Los estudiantes, con el apoyo de docentes y padres se vieron obligados a ocupar la escuela. Luego de la toma empezaron a desfilar autoridades municipales y provinciales. Con aprietes, amenazas y hasta con un hecho muy sospechoso donde un estudiante terminó en el hospital, se intentó quebrar a los chicos. Sin lograrlo, se llegó a un acta compromiso de soluciones, ante la cual se decidió levantar la toma. Este martes 23 por la tarde, ante el incumplimiento de las autoridades, los estudiantes volvieron a tomar la escuela. Al cerrar esta nota estaban reunidos estudiantes y autoridades dentro de la escuela. Enviamos todo nuestro apoyo a su lucha.