Presurosa, Vidal llamó a paritaria para contener a los dirigentes de la FUD. Como lo hizo en las reuniones anteriores, donde repitió escencialmente la misma propuesta salarial: 21% en cuotas, imponer un presentismo que ataca el derecho de huelga y el régimen de licencias, mantener los descuentos de los días de paro y cerrar un aumento del 10% para 2018 y 2019. Mientras tanto sigue recortando los cupos de comedores escolares para nuestros niños, no resuelve los graves problemas de infraestructura edilicia, la falta de docentes y preceptores, ni la creciente violencia contra los maestros.
La burocracia del FUD tuvo que llamar a un paro el miércoles 14 de junio con movilización, donde nos unificamos con los médicos de la Cicop y los judiciales, desde el Congreso hasta la Casa de Buenos Aires. Pese a las nuevas declaraciones de Vidal repitiendo que los docentes “tenemos de rehenes a los niños” y que “descontarán a quienes adhieran a la medida”, el paro fue masivo. Queda nuevamente demostrado que negociar paritaria dando clases no sensibiliza a este gobierno hambreador. Y que la burocracia de Baradel y del FUD son los responsables de que Vidal pueda sostener esta miseria salarial.
A partir de ahora el FUD debe dejar de amenazar y retomar efectivamente un plan de lucha con paros progresivos, llamando a un congreso provincial unificado de todos los gremios para votar que si no dan el aumento y el presupuesto necesario, no se iniciarán las clases después del receso escolar de invierno hasta lograr nuestras reivindicaciones. También los Suteba multicolores debemos convocar a un gran Plenario Provincial de Delegados opositores para impulsar la lucha, con o sin la burocracia.