El presidente de Bolivia, Evo Morales, consideró que la muerte de Nisman fue “una emboscada” contra el gobierno K. Dijo: “Cuando fracasan con una agresión económica a la Argentina, ahora preparan una agresión política, como una emboscada a la compañera Cristina con la muerte del fiscal”. Y agregó: “agresiones usando inclusive hasta fiscales muertos [...] ya no pueden hacer golpes de Estado, ya no pueden dominarnos militarmente, entonces buscan otras formas de golpe, de escarmiento, de amedrentamiento, especialmente a los presidentes antiimperialistas” (Página12, 28/01).
Evo Morales vocifera la campaña de los gobiernos latinoamericanos a la que nos tienen acostumbrados. Una cortina de humo para intentar tapar que Evo, Cristina, Dilma o Maduro gobiernan para las multinacionales y contra el pueblo con planes de ajuste capitalistas.