Nuestro compañero sufrió un allanamiento sin que se muestre ninguna orden ni dejar entrar a testigos, siendo esposado, tirado al suelo y pateado en la cara. Su mujer, que recibe tratamiento oncológico, fue golpeada y sus hijos y nietos levantados a punta de armas largas por personal policial encapuchado. Nuestro compañero y su familia quedaron en libertad a la medianoche sin ningún cargo en su contra. El subcomisario Minichelo, que reivindica los métodos de Pinochet, es profesor en la escuela de policías local y próximo a ser nombrado comisario. Desde nuestro partido, acompañado por organizaciones de derechos humanos, no vamos a permitir estos atropellos y exigimos el inmediato esclarecimiento de lo sucedido.