Valeo es una autopartista de ópticas para automóviles. Desde el 21 de febrero está tomada por sus 240 operarios. Entrevistamos a Leonardo Sánchez Zárate, uno de sus delegados, para conocer detalles de esta lucha.
¿Cuál es el origen del conflicto y en qué instancias está?
El conflicto arranca en noviembre de 2013 con nuestro pedido de recomposición salarial de un 25% por encima de la paritaria nacional y por el pase a planta de unos 40 compañeros contratados. Van dándose distintos estadíos del conflicto. Hubo varias reuniones en la Secretaría de Trabajo provincial, asambleas por turno, quites de colaboración y una conciliación obligatoria extendida acatada y hasta otra aceptada voluntariamente, sin ningún tipo de acuerdo. Así se llega al 21 de febrero cuando en medio de una asamblea que se desarrollaba con la presencia del gremio, llega la noticia de 45 despidos y la ratificación de la suspensión/despido de 20 compañeros contratados, que estaban en esta situación desde diciembre. Aquí se vota la toma que se mantiene hasta hoy. Es declarada ilegal luego de nuevas
reuniones en la Secretaria de Trabajo, donde intervienen representantes de la filial Brasil de Valeo y del Ministerio de Trabajo de la Nación, imponiendo una nueva conciliación que los trabajadores rechazamos. La patronal hace una nueva oferta de aumento sin reincorporar a todos los compañeros y es nuevamente rechazada.
¿Qué repercusión tiene en la UOM?
Ha sido grande en las bases del gremio. Varias comisiones internas se autoconvocan y traen su solidaridad a la fábrica. El sindicato llamó a congreso de delegados donde se resolvió movilizarse en apoyo y realizar asambleas de dos horas por turno en todas las fábricas y generalizar el reclamo salarial.
¿Cuál es la perspectiva?
Continuar con la medida y endurecer el plan de lucha, llevándolo a las calles y demás fábricas del gremio hasta
conseguir el objetivo, que además del salario, es reincorporar a todos los compañeros suspendidos/despedidos.