Scioli, Randazzo, Massa, Macri, Binner, Carrió, siguen de campaña electoral. Todos les dan la espalda a los graves problemas sociales. Nadie se preocupa por los salarios y jubilaciones de pobreza, o las inundaciones -donde miles perdieron todo, encontrando a estos políticos preocupados por el voto-. Y si alguno de ellos levanta la voz ante la entrega a Chevron o a las telefónicas, es solo de “pico”, ya que el saqueo del país se viene gestando de la mano de gobiernos peronistas, radicales y de la centroizquierda.
El FIT es una clara alternativa
Para combatir a estos políticos patronales ha surgido el Frente de Izquierda. Desde que constituimos esta unidad de la izquierda en 2011, una gran franja de trabajadores y jóvenes le dio la espalda a los partidos tradicionales y optaron por una salida de izquierda. Desde allí el Frente de Izquierda ha venido creciendo. En las luchas, elecciones y en las encuestas.
El FIT fue una gran herramienta unitaria que vino empalmando con amplios sectores que rompen con lo viejo y ven en su programa de fondo una salida a la crisis. ¿Quién sino los partidos que conformamos el FIT, más allá de las diferencias que nos separan, empujamos las luchas como la de docentes, Lear y tantas otras? ¿Quién sino el FIT impulsó los paros generales contra el ajuste, denunciando ahora la tregua de los Moyano y compañía? ¡Solo el FIT ha presentado proyectos de ley por aumento de salario, el 82% móvil y contra el impuesto al trabajo! También ha sido el FIT el que se movilizó contra el pacto gobierno-Chevron y presentó una ley por una YPF 100% estatal y la nacionalización del petróleo y el gas. Es por eso que los gobiernos, donde el FIT obtuvo bancas, siempre han atacado a nuestros diputados por estar en las luchas y oponerse al ajuste. Levantando las banderas de la independencia de clase conquistada en el programa del FIT, que se pronuncia por el no pago de la deuda, reestatización de las privatizadas y la solidaridad con las luchas de los pueblos del mundo. Es el FIT, no los partidos patronales, el que se movilizó junto a organizaciones estudiantiles y sociales a la embajada de México en Argentina repudiando la desaparición de los 43 estudiantes.
La propuesta de Izquierda Socialista
2015 augura un muy buen año electoral para el FIT. Izquierda Socialista, como lo ha hecho públicamente desde hace meses y adquirió más notoriedad en el congreso de PO en el Luna Park el pasado 8 de noviembre (ver Sobre el Congreso de PO), plantea a todos los partidos del FIT encarar este nuevo desafío electoral en unidad, reivindicando los acuerdo políticos logrados, tanto en el programa como en las principales candidaturas. Considerando que la fórmula presidencial debe ser compartida entre PO y PTS, en ese orden. Que Jorge Altamira es el candidato que la debe encabezar. Y que el FIT debe concurrir con una lista única y consensuada para enfrentar el intento proscriptivo de las PASO como lo hizo en la elección anterior, en todos los distritos.
En ese sentido, consideramos que se equivocan los compañeros de PTS al lanzar unilateralmente sus candidaturas a presidente y en los principales distritos, y en su postura de volver a insistir con dirimir las candidaturas del FIT en las PASO (ver notas en estas páginas).
Finalmente, señalamos que el Frente de Izquierda tiene que salir con fuerza y unificadamente el año que viene con un acto público, como lo hemos propuesto y ha coincidido PO en su congreso. Para dar una clara señal a los luchadores que quieren ver al FIT unido contra los políticos patronales. Para eso construimos el FIT. Ahora hay que ir por más.
¿Por qué Altamira presidente?
zquierda Socialista sigue postulando a Jorge Altamira (PO) para encabezar la fórmula presidencial del FIT. Porque hoy por hoy, Altamira representa la unidad de la izquierda ya lograda en el FIT. Y es el que mide en las encuestas, a pesar que no ha sido proclamado nuevamente.
Es una conquista del FIT tener candidatos reconocidos en una franja de trabajadores y jóvenes. Quien hoy hable del FIT y de la izquierda hace referencia a Altamira, como figura de esa unidad que supimos conquistar. Sabiendo que dicha candidatura, como todas, se ha construido en defensa de un programa de izquierda y socialista, y en pelea por el voto a pulmón de toda la militancia del FIT.
Impulsar a Altamira, a su vez, es parte del respeto a los acuerdos y equilibrios alcanzados entre las fuerzas del FIT desde la elección anterior. Para Izquierda Socialista el candidato a presidente lo debe seguir ocupando PO, y PTS el vice. Eso no pretende que deba ser así en otros distritos donde, por ejemplo, Izquierda Socialista tiene preponderancia, como en Córdoba, donde la figura de la izquierda es nuestra compañera Liliana Olivero.
Nuestro partido podría alegar que después de Altamira, la figura más conocida es el “Pollo” Sobrero, representando al sindicalismo combativo y a los trabajadores que luchan. Pero no se nos ocurre por ello proponerlo como “pre candidato” para ir contra los acuerdos ya alcanzados en el FIT, mucho menos apelar a las PASO para intentar darle una mejor ubicación por fuera de los acuerdos y consensos a acordar. Por otra parte, algo fundamental en relación a las candidaturas, es que no solo son importantes sus cabezas, sino que el FIT ha posibilitado que formen parte de sus listas valiosos luchadores a lo largo y ancho del país, siendo la lista que más luchadores obreros y populares ha llevado. Por eso consideramos que en base a los mecanismos ya acordados en relación a las candidaturas, respetando el equilibrio de los tres partidos y la rotación de los cargos, tenemos que seguir avanzando.
J.C.G.
Cuando PTS estaba contra las PASO
En una larga nota fechada 4 de agosto de 2011, bajo el título “Argentina K, la capital mundial de la proscripción”, PTS llamaba a “cerrar filas contra la proscripción a la izquierda” (LVO n° 438). La nota dice: “Los apoderados de las fuerzas que componemos el Frente de Izquierda anunciaron la presentación de un escrito judicial para anular la cláusula proscriptiva que impone obtener el 14 de agosto el 1,5% de los votos emitidos, previamente a poder presentarse en las generales de octubre. Jurídicamente la medida no tiene parangón, no existe en la legislación de ningún otro lugar del mundo donde se elijan los gobiernos por el voto universal [...] La nueva ley electoral (26.571) busca borrar del mapa político electoral a las nuevas representaciones políticas y en particular a las organizaciones de izquierda revolucionaria [...]. Estamos ante el intento de imponer un régimen electoral aún más proscriptivo, violando derechos democráticos elementales. [...] De imponerse la proscripción, se le negaría a la izquierda y a los identificados con sus ideas el derecho a la representación.
La nota finalizaba señalando: “Es un deber y un principio democrático de todo luchador contra la explotación y la opresión política cerrar filas junto al Frente de Izquierda y los Trabajadores el 14 de agosto”. Lo mismo les decimos ahora a los compañeros de PTS.
A. S.
PTS: una postura equivocada
La política de PTS de lanzar sus precandidaturas y de reivindicar las internas proscriptivas de las PASO, la consideramos completamente equivocada. Porque cuestiona los acuerdos ya alcanzados en el FIT -el cual funciona por consenso y mecanismos de rotación de los cargos-. PTS vuelve a insistir con el mecanismo de las PASO para dirimir las candidaturas internas del FIT, una trampa antidemocrática y proscriptiva que ya fue rechazada el año pasado. Por eso no se entienden los justificativos de PTS de que su política es para “fortalecer al FIT”.
El argumento de que la pre candidatura presidencial de Del Caño obedece a un necesario “cambio generacional” dentro del FIT, solo existe en la mente de PTS. Nadie ha planteado, ni mediáticamente, ni a nivel de los votantes o de una vanguardia que reivindica al FIT, que ése es el eje por donde deban pasar las preocupaciones del FIT para encarar en mejores condiciones la campaña electoral de 2015. Lo que se reclama es lo opuesto, que el FIT salga con fuerza a enfrentar a los políticos corruptos y patronales.
PTS quiere ir a las PASO
“Nosotros nos hemos presentado solamente como precandidatos para una discusión fraternal dentro del frente, sin descartar las PASO como último recurso de no haber acuerdo”, señaló en un comunicado el presidenciable Del Caño (Prensa PTS, 7/11). Esto confirma que PTS vuelve a insistir con este mecanismo tramposo.
¿Qué quiere decir que “si no hay acuerdo” no se descartan las PASO? Que si no se acepta la propuesta de PTS de que Del Caño vaya a presidente, o alguna otra de sus pretensiones, habría que llevar al FIT a dirimir las candidaturas en las PASO. Algo completamente equivocado y fuera de lugar. No solo porque tanto Izquierda Socialista como PO nos hemos pronunciado en contra, sino porque es nocivo para el FIT.
Dirimir mediante un mecanismo tramposo del régimen el orden de las candidaturas internas del FIT es un despropósito absoluto. Una desviación electoralista que no se puede aceptar en la izquierda revolucionaria.
Esta postura de PTS, además, es funcional a partidos anti-FIT, como el MST de Bodart-Ripoll, que se han lanzado hace meses al ruedo electoral diciendo que hay que “usar las PASO” para dirimir candidaturas entre la izquierda revolucionaria del FIT y la centroizquierda que el MST encarna, convocando también a De Gennaro (¡¡¿?), cuando esto no está planteado en la realidad, confundiendo al electorado. PTS, con su postura, alimenta todo esto, para que la prensa diga que ahora la “izquierda” tiene tres candidatos, (Altamira, Del Caño y Bodart), igualando al MST con el FIT, cuando el FIT es un fenómeno electoral por su unidad y porque combatió a todas las variantes de centroizquierda como la que encarna el MST.
Competir lista contra lista dentro del FIT como propone PTS, haciendo campaña, por ejemplo, Del Caño versus Altamira, es una política que atenta contra el FIT.
Lejos de ser “cautivante” y un “aliciente”, como argumentó PTS años atrás, ir a las PASO a dirimir entre candidatos del FIT (posibilitando que cualquier persona, sea del PRO o el PJ puedan decidir quiénes deben ser los candidatos del Frente de Izquierda), generaría desmoralización.
Además, la propia ley de las PASO impide compartir la fórmula presidencial entre dos fuerzas si no van en una misma lista. Quiere decir que los candidatos de la lista del partido que gane, sí o sí deberían ocupar los cargos a presidente y vice, quedando la fórmula presidencial de esa forma hegemonizada por un solo partido. Lo mismo pasaría con los cargos de gobernador y vice, rompiendo los equilibrios ya logrados en el FIT.
PTS le lava la cara a las PASO, cuando tenemos que enfrentar unidos el piso proscriptivo del 1,5% que nos impone, los famosos 400 mil votos que tuvo que superar el FIT para poder participar en las presidenciales pasadas.
Cerremos filas en defensa de la unidad del FIT
La rotación de las bancas también hacen a la unidad. Defender los acuerdos ya alcanzados en el FIT, a su vez, pasa por reivindicar ese mecanismo para que todos los partidos las podamos compartir. Nuestra compañera Angélica va a entregar a fin de año la suya en Neuquén para que la ocupe la compañera Suppicich de PO (como los primeros años la ocuparon López y Godoy de Zanón). Nuestra compañera Liliana Olivero de Córdoba dejó su lugar el año pasado a la compañera Cintia Frencia (PO). Lo mismo tendrá que hacer el compañero Pitrola para que ocupe la banca nacional Myriam Bregman (PTS) y luego la continúe Giordano de Izquierda Socialista. Y así en Capital, Buenos Aires, Santiago y demás distritos.
Llamamos a los compañeros de PTS a reflexionar. Y a volver a los mecanismos que hicieron grande al FIT. Enfrentando unidos a las PASO y todo el desafío electoral próximo.
J.C.G.