Es diputada nacional por la Ciudad de Buenos Aires y precandidata a Presidenta por el PTS en el Frente de Izquierda Unidad. Se desempeñó como Legisladora porteña y como presidenta de la Comisión contra la Violencia Institucional de la Legislatura. Se recibió de abogada en Derecho (UBA) y es cofundadora del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos en defensa de las y los trabajadores y de las libertades democráticas.

Feminista socialista, activa militante del movimiento de mujeres y la diversidad, referente de la agrupación internacional Pan y Rosas, fue firmante del proyecto por aborto legal presentado por la Campaña.

De amplia actuación en causas de lesa humanidad y contra la represión, como en los juicios que condenaron a Etchecolatz, al cura Von Wernich, Astiz y el Tigre Acosta. Fue abogada del desaparecido Julio López y representa a Patricia Walsh por el asesinato y la desaparición de su padre Rodolfo, además de muchos otros y otras victimas de la dictadura. También, en su carácter de abogada, asesora a comisiones internas y acompaña a las fábricas recuperadas como Zanon y Donnelley.

Activa militante contra la represión y la impunidad, también bajo gobiernos constitucionales. Fue abogada de Carla Lacorte, víctima de gatillo fácil policial. Denunció junto a diversos organismos el Proyecto X, orquestado por la Gendarmería para infiltrar manifestaciones sociales. Recientemente accionó contra el espionaje, contra la Policía Federal, habiendo logrado condena por el caso de infiltración en la Agencia Walsh.

Es pre candidato a Gobernador de la Provincia de Buenos Aires en la lista conformada por PTS - IZQUIERDA SOCIALISTA que lleva a Myriam Bregman-Nicolás Del Caño en la fórmula presidencial en el Frente de Izquierda Unidad.

Es dirigente nacional de Izquierda Socialista y milita en la izquierda trotskista desde principio de los años 80' denunciando permanentemente la estafa, usura y corrupción que significa la deuda externa y en los ’90 combatió las privatizaciones menemistas.

Vive en Haedo, tiene 61 años, es padre de tres hijas y un hijo, hincha de Deportivo Morón y de River Plate.

Es Secretario General de la Unión Ferroviaria -Seccional Gran Buenos Aires Oeste-Haedo-, opositor a la burocracia de la lista Verde.

Sobrero es el máximo referente del sindicalismo combativo y democrático y es miembro de la mesa nacional del Plenario del Sindicalismo Combativo (PSC).

Junto al Cuerpo de Delegados del Ferrocarril Sarmiento presentó más de 300 denuncias, que, si se hubieran escuchado, se podría haber evitado la masacre de Once de 2012 ocasionando más de 50 muertos y 800 heridos.

Conduce un gremio que tiene el lema “un sindicato para los trabajadores y un ferrocarril para el pueblo” y lucha por la re-estatización del sistema ferroviario bajo control de trabajadores y usuarios.

En 2011 el gobierno de Cristina Kirchner con Aníbal Fernández a la cabeza y la justicia lo metieron preso e incomunicado durante 4 días acusándolo con pruebas falsas de “quemar trenes” siendo sobreseído después de una fuerte campaña internacional de repudio a su procesamiento y liberado luego de una masiva movilización a Plaza de mayo exigiendo su excarcelación. En 2016 Macri también intentó criminalizarlo, pero no prosperó.

Es precandidato a Jefe de Gobierno de CABA en la lista conformada por PTS - Izquierda Socialista que lleva a Myriam Bregman-Nicolás Del Caño como precandidatos en la fórmula presidencial en el Frente de Izquierda Unidad.

Es dirigente nacional de Izquierda Socialista y la agrupación Docentes en Marcha.

Tiene 59 años, vive en Flores y es padre de tres hijos y una hija. Es maestro de grado en la Escuela Primaria N° 19 de Villa Soldati (CABA) desde hace 23 años, donde nunca dejó de dar clases.
Es Secretario Gremial del combativo sindicato docente Ademys.

Reconocido y honesto dirigente sindical docente, fue dos veces Secretario General de Ademys, responsabilidad que hoy lleva adelante otra dirigenta, Mariana Scayola, actual Secretaria General.
Por enfrentar las políticas de ajuste de Larreta y su ministra de Educación Acuña, actualmente sufre una persecución judicial (juicio de desafuero).
Es parte de la mesa nacional del Plenario Sindical Combativo (PSC).

Escribe Juan Carlos Giordano, precandidato a diputado nacional lista PTS-IS en el FIT Unidad

El próximo sábado 17 de junio se va a llevar a cabo el acto convocado por PO y MST en Plaza Congreso para proclamar la fórmula presidencial Solano-Ripoll y el resto de las candidaturas de esa lista. Una lista que ha dividido al Frente de Izquierda Unidad en las PASO al no respetar los acuerdos previos, como ocurrió con las presidenciales de 2019 donde encabezó Del Caño con la anuencia de PO, ubicación que ahora desconoce bajo el falso argumento de que Myriam Bregman sería “pro kirchnerista”.

Que el Frente de Izquierda vaya a una pelea por los cargos a las PASO es completamente nocivo, precisamente cuando se necesitaba la máxima unidad para enfrentar a los candidatos del sistema y postular unitariamente el programa de fondo.

PO y MST han vendido su política divisionista envolviéndola en un lenguaje opuesto. Hablan de que el acto del 17 sería “un plenario democrático para decidir todo” y que “podría evitar ir a las PASO”. Frases que pueden caer bien ante algún desprevenido, pero será todo lo contrario. Esto es lo que tiene que saber cualquier activista que pueda ir al evento. Mientras convocan a “un plenario para resolver sobre la política, el programa y las candidaturas de la izquierda”, de las diez comisiones que anunciaron no hay ninguna que se refiera a “candidaturas”, precisamente porque ya están cocinadas de antemano entre cuatro paredes (ver ilustración).

Parte del volante del MST invitando al acto del 17

Es comprensible que haya compañeras y compañeros que, alejados de los detalles de todos los debates al interior del Frente de Izquierda, vean interesante ir a un plenario a debatir y votar. Si fuera para una política correcta, estaría muy bien. Pero este plenario supuestamente “democrático” es para ratificar la “lista común” de PO y MST, convocada unilateralmente entre esos dos partidos.

Ya hemos contestado desde distintos ángulos sobre esta política divisionista que se consumará el 17. Ahora se siguen agregando hechos nuevos. Bodart (MST) definió al plenario del 17 como “estratégico, más allá de lo electoral” y Pitrola del PO dijo que “tiene el valor de que debatamos qué Frente de Izquierda necesitamos.” ¿A qué se refieren? Ahí vamos a otra de las mentiras del PO y el MST. Dicen que presentaron su lista para salvar al FIT Unidad de que no se “pegue a variantes del régimen” porque Bregman representaría una adaptación al kirchnerismo. Pero lo llamativo es que PO se presente junto al MST en una supuesta cruzada por “salvar” al FIT Unidad de “adaptaciones al régimen”, precisamente cuando el MST se ha sumado recién en 2019 al Frente de Izquierda tras ocho años haciendo alianzas con Pino Solanas y Luis Juez en Córdoba o frentes anti Frente de Izquierda con el Nuevo Mas. Pero ahora nos enteramos de que ambos partidos hicieron una reunión previa con corrientes que participarán el 17, y una de ellas es la Corriente Política de Izquierda encabezada por ex dirigentes del Partido Comunista. La misma se fundó en 2016 con un documento donde postula desde la clásica política centroizquierdista de “democracia participativa”, pasando por la defensa del chavismo (tildándolo de “germen con un horizonte socialista, con la memoria de Chávez”) y de apoyo a Evo Morales, diciendo que “acompañan el socialismo comunitario en Bolivia”. También proponen organizativamente “una confluencia amplia, sin recetas” y “otras formas creativas y abiertas que desafíen las ya transitadas”, es decir, la del propio Frente de Izquierda.

El PO y el MST critican a Bregman por “pro kirchnerista” y ponen a debatir el programa fundador del FIT Unidad, de independencia de clase, obrero y socialista, con corrientes ajenas al mismo. Y lo decimos sin ningún sectarismo, sino para separar la paja del trigo. Porque una cosa es que coincidamos con distintas organizaciones políticas, sociales y sindicales para impulsar una lucha en común como lo hicimos llenando varias veces la Plaza de Mayo, repudiando el pacto con el FMI, y otra muy distinta es invitarlas para poner a votación el programa del Frente de Izquierda ya acordado entre nuestros partidos desde el 2011, a riesgo de que incorpore posturas que lo hagan retroceder.  

Esto no es ninguna casualidad. El MST viene diciendo que hay que cambiar el carácter del Frente de Izquierda para llevarlo a políticas centroizquierdistas, tanto en lo programático como en lo organizativo. Por eso dejamos en claro que lo que se cambie en el plenario del 17 tanto en el programa del FIT Unidad como en su funcionamiento involucra sólo al PO y al MST, no a Izquierda Socialista y a PTS, quienes hemos mantenido los acuerdos y el programa fundacional que le permitió crecer al FIT Unidad en todos estos años.

En concreto, el PO y el MST llaman a un acto de sus partidos y agrupaciones piqueteras junto a organizaciones que no son del FIT para apoyar la fórmula Solano-Ripoll y su lista divisionista en las PASO.

Escribe Noelia Agüero, legisladora Izquierda Socialista/FIT Unidad

El 25 de junio se vota a gobernador y a legisladores provinciales. El Frente de Izquierda Unidad viene impulsando una campaña para que gobierne la izquierda junto a las y los trabajadores, como único camino para salir de la terrible crisis a la que nos llevó el peronismo y todas las variantes patronales.
 
La crisis económica, social y política recorre el país y la provincia de Córdoba. Alberto, Massa y Cristina vienen aplicando un feroz ajuste y miles se decepcionan con el peronismo. La tremenda crisis del Frente de Todos es cada vez más evidente. A esto se suma la enorme crisis que atraviesa la otra alianza patronal, Juntos por el Cambio, que hace tiempo viene con una interna feroz entre Bulrrich y Larreta, ahora la disputa se incrementó con el llamado de este último a integrar a Scharetti, gobernador de la provincia y principal competidor de Juez y Juntos por el Cambio por la gobernación.

Llaryora, candidato de Schiaretti, miente descaradamente prometiendo solucionar los problemas de inseguridad y combatir el narcotráfico, aumentar los salarios o resolver los problemas ambientales, cuando estos males son producto de un cuarto de siglo de gobierno del PJ cordobés. Frente al desgaste ahora le cambian el nombre a “Hacemos Unidos por Córdoba”, integrando intendentes radicales y hasta el presidente de PRO de Córdoba. Incluso la candidata a la vicegobernación es una dirigenta radical.

Estos cambios de equipo, este “panquequismo político” como dice Liliana Olivero, muestra que se diferencian para la tribuna, pero internamente acuerdan con todo el plan de ajuste. Por eso hoy están de un lado y mañana del otro. Por eso Schiaretti quiere sumarse a la interna de Juntos por el Cambio.

Estos últimos, con Luis Juez, no representan una alternativa para el pueblo trabajador y los sectores populares. Plantean más ajuste y represión, y tienen como agravante el antecedente de haber sido una de las peores gestiones de la capital cordobesa. Ni hablar cuando fueron gobierno nacional con Macri.

Sin duda son lo mismo. Todos gobernaron, aplicando un ajuste salarial y jubilatorio, avanzando en la precarización laboral, en la destrucción ambiental y demás males sociales, pero con todo tipo de beneficios y privilegios para los grandes grupos empresarios. Mientras tanto sostienen la corrupción y la impunidad de sus funcionarios.

Solo el Frente de Izquierda escapa a la responsabilidad de esta crisis; porque no gobernó y porque fue impulsor y acompañante de todas las luchas que han recorrido nuestra provincia, como la de la Salud, la rebelión docente, los trabajadores petroquímicos despedidos por Atanor, o el reciente conflicto en la multinacional Coca Cola. Por eso planteamos que es hora de que gobierne la izquierda y las y los trabajadores. Porque para salir de esta crisis hacen falta medidas de fondo que solo levanta el FIT Unidad.

Junto a Liliana Olivero venimos recorriendo la provincia, llevando nuestras propuestas. Denunciamos la estafa de la millonaria deuda externa provincial que someterá al pueblo trabajador a la indigencia por décadas. Planteamos el no pago de esta deuda provincial junto a la inmediata ruptura y el no pago al FMI.

Con la suspensión de los pagos de la deuda, la quita de los beneficios impositivos a los grandes empresarios y una reforma tributaria para que pague más quien más tiene, se podrá avanzar en atender las verdaderas necesidades de las y los trabajadores, las mujeres y disidencias y la juventud, partiendo de un aumento de salarios y jubilaciones de emergencia, que igualen el costo de la canasta familiar; un plan de viviendas populares que de trabajo genuino y resuelva el problema habitacional; el pase a planta de las y los contratados y terminar con la precarización que tanto afecta a nuestra juventud.

Por eso, el 25 de junio votá Liliana Olivero gobernadora. Te invitamos a sumarte a la campaña y ayudarnos a fiscalizar para cuidar tu voto.