró que el Ministerio de Trabajo decretara la inmediata reincorporación de los delegados despedidos. Hecho que venía dilatando.
Esta resolución, a más de dos meses de iniciado el conflicto y del despido ilegítimo de los delegados -y de unos 200 obreros-, llega cuando la empresa ha suspendido por quince días a todos los trabajadores. La patronal aduce que lo hace porque “no hay garantías” para que se trabaje, por el acampe obrero, lo cual es evidentemente falso.
El ministerio fue hasta la planta e ingresó con los delegados. Luego del acta correspondiente, el ministerio se comprometió a volver cuando la planta vuelva a funcionar.
Este paso muestra la justeza de los reclamos (en contra de la persecución patronal a los delegados y activistas, en connivencia con la burocracia del Smata -ver recuadro-). Pero no está garantizado que la patronal lo cumpla.
Esta lucha se ha transformado en una dura pelea contra la patronal, el gobierno y la burocracia de la Verde. Y contra la represión. La semana pasada la Gendarmería embistió contra organizaciones solidarias en apoyo al conflicto en la Panamericana, deteniendo a dirigentes de izquierda y de organismos de derechos humanos. Prueba que los “organismos de seguridad” están al servicio de salvaguardar los intereses de las multinacionales, como en este caso, y de embestir contra los luchadores.
Junto a los trabajadores de Donnelley, este viernes 15 a las 17 horas los trabajadores de Lear realizarán una marcha desde el Obelisco al Ministerio de Trabajo para exigir la reincorporación de todos los despedidos y el funcionamiento a pleno de la empresa.
Fondo de Huelga
Los centros de estudiantes combativos de la UBA realizaron un festival el sábado 9 de agosto para recaudar fondos en apoyo a la lucha de los trabajadores de Lear y juntaron 10.300 pesos. En la foto, Nahuel Fernández (al medio), presidente del centro de Sociales, junto a otros dirigentes estudiantiles, haciendo entrega de lo recaudado.
Solicitada amenazante del Smata
Este martes apareció en los medios una costosa solicitada titulada “Los trabajadores mecánicos decimos basta”. Uno podría decir: ¿Basta a los despidos? ¿Basta a los atropellos patronales? No. Se refiere a la lucha de los trabajadores de Lear y a sus delegados.
La solicitada dice “no toleraremos que estos grupos organizados sigan en las inmediaciones de Lear”. Se refiere a la carpa con despedidos que en protesta está frente a la multinacional negrera con el apoyo de vecinos, dirigentes sindicales combativos, personalidades, organismos de derechos humanos y la izquierda.
La solicitada sigue: “Nuestra paciencia tiene un límite, por eso reclamamos enfáticamente a las autoridades y a la justicia que se garantice el derecho constitucional de trabajar”. Así, el Smata oficia de cómplice de la patronal que ha cerrado la fábrica por quince días, haciendo todo tipo de atropellos legales y laborales. La burocracia tuvo que recurrir a una asamblea fraudulenta, donde llevó por la fuerza a los obreros haciéndoles firmar un acta revocando el mandato de los delegados.
La solicitada finaliza diciendo “facultamos imponer la movilización del Smata en defensa de la fuente de trabajo y del empleo de los mecánicos en cada lugar que sea necesario”. Se refiere a que los trabajadores lo impiden. Una clara amenaza para ellos.
Alertamos sobre estas prácticas burocráticas. Recordemos que este accionar llevó a asesinar a Mariano Ferreyra por parte de la burocracia de Pedraza para salvar sus negocios. Llamamos a repudiarlo y a seguir apoyando a los trabajadores de Lear.
A.S.